Nuestra Obsesión

Capítulo 23

George Weasley

Ya llevamos tres meses desde que iniciamos este último año y no está siendo del todo bueno. Iniciando por la terrible y horrible llegada de cierta mujer.

– señor Weasley ¿me está escuchando? – escuché la horrible y chillona voz de Dolores Umbridge.

– si la estoy escuchando – respondí sin interés.

– que insolente, está castigado una semana señor Weasley, ahora todos váyanse – exclamó Umbridge con molestia.

Todos salimos del salón casi corriendo, desde que ella llegó a Hogwarts todo a sido horrible, sin mencionar los miles de decretos que pone ella al día. Lo único que nos a parecido divertido es hacer una que otra broma y por supuesto estar con Draco.

Y hablando del rey de nuestro corazón, justo viene caminando junto con Pansy y Blaise.

– Buenas tardes mi rey – dije agarrandolo del brazo.

– hola bromistas, ¿no han sentido la necesidad de querer matar a Umbridge? – preguntó Draco derrepente.

– si nos dieran diez galeones cada vez que pensamos eso seríamos millonarios – dijo Fred.

– ¿por qué lo preguntas?, la vamos a matar – hable emocionado.

– ustedes no lo harán, Hermione me pidió a más no poder que dejara que ella matara a Umbridge – dijo Draco empezando a caminar.

Empezamos a caminar por los pasillos sin decir alguna palabra, aveces hacíamos eso, solo caminar y disfrutar de la presencia del otro, era encantador hacer eso sin ser molestados.

– saben ustedes han sido los únicos con los que me he sentido de esta manera – hablo Draco rompiendo el silencio.

Habiamos parado cerca del salón de encantamientos y el pasillo estaba casi vacío.

– nunca creí que llegaría a amar a alguno de ustedes, más bien a ningúna persona que llevara el apellido Weasley – dijo apoyándose en la pared.

Fred y yo cruzamos miradas emocionados, Draco nos había dicho que nos amaba, nos quedamos parados a centímetros de Draco, pero yo me empecé a acercar lentamente.

– Draco, ¿puedes repetir lo que dijiste? – pregunté en modo juguetón.

– no, se muy bien lo que quieres que repita y no lo haré – me dijo cruzadose de brazos y cerrando sus ojos.

Se veía como un adorable niño pequeño.

– por favor –  me siguió Fred el juego.

– no –.

Le empezamos a hacer cosquillas y él empezó a tratar de contener sus ganas de reirse, sus carcajadas empezaron a hacer eco en el vacío pasillo, siendo música para mis oídos.

– ya... ¡Los amo! –grito haciendo que dejaramos de hacerle cosquillas – los amo a los dos –.

Lo mire y note que trataba de calmar su respiración de tanto reírse, tenía la boca entre abierta y sus labios se veian bastante tentadores.

– ¿tengo algo en mis labios? – preguntó Draco.

Sonreí, tomé si cuello y lo bese, sus labios en total sincronía con los míos unidos en un apasionado beso. Me separe de él mirando fijamente sus ojos grises que tenían la pupila dilatada.

Fred agarro a Draco de la cintura listo para besarlo también.

– ¡señores Weasley y señor Malfoy! – grito dolores haciendo que Fred se separada de Draco – al fin los encuentro, los descansos durarán menos tiempo desde hoy así que vayan a sus clases – dijo mientras se iba con su molesta sonrisa arrogante.