Revenge | Kazufuyu.

09

— ¿Qué? – espeté.

— ¿Me mentisteis? ¿Cómo pudisteis? – le siguió Mikey cómico recibiendo un manotazo de Draken.

— ¡Una cita! – repitió Baji con las mejillas sonrojadas.

— ¿Quieres que te ayudemos a pedirle a Chifuyu salir contigo? – dijo Mitsuya y él asintió.

— ¿Por qué no le pides ayuda a Takemichi? Es el mejor amigo de Chifuyu y ya tiene una novia seguro sabe lo que se hace en una de esas cosas – argumentó Mikey.

— Oh por dios ¡eres un genio! – las pupilas de Baji crecieron y casi pude verlos brillar de la emoción – iré a verlo ahora, ya vuelvo

Acto seguido se dirigió a la salida corriendo hasta que se esfumó de nuestra vista.

— Takemichi era mejor opción desde un principio ¿por qué vino a mi primero? – bufé molesto.

— Tal vez porque últimamente te haz vuelto más cercano a Chifuyu – sugirió Draken.

— Es verdad, antes mantenias tu distancia con él y ahora parece que no pueden ni ir al baño solos – recordó Mikey. Sí supiera...

— Chicos basta nosotros sólo hablamos porque uhm... jugamos Genshin – dije la primera tontería que se me ocurrió.

— ¡¿También lo juega?! – gritó el enano conmocionado.

— A veces

— Cuando lo vea le pediré solicitud – mencionó.

¡Mierda!

— Rara forma de ser amigos – rió Mitsuya.

Draken no habló al respecto, tal vez debería empezar a preocuparme...

— Oigan ¿han visto a Baji? – entró Chifuyu.

Y los problemas se acumulaban uno tras otro.

— ¡Chifuyu! – saludó Mikey con una alegría que al antes nombrado le desconcertó.

— No lo hemos visto – mintió Draken ignorando la actitud de Mikey.

— Hoy no hemos pasado nada de tiempo juntos – expresó desanimado – ¿creen que se haya enojado conmigo?

— ¿Por qué lo dices? – inquirió mi amigo Mitsuya.

— Últimamente siento que me evita e incluso en clases me habla muy poco – respondió – quizás dije algo que lo haya hecho actuar así

— No creo que se haya enojado contigo Chifuyu – dije dándole una sonrisa con seguridad.

Él se sorprendió un poco pero asintió menos angustiado. Claramente Baji lo está evitando porque quería investigar sobre cómo pedirle la cita, algo que sé es que él nunca se enoja tan fácilmente.

Keisuke tiene una gran tolerancia a las personas, pero cuando llegan al límite es ahí donde deberías preocuparte realmente.

Aunque lo odiaba, sabía que era un buen chico.

— Chifuyuuu – canturreó Mikey pasando un brazo por su cuello – ¿por qué no me dijiste que jugabas?

— ¿Eh? Ah sí algunos juegos me gustan

Suspiré aliviado de que no se diera cuenta para luego platicar entre ellos sobre los videojuegos que conocían.

El sonido de una notificación me hizo sacar mi celular: era un mensaje de Baji. Me pidió que saliera puesto que vió a Chifuyu ahí y accedí.

— Ya vuelvo – avisé y salí del lugar.

A unos metros divisé una cabellera negra y avancé hasta llegar al lugar, viendo que no estaba solo sino que también se hallaba Takemichi a su lado.