no cambiare este es mi camino de logro y cambio.

capitulo 11: ombu, irse de viaje de entrenamiento.

A rock lee le habían plantado en la cita, pero ese dolor no es tan grande, haciendo 10000 sentadillas bajo la lluvia, siempre entrenando para demostrar que el trabajo duro y esfuerzo supera el talento natural, sabiendo que el entrena para superarlos, que todos conozcan el nombre de rock lee, ya era de día.

Naruto entrenando las técnicas que le falta dominar, en el bosque, creando un shuriken de poder dorado conectado a una látigo de energía lo hace girar por su alrededor, levantando pedazos del suelo, cortando un par de árboles, en eso siente una gran corriente de aire que viene corriendo a una gran velocidad.

Hermano, hermano –aparece naruko en un borrón de velocidad, usando las dos colas-

¿Eres tu naruko? –Pregunta asombrado de ver esa forma-

Si claro que soy yo, quien más tiene la otra mitad del zorro de las nueve colas –mirando por los costados, regresando a la normalidad la peli rubia-

¿A quién buscas? –Pregunta a la peli rubia, desvaneciendo la técnica de sus manos-

Haz visto a rock lee –responde rápidamente sin perder más tiempo-

Ve que su hermano se da la vuelta, mirando el cielo con una mano alzada, sonriendo al pensar que él le podría decir en donde entrena rock lee, esperando unos minutos y nada pasaba, regresa para mirarla y ser sincero, aunque no le perdonase por completo por no haberle apoyado antes, de saber que son hermanos.

No lo sé, de hecho no lo veo, solo cuando nos reunimos en ichiraku ramen con nuestros amigos –vuelve a juntar las manos, cerrando los ojos-

Ya veo, perdona por interrumpir tu entrenamiento –naruko se sube al árbol-

Naruto suspirando, era momento de dar un paso, le toca el hombro, contando con ella para entrenar, naruko sonriendo, aunque dentro de ella se sentía triste por lo que le fallo a ese chico que le había salvado la vida, ahora ambos hermanos entrenando juntos, pasando una semana hasta que los resultados de los exámenes junin les llamen a todos los que habían ganado.

Seguía entrenando con naruto, hasta pudo dormir en la misma casa, su madre le dejo para que ella si pudiese acercarse al rubio, pero solo entrenaban durante la tarde, ya que debían dormir, nadie entrenaba día y noche, solo un completo loco lo haría eso pensó naruto, pero sonriendo sabiendo que lee si lo hace.

Un fuerte ruido despierta a la chica rubia, levantándose de la cama, se cambia a su ropa naranja, lista para ir a ver ese ruido, sale por la ventana hacia la rama de un árbol, corriendo entre las ramas para llegar rápidamente, llegando a una montaña que está lejos de la aldea secreta de la hoja.

Sí que es molesto el ruido, un momento, si esta tan lejos, como yo logre escucharlo –se sienta en el árbol, colocando su cara entre sus manos la chica-

"ese fui yo cachorra, active los oídos asombrosos que tengo" –se escucha una voz en su interior-

Debía suponerlo antes –se da media vuelta para regresar a la cama- tengo sueño, es muy tarde para entrenar.

En eso se escucha nuevamente ese fuerte estruendo, ahora más fuerte al estar cerca, parpadeando se da cuenta que es una roca gigante circular que baja por la montaña, en eso está para en seco, la roca circular tipo bola, está subiendo de regreso a la punta de la montaña.

Wow... tanto sueño tengo que estoy viendo cosas –dijo sobándose los ojos la peli rubia de dos coletas-

Acercándose más, logra ver algo que logro que abre la boca, quedando con los ojos de estrellas, ya que la enorme roca no rodaba sola, es rodada por rock lee, al punto de llegar, una roca más cae rodando, chocando con la enorme roca que subía lee, volviendo a bajar, tal fuerza, que es jalado hacia atrás, pisando fuertemente, paso a paso sube.