4. Sultán Mustafa

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[Narra Mustafa.]

No entiendo que pasa por la cabeza de Hurrem, ¿por qué rechazó ser mi concubina?

-Muy hermosa pero es demasiado tonta que hasta su elección me parece un insulto.

La muerte de mi padre me dolió porque en mi corazón siempre he querido la atención de el y una familia perfecta con mi madre aunque eso no salió bien por culpa de Hurrem. Pero debo permanecer fuerte y si es necesario indiferente.

"Quizá esté llendo demasiado lejos protegiendo a Hurrem pero ella tiene la culpa."

Cuando era niño la primera vez que conocí a Hurrem la ví como un angel caído, su sonrisa risueña y esos ojos encantadores...

Esa vez no pude evitar tocarle el rostro admirado por la belleza de esa mujer, ella nunca me ha tratado mal que yo recuerde, fue gentil conmigo a pesar de ser hijo de otra mujer.

Empecé a odiarla desde que me había enterado de que era la concubina de mi padre, no solo por el hecho de que esto provocara la separación de mi madre y mi padre sino que ella era mi primer amor.

Por eso tengo celos desde que nació Mehmet, ya no podía hacer nada para decirle a mi padre lo mucho que me agradaba esa mujer.

A Mirimah la quiero mucho mas como una hija que como una hermana, hubiese sido mejor que ella fuera mi hija y no mi hermana.

Selim, Bayaceto son como los hermanos que he querido proteger.

Y en cuanto a Cihangir, es al que he dedicado a ser su guardián cuidando de el cuando se me ha dado la oportunidad sin que Hurrem se la pasé atravesandose en mi camino.

Odié mas a mi padre desde que fue coronado Sultan para meterse en un sistema donde todos los sultanes tenían ese Harem. No sabía que ser Sultan era causarle daño emocional a las esposas.

Incluso si le dije a Hurrem que iba a ser ejecutada no lo hubiese permitido.

Lo peor de todo, ella se niega a tener hijos conmigo porque sigue amando a Süleyman a pesar de que la traicionó con una de los persas. Firuze.

Süleyman no la merecía, eso me enoja mas pero ella tiene la culpa por meterse con el.

Ella es demasiado ingenua.

-Si ella se niega a darme hijos, no voy a eliminar mi Harem.

Yo no soy como mi padre, pero no voy a perder mi tiempo si ella me rechaza.

Hurrem, ojalá te arrepientas de eso.

Miré hacia el vació de algun lugar tratando de tranquilizarme hasta que decidí salir de la habitación, pronto voy a tomar los aposentos de mi padre. Este palacio ya es mío y siempre lo ha sido.

Busqué a mi madre quien se quedó en la habitación de mi difunto padre. Ella parecía estar alegre por su partida mirandolo en silencio, sabía que lo estaba maldiciendo en pensamientos hasta que decidí entrar.

-Madre.

Se giró a mirarme quitandose una lagrima de su ojo antes de hacer reverencia ante mi.

-Hijo mío, eres Sultán ahora ¿No estas feliz?

Me acerqué a ella para tomar ambas manos antes de sonreir. Despues de la tormenta viene la calma.

-Mas de lo que se imagina madre sultana.

-Lo hemos conseguido Mustafa, hemos vencido a la arpía pelirroja. ¿Cuando te harás cargo de sus hijos?

Instintivamente solté las manos de su madre, sabía que esto no iba a terminar bien para ella.

-Madre, he decidido enviarlos lejos y tienen prohibido el acceso al palacio sin que yo de la autoridad para hacerlo.

A mi madre se le borró la sonrisa de mi cara.

-¿Como? ¿No vas a ejecutarlos?

-Aprecio a los hijos de Hurrem, no tienen culpa de sus padres.

-No estoy de acuerdo Mustafa, deja el sentimentalismo por ellos, se te puede ir de las manos sin darte cuenta ¿Que pasara si mandan a alguien para asesinarte?

-Sé lo que hago madre, solo confía en mi.

Sin embargo ella negó su cabeza.

-Recuerda que son hijos de esa mujer, son mas astutos que su madre.

-¿Está subestimando mi inteligencia madre?

-No lo estas entiendiendo Mustafa, ¡Algun dia los hijos de Hurrem van a cortarte la cabeza al tener la sangre real!

Suspiré.

-Ya que usted se niega a creer en mi inteligencia. Le diré que tengo espías ocultos, si ellos se burlan del Sultan, no dudaré en atacarlos, aun son pequeños por eso les perdono las vidas si Mirimah y Mehmet se encargan de sus educaciones pero al crecer, si ella le enseña lo contrario. Rodaran cabezas por eso confíe en mi.

-¿Crees que Mirimah es buena?-Dijo con desconfianza.

-Fuimos unidos de niños, ella debe de saber lo que es sentirse agradecida ahora que tengo a su madre en mis manos.

Eso alertó a la sultana.

-¿Que tiene que ver Hurrem en esto?

-Ella será mi esclava.

Y solté la explosión.

-¡¿Que?!

-¿No está contenta madre?

-¡Creí que te desharias de ella! ¡Puede envenenarte!-Gritó completamente enojada.

-¿Quien va a envenenarme Sultana? Si eso llegara a pasar investiguen por mi y si realmente Hurrem es responsable podrás vengarte de ella por perderme pero... Si algo no concuerda con Hurrem y es uno de sus trucos, que la perdone Allah en caso de que sobreviva, la expulsaré del palacio.-La señalé con el indice advirtiendole si se mete con Hurrem.- Uno de los errores mas imperdonables es la traición madre, espero que no traicione a su propio hijo por culpa de Hurrem. Y eso va para Hatice e Ibrahim si ellos no hacen bien su trabajo, por que si se hunde usted el resto se van a hundir por complicidad.

-Pero Mustafa...

-No se meta en asuntos del nuevo Sultán.

Dicho eso me marché de ahí sin mas que decir

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Dicho eso me marché de ahí sin mas que decir.




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Al día siguiente me han nombrado el sultán.

Mi padre fue sepultado ayer por la noche y mis hermanos se estan despidiendo de Hurrem.

No he visto a Hurrem en todo el día, respeté su tiempo privado antes de que mis hermanos tengan que partir, pasaré despues para encargarme de despedirme de estos.

Ahora que todo el palacio es mío, cambiaré las reglas a mi beneficio sin dejar de ser justo con todos.

Me he librado del difunto Sultan Süleyman.

Las eras solo evolucionan.

Mi era, ha comenzado.

𝑅𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑎 𝑎 𝑞𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑡𝑖𝑒𝑛𝑒𝑠 𝑒𝑛 𝑓𝑟𝑒𝑛𝑡𝑒 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora