CAPÍTULO 7. Su niña

6.4K 302 8
                                    


Natasha aporreó la puerta varias veces diciéndome que saliera.

- Muy bien, tú lo has querido Mía, pretendí por las buenas que salieras tú sola ahora abriré yo, si te fijas el pestillo que has echado es un cerrojo y yo tengo la llave, ¿a caso pensabas que te iba a dejar con un pestillo para que me hicieras esto? Vuelvo enseguida.

Y se fue y mi corazón latía a mil por horas. ¡Maldita sea! ¿Y si me escapo por la ventana? No... eso no es una buena opción, si me escapo y me encuentra será terrible. ¿Qué hago? ¡Joder!¡Joder!¡Joder!

De pronto escuché la puerta de mi habitación abrirse otra vez. Y también oí cómo sus pasos se encaminaban hacia donde estaba.

De repente, se oyeron unas llaves. Mi cuerpo se alarmaba, ¡va a a abrir! Dios, no sé dónde meterme.

Hasta que vi su cara frente a mi y me la giró de una bofetada. No me dio tiempo de lamentarme cuando me cogió del brazo y me sacó casi a rastras del cuarto de baño.

-Ahora voy a ser muy dura contigo Mía, así que más te vale que obedezcas. Bájate los pantalones, las braguitas y túmbate sobre la orilla de la cama. Con las manos por detrás de tu cabeza, ¿entendido?

-Sí, Mommy... -Dije con un hilo de voz.

-No pararé hasta que oiga lo que quiero oír, ¿entendido?

¿Qué quiere oír?

-¡Ah! ¡Eso duele! -Grité sin pensar.

-¿Entendido? -Preguntó una vez más.

-Sí, Mommy.

-Ya sabes lo que tienes que hacer, dar las gracias después de cada azote.

-Sí, Mo..... ¡Ah! -Joder ¿qué es eso?

-No te oigo Mía...

¡Zas!

-¡Ah! Gracias Mommy.

-Eso está mejor. Ahora te daré cinco seguidas.

-¿Qué? ¡No!¡Por favor!

¡Zas!¡Zas!¡Zas!¡Zas!¡Zas!

-Gracias Mommy, gracias Mommy, gracias Mommy, gracias Mommy, gracias Mommy. -Dije llorando de dolor, me estaba azotando con una chancleta con una especie de goma dura.

¡Zas!

-¡Mommy, por favor! -Supliqué.

-Por favor, ¿qué Mía?

-Me duele muchooooo.

-Eres una quejica, te comportas como una niñata rebelde y no aguantas unos azotes.

¡Zas!

-¡Mommy, Mommy, por favoooooor!

-No, Mía.

¡Zas!

-No estás dando las gracias, Mía. -Dijo aún más enfadada.

¡Zas!¡Zas!¡Zas!¡Zas!¡Zas!

-¡Ahhhhhh! Gracias Mommy, gracias Mommy, gracias Mommy, gracias Mommy, gracias Mommy. -Dije ya moqueando.

¡Zas!

-Vamos Mía, dí lo que quiero oír.

-¡No sé qué quieres oír!

-¿Otra vez?

¡Zas!¡Zas!¡Zas!¡Zas!¡Zas!

-¡Mommy, por favor, por favor, me portaré bien, me portaré bien, lo prometo, lo prometooo!

-¿Lo prometes? Eso es algo muy serio Mía.

¡Zas!¡Zas!

-¡Sí, lo prometooo! -Dolía y lloraba a rabiar.

-Está bien, la próxima vez, seré más dura, hasta que aprendas a comportarte, ¿entendido, Mía?

-Sí Mommy, me portaré bien.

-¡Shhhhh! Ven aquí, anda. Esto es por tu bien, ¿vale? -Dijo abrazándome sentada en sus rodillas.

-Gracias Mommy. -Sí, ¿vale? He dicho gracias, pero es que lo siento de verdad, me siento su pequeña.

MOMMY, MI NUEVA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora