CAPÍTULO 6.

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Nᴀʀʀᴀᴅᴏʀ

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Nᴀʀʀᴀᴅᴏʀ

La atención de la joven fue captura cuando Marco ingreso a la tienda de juegos, al igual que se gano la atención del dúo de amigos. Una sonrisa divertida curvo sus labios viendo como su hermano y su amiga, se decidían por acercarse al contrario para poder hablar.

Atrapo el sorbete entre sus labios bajándose de su asiento para poder acercarse y escuchar la conversación. Se acerco, no mucho pero lo suficiente para escucharlos y para que el contrario la viera.

—Nosotros queríamos pedirte un favor.—Comenzo Elle.—Tendremos un stand de besos en la recaudación para el baile y queríamos saber si querías ser uno de nuestros besadores.—Le propuso.

La pequeña flynn, lo miro con diversión. Era de esperarse que iban a pedirle dicho favor, porque todas y todos, querían que Marco fuera parte de eso como sucedió el año anterior con su hermano mayor.

Era un clásico.

—No.

Contesto de forma muy segura ganándose miradas de sorpresa por parte de los tres contrarios que se miraron con asombro, casi sin poder creerlo.

—¿Por qué no?—Pregunto Elle.

La mirada del morocho hizo contacto con los intensos ojos verdes de la morocha, la cual lo miraba expectante por lo que fuera a decir en los siguientes cinco segundos.

Eso le dejaría en claro muchas cosas realmente.

—Tengo mis razones.—Musitó con tranquilidad dirigiendo su mirada al dúo de amigos mientras preparaba el palo para jugar pool.

La mirada de Luana, busco otra cosa en que concentrarse para evitar el sonrojo confuso en sus mejillas mientras se concentraba en ir por otra malteada a la barra.

—¡Oh, Vamos! Es el stand más porpular y es por una buena causa.—Intento convencerlo Lee.

Sus ojos cafés intentaron seguir a la ojiverde pero nuevamente tuvo que concentrarse en el dúo de mejores amigos que tenía a su lado, quienes no se rendían fácilmente.

Luego iría a hablar con ella.

[>>>]

Se quedo en la barra, con una nueva malteada de fresa entre sus manos. Los vio bailar, y eso la hizo sentir de forma extraña sabiendo que el contrario perdió y tendría que ser parte del stand al final.

Eso no le agradaba.

Porque todo siempre terminaba girándo alrededor de Elle, de una u otra manera siempre pasaba lo mismo.. Había perdido la cuenta de las veces que eso sucedía, lo único lejano a Elle que había encontrado era la música.

—¿Qué tal?—Se acerco con una sonrisa divertida en el rostro, apoyándose junto a ella en la barra de la tienda.

—Pensaba que tenías tus razones para no ser parte de esa tontería.—Musitó con seriedad llevando un caramelo a su boca, no estaba bromeando.

—Las tengo, pero una apuesta es una apuesta y tendré que cumplirla.—La miro sin borrar su sonrisa, restándole importancia al tema.

—Eso creo.—Se levanto de su asiento, agarrando su chaqueta.—Fue genial verte, Marco. Pero, debo irme con unas amigas.—Mintió de una forma poco creíble.

—Tú no eres buena mintiendo.—La acuso con diversión, ganándose una mala mirada por parte de la chica frente a él.—Eres muy mala haciéndolo.—Comento sosteniendola de la muñeca con delicadeza para que no se fuera aun.

—¿Por qué te mentiría?

—Tal vez intentas escapar de mi por alguna razón.—Su mano por inercia, acaricio ligeramente el brazo de la joven a la cual rápidamente se le erizo la piel, lo que la hizo alejarse sin pensarlo.

—¿Escapar de ti? En tus sueños. No empieces a creerte irresistible por lo que dicen en el instituto.. Es muy fácil ganarse la admiración de todos ellos para tu información—Contesto con seriedad haciendolo reír.

—¿Ni un poco? Vamos, tienes que admitir que un poco nerviosa te pongo cuando estoy cerca.

—En tus sueños, Mvp.































Eᴛᴇʀɴᴏs | ᴹᵛᵖ ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora