𝙴𝚅𝙴𝙽 𝙸𝙵 𝙸 𝙳𝙸𝙴 | 𝙺𝙾𝙾𝙺𝚅

V

Después de haber encargado a uno de sus hombres el llevar a los cachorros al veterinario, nuevamente se dirigió a su hogar, pues aun tenía cosas pendientes con la causante de su creciente preocupación.

Una vez cruzaron aquella reja de seguridad, únicamente podía pensar en la mejor manera de matar a la mujer, pues estaba seguro de que Yoongi ya habría conseguido la información que necesitaban, o al menos parte de ella.

En la entrada de la residencia se encontraban Jimin y Namjoon esperando atentamente a su llegada.

—¿Consiguieron algo más? —preguntó cuando los tuvo de frente.

—Sí, no sólo eran un par de camionetas, al parecer mínimo eran quince, por lo que puede que escoltaban a alguien o sabían que actuarías de manera rápida. —comenzó Jimin, mientras los cuatro hombres caminaban a prisa hasta aquel sótano donde se encontraba el esposo del mencionado— El hombre que se encargó de pagarle a Miriam, se llama Lee Huan, es un prófugo acusado por malversación y lavado de dinero, los hombres que conducían las principales camionetas son Ian McKellen y Shwan Lamston, ambos ex miembros del grupo de Seguridad personal de Jackson Wang, simplemente no se sabe cuales fueron las razones de sus despidos.

El hecho de que nombraran al chino hizo que cierta incertidumbre se acrecentara en él, pues la relación entre ambos era por demás excelente, definitivamente había alguien que planeó esto con lujo de detalle.

—Los demás conductores son tipos sin importancia, con la excepción de Carter Larson.

—¿El hijo mayor de la familia Johnson? Ese maldito esta detrás de todo esto, estoy seguro. —Hoseok fue quien interrumpió de manera colérica.

—No fue él. —aseguró fríamente, Jungkook.

—¿Cómo está seguro? — esta vez fue Namjoon quien interrumpió.

—Si bien los Johnson decidieron deshacerse de Carter con el único propósito de mantener nuestra alianza, y él puede que me odie en sobremanera, definitivamente no tiene los recursos para contratar a hombres que trabajaron para Wang. Alguien debe haberse aprovechado de su odio ciego, capturen lo, y Jimin, tú te encargarás de que hable.

El mencionado asintió, y se alejó para ir a reunir a cierta parte de la seguridad, pues mientras más pronto cumpliera con la orden, tal vez más pronto recuperarían a Aslan.

—Tiene sentido, y eso explicaría el por que las camionetas comenzaron a dispersarse entre intersecciones. En estos momentos estoy rastreando la dirección IP de cada tarjeta inteligente que había en los vehículos que identificamos, aunque me temo que tardará un par de horas más —Finalmente Namjoon terminó de explicar el avance que consiguieron.

—Buen trabajo, y gracias. —dijo inexpresivo, mientras esperaba como uno de sus hombres abría aquel cuarto en el que se encontraba Yoongi.

El hedor a sangre fresca era demasiado fuerte para haber sido producto de una sola persona, sin embargo, conociendo los métodos del pálido ni siquiera lograba sorprenderlos. Pues si bien estando fuera de sus interrogatorios era alguien fuerte físicamente, estando dentro era alguien totalmente diferente, y la imagen frente a ellos era prueba de ello.

Lo que alguna vez fue una mujer hermosa, ahora no era más que un bulto de hematomas, sangre, y cortes estratégicamente profundos, eran la cantidad suficiente para que su sangrado fuera abundante sin dejarla desangrarse del todo, además le faltaban las uñas en sus manos y no dudaban en que no había dedo que aún funcionará.

—Tu diversión se terminó Yoongi, dime lo que sabe —la voz de Jungkook resonó, provocando que la mujer le mirara aterrada, pues si el dolor que sentía solo era diversión, no quería imaginar lo que le haría ese hombre.