𝑅𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑎 𝑎 𝑞𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑡𝑖𝑒𝑛𝑒𝑠 𝑒𝑛 𝑓𝑟𝑒𝑛𝑡𝑒

25. Los sentimientos de Roxelana revelados

(Debido al bloqueo mental me tardé en actualizar, pido paciencia si me tardo de nuevo xD)

[Hurrem Narra]

Fue una mala decisión encontrarme a Sumbul en las afueras del palacio.

Ahora estoy en el calabozo pero no llevo tanto tiempo solo unos cuantos minutos para luego ver al sultán aparecer en la puerta de la celda.

Me acerqué a la puerta de la celda antes de hacer reverencia.

Mustafa se me quedó viendo con seriedad.

—¿Que es esto Hurrem? ¿Un juego de niños?

—...—Mire hacia abajo apenada.

—¿Como te atreves a huir de tu sultán?

—...—No sabía que decir.

—Habla ahora mismo.—Me ordenó.

—Usted ya lo sabe sultán ¿Que respuesta espera de mi parte?

—No entiendo de que hablas.

Levanté mi mirada con el ceño fruncido.

—Usted mandó a una sirvienta a escuchar mis conversaciones con Sumbul, ¿como puedo permanecer aquí si no tengo ni una decencia de privacidad?—Mustafa se sorprendió al darme cuenta de su truco.

—¿Quien te dijo eso?

—Yo misma descubrí todo.—Lo miré con una ceja alzada como si hubiera hecho un descubrimiento valioso.

—¿Y por eso intentabas huir?—Me preguntó llevandose una mano en la boca para analizar mi comportamiento.

—Bueno yo no le llamaría huir, solo esconderme.—Me crucé de brazos.

—¿Por que hacer eso?—Me miró incredulo como si no estuviera bien de la cabeza.

—No me siento lista para verlo a los ojos sultán, invadió mi privacidad.—Le juzgué con la mirada.

Despues de eso el sultán rió.

—Dejemos esta tontería Hurrem, ¿Tu privacidad tiene que ver con difamarme acerca de que te hice un amarre?

Me sonrojé al recordar lo que le dije a Sumbul Aga.

—Tambien eso...

—¿Crees que yo tengo algo que ver con tus sentimientos Hurrem?—Me miró como si dijiera la cosa mas tierna del mundo, me mira con una sonrisa enternecida.

—Usted me hechizó, admitalo.—Lo miré con desconfianza.

El sultán se puso a reir de nuevo, me siento avergonzada y se lo hago saber.

—¿Que es tan gracioso?

Me miró de arriba a abajo antes de levantar ambas cejas.

—Si yo contratara a una hechicera ¿como es posible que pienses si quiera evitarme?

—Sea como sea, sé que hizo algo y no lo niegue.—Retrocedí un poco no por sentirme intimidada, me siento intimidada por mi misma con los sentimientos.

"Aquí yo soy la manipuladora no tu."

—¿Como te atreves a difamarme? ¿No sabes quien soy?—Se acercó mas a la reja en un paso de confrontación.

—Si sultán, se quién es pero usted no es un ser de luz como piensa creer a todos.—Le recordé.

—Es cierto, pero si tu y yo no somos inocentes ¿por qué juzgarnos del uno al otro?—Me guiñó el ojo sin despegar la mirada hacia mí.