𝙆𝙊𝙄 𝙉𝙊 𝙔𝙊𝙆𝘼𝙉 // 𝙎𝙊𝙊𝙅𝙐𝙉

𝟯𝟳

— Junnie despierta, llegamos a casa...

La voz de su tío logro hacer que abriera sus ojos por unos milisegundos, parpadeo un par de veces encontrándose con la puerta del auto a su lado, levantó levemente su cabeza notando que se encontraba acostado en el asiento de lado, para no hacer presión sobre sus heridas, se incorporó con cuidado y observó por su ventana, y encontrándose en el estacionamiento interno de un edificio, paso su mano por su cabello y abrió la puerta para poder salir del auto.

Paso una mano por su rostro, frotando sus ojos mientras se dirigía a la cajuela dónde su tío se encontraba bajando las maletas.

— Bien, hay algo que debo decirte antes, tengo pareja —Dijo el mayor mientras sonreía levemente a la vez que cerraba la cajuela. — Tiene 27 años y es un chico...

— Eres homosexual —Dijo él con algo de cautela mientras miraba al mayor.

— Soy Bisexual, pero eso no importa, de seguro ya está en casa, me siento contento de que vayas a conocerlo —Dijo él sonriendo mientras colocaba su mano con cuidado en el hombro del menor.

Ambos tomaron una maleta y caminaron hacia el ascensor para poder subir hasta el piso en el que se encontraba el departamento del mayor, una vez allí, las puertas se abrieron dejándole ver el lugar en el, si bien no era algo lujoso, se notaba como un lugar sofisticado y no le era de extrañar, su tío a pesar de tener 25 años, estudiar medicina y trabajar durante las noches, siempre había tenido un estilo sofisticado, elegante y vintage a la vez.

Una vez que llegaron al departamento, TaeHyung abrió la puerta para dejarlo entrar primero, Yeonjun entro al departamento y camino por el pasillo, deteniendo sus pasos cuando escucho una voz que desconocía.

— ¡Al fin llegaste, me tenías preocupa...

Yeonjun observo algo nervioso al chico que apareció frente a él en medio del pasillo, dirigió su mirada hacia atrás para encontrarse con su tío caminando hacia ellos mientras sonreía ampliamente.

— Hola Yoonie —Dijo el mayor mientras dejaba la maleta aún lado y se acercaba para dejar un beso casto sobre los labios de su pareja. — Él es Yeonjun, mi sobrino, se quedará con nosotros por unos días

— Oh, hola Yeonjun, yo soy Min Yoongi... el novio de tu tío —Dijo el azabache sonriendo levemente mientras extendía su mano.

— Encantado de conocerte... bueno ya sabe mi nombre —Dijo él tomando la mano del mayor para estrecharla por unos segundos.

— Bueno, te enseñaré el cuarto, no lo ocupamos así que lo prepararemos para que te sientas cómodo ¿Sí? —Hablo TaeHyung sonriendo mientras tomaba la maleta nuevamente y caminaba por el pasillo.

Yeonjun no tardó en seguir los pasos de los dos mayores, quienes entraron a una habitación y le dejaron pasar, TaeHyung no tardó en abrir el closet y sacar la lencería de la cama para comenzar a hacerla junto con el azabache, quien parecía alguien un tanto frío, quizás solo estaba encasillando lo por el hecho de los tatuajes que tenía en su cuerpo, pero sin duda, era algo nuevo de ver para él.

— ¿Cuál es la razón de esta visita? —Pregunto el azabache mirándolo por unos segundos mientras esperaba a que el castaño extendiera las cobijas sobre la cama para luego acomodarla.

— No creo que...

— Mi papá me golpeó... —Dijo él cruzando sus brazos mientras desviaba su mirada. — Me he guardado demasiado en todos estos años... Creo que está bien si comienzo a decir lo que pienso y siento, y eso es la verdad...

— Claro que sí, puedes ser tú en este lugar y en cualquier otro, así que no te guardes las cosas, estoy aquí para ti y lo sabes —Dijo el mayor sonriendo levemente mientras lo miraba demostrando la calidez tan característica de él, así como lo era su madre.

Lunes por la mañana, no iba a negarlo, se sentía extremadamente cansado pues los últimos días había estado durmiendo mal, las pesadillas eran más frecuentes y era como si revivieran el dolor de las heridas de su espalda, la incomodidad de no poder dormir como le gustaría era demasiada, pero no podía recostarse sobre su espalda, lo único que quería era que las heridas desaparecieran de inmediato, al igual que los hematomas que ahora era un poco más claros.

— ¿Se puede saber que te sucede? —Aquel murmullo lo hizo levantar su mirada para dirigirla hacia Yujin, quien se encontraba sentada junto a él.

— Nada...

— Entonces ¿Por qué casi te quedas dormido? —Cuestionó ella mientras fruncía el ceño.

— No he podido dormir bien, solo es eso —Dijo mientras pasaba una mano por su rostro, sus ojos se encontraban hinchados, y no era solo por falta de sueño.

Mientras parpadeaba por unos segundos, tratando de no dejarse vencer por el sueño, el timbre sonó y él soltó un suave suspiro mientras se disponía a terminar de anotar unos apuntes en su cuaderno, una vez que los completo, tomo sus cosas y las guardo dentro de su mochila, se colocó su abrigo y colgó su mochila de un hombro para poder salir del salón y dirigirse hacia la cafetería en busca de un café cargado que lo ayudara a resistir el día sin caer dormido en algún pasillo.

— ¿Te parece si vamos juntos? —Pregunto la castaña llegando a su lado, él simplemente asintió. — Yeonjun, de verdad luces mal, ¿Estás enfermo o algo?

— Si, estoy enfermo... —Dijo él volviendo a asentir mientras metía una de sus manos dentro del bolsillo de su abrigo.

— Si quieres puedes irte a casa, puedo decirle al maestro, no es bueno que estés aquí si estás tan mal —Dijo Yujin haciendo una pequeña mueca.

Yeonjun paso una mano por su claro cabello y dirigió su mirada hacia el frente, se le hizo imposible no detener sus pasos cuando cierto azabache apareció en su campo visual, pero estaba de espaldas a él, solo podía ver su perfil, mientras escuchaba a sus amigos quienes hablaban de alguna cosa que en ese momento parecía lo menos importante, mientras entraba en pánico, se le hizo imposible no encontrarse con la mirada de Taehyun.

— Sabes... Iré a la enfermería ¿Sí? —Dijo el desviando su mirada hacia la castaña quien asintió de inmediato. — Gracias Yujin

Taehyun quien se encontraba apoyado en el casillero de su amigo, no tardó en incorporarse y golpear el brazo del menor quién dirigió su mirada hacia él con algo de desinterés.

— Yeonjun a la vista —Dijo el rubio haciendo que el azabache de inmediato volteara buscando al chico en cuestión.

Soobin no tardó en encontrarse con aquella cabellera rubia, caminando en la dirección contraría entre los estudiantes que se encontraban en el pasillo, sus pies no tardaron en comenzar a moverse y cada paso era más rápido que el anterior, pero que iba a hacer, tenía miedo, tenía ganas de abrazarlo y no dejarlo nunca más, pero él se alejaba y eso era lo que más aterraba.