Leilani

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Lo odiaba 

Eso fue lo primero que pensó  cuando apareció en un enorme bosque . Su charla  con ese dios mensajero le cayó relativamente bien era demasiado preguntón . Se tuvo que tragar varias veces su veneno cuando preguntaba algo demasiado privado, y las estúpidas voces en su cabeza no le ayudaron en nada. Hermes pensó que era hijo de Hefesto, una perla azul dijo el lugar y ¡ Puf ! estaba en el bosque .

Agradecía que Tony estaba dormido si no, no sabría que hacer , transfiguro su ropa a una más decente y algo de césped en una manta . Parece ser que la Suerte Petrova ya era de el por qué llegó de noche con un frío horrible que en cualquier momento llovería a cántaros . Soltó un gruñido y camino hacia donde la estúpida vocecita decía

-  Dime qué escuché mal - apretó el agarre de el pequeño

" Temo decírtelo .... Pero no lo hiciste "

- ¡ Mierda ! - maldijo en voz baja para sacar su varita y ponerle un silenciador a su pequeño - más vale y mandes caballería dios inútil si no quieres que te corte la cabeza

" Un grupo va a por ti será mejor que te escondas "

Dionisio sonaba algo ansioso ( como no si escucho un rugido de un Minotauro y el con un bebé ), apresuró el paso mientras seguía maldiciendo a diestra y siniestra .

" Si logras pasar el árbol estarás a salvo "

Severus escucho de nuevo el rugido y decidió correr . Miro por el rabillo del ojo al centauro que comenzaba a perseguirlo , relajo un poco sus nervioso y de un movimiento rápido se voltio .

- ¡ Septumsempra ! - logro hacer que el Minotauro redujera la velocidad al cortarle algún nervio ( como extrañaba su oficina ) - ¡ Dime qué ya vienen !

" ¡ Te juro que envíe a alguien , esos malditos mocosos que no saben que hacer ! "

Los dos estaban histéricos mientras que el azabache corría , vio a lo lejos el árbol y apresuro más su correr . Justo estaba por cruzar cuando sintió como el Minotauro lo taclea va, logro evitar el impacto en su pequeño.  Con miedo reviso a su pequeño y soltó un suspiro de alivio al notar que no tenía nada .
Con algo de pesar paso a su pequeño atrás de la barrera y el se volvió a el Minotauro con la mirada furioso, nadie se atreve a atacarlo por la espalda  .

Felix FelicisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora