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Nine

Contacto

Después de haber hablado y de recibir una sarta de regaños como también de impropios y unos cuantos golpes por parte de Shirou, quien modulo la voz al recordar que tenía a Yukimura a una sola pared, lograron hablar del tema que Shuuya abordo con finos detalles, he ahí por que recibió los golpes e insultos.

Una hora más tarde abandono el sitió con una sola respuesta que Shirou le resumió: No te le acerques.

Algo semejante se esperaba por parte del otro, Fubuki era de aquellos que procuran el bienestar de otros antes que el propio, y por ello mismo tenía el problema mayormente atorado dentro de sus pantalones cada que Yukimura llegaba o se iba. Pero ese era un asunto que en verdad le importaba poco, con tener al mayor como oyente le era suficiente.

Días más pasaron, y el momento esperado por los hermanos Tsurugi y Souji llegó. La operación a primera hora de la mañana, los dos menores junto al padre de Okita se encontraban a tempranas horas en la la habitación donde se preparo a Yuuichi para poder entrar a operar.

Era demasiado los nervios, pero mayor la esperanza puesta en los cielos para que todo saliera bien, las palabras de animo eran mas pronunciadas por Yuuichi que por el otro por, animando a sus hermanos para que tuvieran lo que seguro tenían, las caras largas.

—Es hora –anunció una amable enfermera acompaña por una más y un camillero.

—Pronto estaremos todos unidos como familia –hablo con serenidad y una sonrisa Yuuichi, dejando el contacto con Kyousuke quien no le soltaba la mano en todo el rato antes de ese momento.

En otro lugar al mismo tiempo que se lleva a cabo la operación, Hyura y Asuto daban una vuelta por el centro comercial, sabían los amigos de Kyousuke sobre la operación, y al no poder estar todos en el hospital, y tener los nervios a flore de piel, este par optó por caminar.

Y cualquiera podría asegurar que ellos eran una pareja, y gustaba Hyura de imaginar ello, pero también era realista sabiendo que Asuto en ningún momento compartía esa idea, ni ahora ni en ningún otro momento, dolía, pero al menos podía estar a su lado, escucharlo y poder ver sus sonrisas.

—¿Estará bien Kyou? –saliendo de su mundo, Kirina observó a Inamori quien se encontraba preocupado.

Posó la mano en el hombro ajeno y sonrió ligero —Yuuichi es fuerte, y se que Okita y Kyou estarán bien.

Aquello aligero solo un poco de las dudas y preocupaciones que el chico tenía hacia la familia de su amigo, pero teniendo presente las palabras de su amigo ahí alado.

Todo estaría bien.