CAPÍTULO 19. La bestia salvaje

4.2K 238 17
                                    


Habla Natasha:

No puedo creer que haya dejado que pase esto, me siento culpable. ¿Cómo he podido ser tan estúpida y no darme cuenta? Casi hace con ella lo que le da la gana y yo... ¿qué demonios estaba haciendo yo? Enfadarme como una chiquilla tonta encelada aunque también con razón. Ha tenido una conducta peligrosa y por ello, su amiga estuvo en peligro y ella casi corre la misma suerte...

Dios mio, no sé qué voy a hacer... Se supone que yo amaba a Manuel pero de repente no siento nada más que un profundo asco, de sólo pensar que podía tocar a mi niña se me erizan los pelos. Lo mataba.

He sido muy dura con Mía, ella sólo quería divertirse, no sabía que sucedería eso, no es la responsable directa de lo que ocurrió. Y encima he provocado que casi abusen de ella en mi propia casa por dejarla sola. Soy una idiota.

Ahora mismo duerme como un lirón en mi cama mientras le acaricio el pelo, ha sido una noche muy dura para ella. Se la pasó llorando recordando que él quería hacerme daño, el muy... no tiene caso que le insulte, sería sólo nada más que para estresarme yo misma.

Eso sí, contrataré al mejor abogado y me encargaré de que no vuelva a ver la luz del sol como que me llamo Natasha Riveretti.

Debo despertar a Mía, se hace tarde y hay clase.

-Mía, cariño, despierta.

Se hace la remolona.

-Mía, te he dejado diez minutos más y llegaremos a lo justo.

Vuelve a ignorarme.

-Mía... -Empiezo a impacientarme.

-No quiero...

-Sí, sí quieres, venga...arriba... -La muevo de su sitio y la siento en mis rodillas, está muy dormidita.

-Mommy, no quiero ir...

-Mía, no estoy para tonterías, venga...

-¡Que no quiero!

-¡Ah! ¿no? -¡Se acabó! Paciencia al carajo.

La coloco en mis rodillas rápidamente bocabajo y ¡zas!

- ¡Ahhhh! ¡Mommy! ¡Ya voy! ¡Ya voy!

-Es que no entiendo por qué te tienes que comportar así, me obligas a castigarte. -Dije molesta.

-Me castigas porque quieres, porque eres una sádica.

¡PLAF!

-¡No uses ese tono conmigo ni ese vocabulario!

Mía se quedó con la mano en la cara con las lágrimas saltadas mirando hacia abajo.

-Venga, vístete. -Dije mirando hacia un lado.

-Sí, Mommy. -Dijo sollozando. -Yo mientras despertaré a Sandra, también va a terminar sus estudios y tiene que ir a presentarse a la directora y volver a empezar.

-¿Sandra también estará en el instituto? -Preguntó contenta.

-Sí.

Salí de la habitación molesta al ver esa felicidad, sentía celos de mi propia hermana. Ahora me toca despertarla, todo un reto.

Entré en la habitación haciendo el mayor ruido posible pero era Sandra, ni se inmutó. Me va a costar la propia vida.

-¡Sandra! ¡Despierta! ¡Es la hora!

Nada.

-¡SANDRA!

-¿Qué coño quieres pesada? ¿No ves que estoy durmiendo?

MOMMY, MI NUEVA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora