-cinco-

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Una habitación espaciosa con decoración antigua, una cama ocupada, un ambiente aburrido y máquinas de hospital marcaban la noche, el jefe principal de edad avanzada se encontraba rodeado de sus cuatro jefes de grupo, además de un par de hombres que custodiaban la entrada de la habitación.

El anciano se quedó mirando fijamente a cada uno de esos hombres de buena presentación personal, analizando sus rostros, Seo y Lee parecían preocupados por su condición de salud, Hwang se veía intrigado por la reunión y Han, él se veía molesto.

—Gracias por venir.. cómo les hice saber y como pueden ver, mi condición de salud a empeorado, este viejo no podrá seguir vigilándolos por mucho tiempo, la metástasis a avanzado más rápido de lo que pensé y me queda menos tiempo para regañarlos.

Habló despacio siendo escuchado fielmente por sus visitas.

—He decidido que se acerca el momento de elegir a uno de ustedes como mi sucesor, entenderán que es una decisión importante, después de todo le estaré entregando la cabeza de esta organización que he llevado por años y todo lo que eso conlleva.. es un negocio importante y si alguno de ustedes no cree ser capaz de mantener al Taeyang en pie puede decirlo ahora mismo.

Dijo sin dejar de mirarlos, todas sus expresiones se habían vuelto serias, los cuatros eran bastante orgullosos al respecto.

—Bien, entonces les haré saber mi decisión muy pronto.

—¿Nos hará algún tipo de prueba?—. Preguntó Hwang con rostro curioso.

—¿Prueba? Conozco a cada uno de ustedes como la palma de mi mano, no necesito hacer algo como eso.

Los cuatro hombres asintieron respetuosamente y siguieron escuchando.

—Ahora.. he sabido de unos atentados hacia el grupo Han, quisiera saber qué está pasando—. Dijo el anciano interesado, pero no recibió palabra alguna como respuesta.

Al ver que nadie era capaz de hablar Han decidió hacerlo de inmediato.

—Me estoy encargando de eso, pero no tengo mucha información—. Dijo con algo de vergüenza, era el peor momento para decir que no era capaz de encontrar a los responsables por si mismo, aquello le hirió el orgullo.

Un silencio incómodo inundó el lugar y Han decidió mirar hacia las caras de los demás hombres por primera vez desde que había llegado a la mansión del jefe, todos ellos llevaban un rostro serio como si ninguno supiera nada al respecto, eso realmente le molestaba mucho sabiendo que cada uno de ellos prefería mantener el silencio en vez de ayudar.

—Bien ahora que todo está dicho, pueden retirarse—. Dijo como última instancia el jefe principal viendo a los hombres hacer su respectiva reverencia de noventa grados y salir uno a uno de la habitación—Han, ven aquí.

Al escuchar su nombre se detuvo por completo, viendo que los otros tres también habían reaccionado igual, vió sus expresiones molestas, los celos eran a flor de piel todo el tiempo al igual que cuando eran más jóvenes, para luego verlos desaparecer por el pasillo.

Han caminó hacia la cama nuevamente mirando al anciano a los ojos.

—¿Por qué haces esto? Sólo creas más conflictos entre nosotros—. Dijo molesto.

—¿Así es como tratas a un viejo moribundo?—. Preguntó con voz baja agotada.

Han soltó aire y negó ligeramente.

—¿No has descubierto quién está detrás de los asaltos? Estás tardando demasiado, creí haberte enseñado bien como cuidar tu espalda—. Dijo con dificultad pero aún se notaba esa voz sebera de siempre.

BE MY BOSS | hanknowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora