Tras el apretón de manos, Xingqiu quedó algo extrañado. Supuso que aquella persona era buena peleando, pero no que fuera capaz de tumbar tan rápido a su contrincante. Había visto a muchos caer ante el otro, y pensó que el joven sería otro más en la lista. Algo había en él que hacía desconfiar al joven de cabello azulado.
Poco después, salieron de la sala de entrenamiento se cambiaron las vestimentas, y se reunieron en el despacho del viejo Qi para recibir algunas instrucciones.
Minutos más tarde, Xingqiu acompañado de su nuevo guardaespaldas salían a reunirse con algunos hombres de negocios, mientras tanto, ciertas acciones eran llevadas a cabo contra una humilde panadería.
Unos hombres llegaban con una oferta para que cerrara el negocio, pero el dueño se negaba. No estaba dispuesto a ceder ante nadie cuando su negocio iba bien y era honrado, muy lejos de lo que parecían estar las acciones tras aquella repentina oferta. Al final se marcharon, no sin antes advertir al dueño del negocio que lo mejor sería aceptar.
- Vaya, vaya, son un tanto rudos. - Una chica de cabello verde llegaba a la panadería, lo cual parecía alegrar al hombre.
- Oh kuku, que sorpresa. ¿Lo mismo de siempre ? - La llamaba así debido a que esta le recordaba a un familiar, y llamarla por su nombre le era doloroso.
- Buenos días señor Tanaka. Si, y además me llevaré un par de estas galletas. -
- Bien, en seguida. -
- Dígame una cosa. ¿Es la primera vez que esos dos vienen?.-
- Si, aunque ya los hemos visto rondar varios días por aquí. A ellos y algunos más, no me dan buena espina. -
- Quizás lo mejor es dar parte a las autoridades. -
- No, la policía no puede hacer gran cosa hasta que es demasiado tarde. - sonaba triste, pero era cierto. Nada en la ley prohíbe entrar a un establecimiento de ese estilo, y realmente no habían tocado nada. De modo que no era de gran ayuda incluso aunque lo hubieran amenazado un poco.
- Puede que tenga razón, pero debería tomar precauciones. Tenga cuidado, la gente como ellos trae problemas. -
- Lo se, pero aun así, por el momento no puedo hacer gran cosa. - Kuki suspiraba mientras se despedía del hombre. Estaba segura de que no sería la última vez que escuchara de estragos por parte del mismo.
Por otro lado, Shenje había conseguido reunirse con el cabeza de la familia Morax...
- Se bienvenida, ¿te apetece algo de té?. -
- No, además no te quitaré mucho tiempo. Tan solo quiero saber toda la información que tengas sobre "la Zarina". Según mi maestra, eres de las pocas personas que podrían tener algo de información al respecto.-
- Ya veo. Tu maestra sabía a donde mandarte. Supongo que preservadora prefirió que yo te lo contará. - Zhongli se mostraba pensativo mientras la conversación avanzaba. Pero estaba seguro de algo, si esa mujer venía en busca de esa información en concreto, eso significaba que aquella mujer, se estaba movilizando. - Lo cierto es que se quien es, pero al igual que Barbatos o Raiden, no son personas que estén al alcance de cualquiera. -
- Lo mismo se podría decir de ti, Morax. Sin embargo aquí estoy conversando contigo. -
- Tienes un punto. Pero ella a diferencia de mi, no dejará que nadie se le acerque. De todas formas, ¿cuál es el interés? Y precisamente ahora. -
- Como te imaginarás no es solo por curiosidad. Escuché ese nombre en los suburbios, y al parecer no es coincidencia. Algunas personas han desaparecido. -
- Siendo así, supongo que podemos hablar un poco. Lo cierto es que La Zarina procede de otra región, sin embargo parece que desde hace un tiempo, se han escuchado rumores de que intentaba tomar el control de esta también. Pero algo en la misma es extraña, algo descuidada y pretenciosa, he de decir, incluso podría describirla como ambiciosa, la cual puede llegar a ser peligrosa, de echo... - Unos golpes a la puerta en señal de llamada interrumpían a Zhongli, el cual dio paso a que la persona tras la puerta entrara. Se trataba de su nuevo asistente, el cual saludó de forma encantadora a la dama delante suya.
- Buenos días, siento las molestias, pero le recuerdo al maestro que pronto será la hora de la reunión. -
- Cierto, gracias Childe. Lo siento Shenje, pero el deber me llama. Si lo deseas podemos continuar esta conversación en otro momento. -
- Si, tal vez en otro momento. Pero me gustaría que se comunicara conmigo si escucha algo más. Tengan un buen día. - Shenje se levantó y salió del lugar mientras Childe seguía conversando con Zhongli.
-Hermosa dama, ¿necesita que me haga cargo de alguna búsqueda por usted? -
- No, no será necesario por el momento. - Decía Zhongli mientras se levantaba y acercaba a su asistente.
Una vez delante del mismo, tomó sus gafas, lo atrajo hasta él y lo besó. Las mejillas de Childe estaban sonrojadas y de sus labios al separarse se creaba un pequeño hilo de baba. El más joven tapaba su boca y miraba hacia un lado tras el beso en señal de vergüenza, mientras el otro sujetaba la barbilla del pelirrojo para que lo mirara directo a los ojos. Al ver al joven nervioso, Zhongli sonreía y lo liberaba para acudir a la reunión que daría lugar en breve.
En la cabeza de Childe, solo se podían escuchar las palpitaciones de su corazón y el como se maldecía ya que el otro era tan condenadamente sexy, además de otros sentimientos entremezclados de culpa y miedo. De aquella temporada no saldría nada bueno.
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Fanfic ChongyungXingqiu
FanfictionHistoria de mafia, promesas, separación y reencuentros. Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Hoyoverse.