Capítulo 10

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Fred Weasley

Dos horas, dos malditas horas en interrogatorio, Narcissa Malfoy nos hizo todo tipo de preguntas desde las más simples hasta las más íntimas.

- muy bien después de todo esto, creo que son buen partido para mi hijo - dijo Narcissa mirando su libreta.

Suspiramos aliviados, al parecer nos ganamos a nuestra suegra, de milagro salimos vivos del interrogatorio con Lucius Malfoy, hubiéramos perdido muchos puntos si Narcissa Malfoy no nos acepta, su opinión es muy importante para Draco y tener su apoyo nos facilita un poco la cosa.

- pero necesito que respondan una última pregunta - dijo ella mirándonos con una expresión seria - ¿qué es lo que aman de mi hijo? - pregunto con un tono neutro pero curioso.

- su sonrisa, sus ojos que con solo verlos te pierdes es ellos, su voz -

- la manera en la cuida a sus amigos, su verdadero ser al estar con las personas que quiere, su determinación y cuando habla de un libro que ama -

- ¿un libro que ama? - pregunto Narcissa.

- es simplemente hermoso, cuando habla de un libro que le gusta sus ojos tienen un brillo especial, es mágico escucharlo hablar, lo perdemos por un momento pero vale la pena perderlo cuando habla de algo que ama - termine de decir.

Narcissa no dijo nada y se quedó viendo su libreta.

Me quedé pensando en lo que había dicho y no mentí en nada, verlo hablar de algún libro que le gustó es maravilloso, sus ojos se iluminan, su voz se llena de ilusion al hablar, nos contaba de sus libros cuando estábamos en nuestra forma de animagos, pero en estos días no ha tocado ningún libro.

- ¡listo termine! - grito Narcissa sorprendiendo a mi y a George - gemelos Weasley tienen mi permiso para salir con mi hijo, eso sí, le hacen daño y yo misma los mató con mis propias manos - dijo con un tono calmado y de advertencia.

George y yo sonreímos felices, logramos ganarnos a nuestra suegra, Narcissa Malfoy esta de nuestro lado, abraze a George con toda la felicidad que sentía en estos momentos.

- les doy un consejo, háganlo reír, aunque el no lo admita adora a las personas que saben hacer que su mascara de hielo se caiga con un sonrisa - nos dijo la con un tono divertido - no pase con el nueve meses dentro de mi y varias horas de parto para no saber lo que le gusta, también sean detallistas, adora los regalos, en eso creo que Lucius y yo somos culpables, lo concentimos mucho de pequeño - se levantó del sillón y salió del salón.

Me quedé quieto mirando a George, ambos salimos del gran salón y vivos una puerta que llevaba al patio de la mansión y algo nos decía que Draco estaba allí.

- hacerlo reír y darle regalos, en estos momentos odio no tener dinero - habló George.

- pues hay que preguntarle si acepta regalos hechos a mano, tal vez allá esperanza - trate de sonar positivo.

Algo que está de nuestro lado es que sabemos como hacer reír a la gente, por algo somos los mejores bromistas de Hogwarts.

Caminamos por el gran jardín que tenía la mansión, era hermosos sus arbustos estaban bien cortados las flores estaban bien cuidadas y un chico rubio miraba unas bellas flores color blanco.

Caminamos hacia él para asustarlo, quedamos cerca de él listos para darle un susto cuando él habló.

- ya se que están allí gemelos - dijo mientras se volteaba a vernos - veo que salieron con vida de las garras de mi padre - dijo con un tono burlon.

- en nuestra defensa tu padre da miedo, asusta mucho cuando habla con un tono de voz bajo y sombrío - dije sonando asustado, Lucius Malfoy podía llegar a ser aterrador cuando el lo quisiera.

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