LO QUE QUIERO OLVIDAR ( En Proceso) 1

¿Nuevo comienzo?

Hora local en Naife seis de la tarde diez grados centígrados

Mi mente se encontraba en un vacío, venían y se iban mis pensamientos vagaban entre mi habían pasado varias semanas ya eso creo era un mes ni la cuenta sabía. Había estado yendo donde la señora Olga para que me pusiera los sueros y en los próximos días tenía que ir al doctor para un nuevo chequeo y le temía a eso no quería saber si eran buenas o malas noticias lo que me mortificaba era ocultarles eso a mis padres y a mis amigos supuestamente estaba perfectamente.

—¡Lelya! ya estas lista te esperan- grito mi mamá desde la planta baja.

Esta noche íbamos a un autocine cada uno en su auto, pero acompañados como yo tenía a nadie Johan me hizo el favor de pedirle a Jackson que viniera, deteste en el momento en me lo dijo, él iba a esperarnos ahí y ese era mi motivo para no apurarme.

—¿Por qué te demoras tanto?

Escuche el reclamo de Maite al otro lado de la puerta.

—No quiero ir.

—No seas así ya estamos todos.

—De verdad no quiero.

—Te sacaré la fuerza, no dejare que te sigas hundiendo en esas cuatro paredes.

Suspiré y salí viéndola arrimada en la pared con una falda y un top dorado.

—Ya que, vamos.

Me rendí.

—Te has puesto guapa y un buen culo se te ve.

—Deja de verme el culo Maite.

—Es que es imposible no verlo con ese pantalón tan apegado.

La miré y ella rio alzando las manos y sus cejas, reí igual que ella.

—Estas muy guapa cariño— me dio una vuelta mi mamá, —vayan y diviértanse.

—Gracias mamá —le di un beso en su mejilla.

Me fui directo por mi auto y Maite se fue con Nicolás, lo encendí quedándome unos minutos ahí pensando en la nada si en la nada ya no tenía pensamientos que me hicieran poner triste por el momento mis lágrimas ya se habían secado. Suspire y tome el camino poniendo música en bajo volumen que hiciera compás con el frío de la noche. Llegué a mi destino y el frío era más intenso, había bajado el clima por suerte tenía una chompa de repuesto igual teníamos que quedarnos en el auto.

—¡Lel! —tocó mi ventana Johan.

Baje del auto con un fuerte viento que hacía que se me moviera todo a su alcance.

— ¿Se cancela? —dije con una sonrisa malvada.

—Chistosa— rodeo los ojos ,—haya esta Jackson —apuntó con su mano.

—Que venga, no voy a ir por el.

—Terca y orgullosa como siempre —hizo un movimiento de no con su cabeza.

—Así me quieres.

—Por mala suerte si.

— ¡Hay! —le pegue con el codo.

—Te dejo ya viene— me guiño.

Me agarre el pelo esperando que él se acercara traía con él una bandeja grande de canguil creo era dos vasos con que no sé qué no sea alcohol basto, me había prometido a mí misma no volver a beber por un buen tiempo.

—Hola... —Hizo como si se le había olvidado mi nombre.

—Hola, sube.

Me subí primero abriendo la puerta de él para que entrara.