MOMMY, MI NUEVA VIDA

CAPÍTULO 18. Drogadas, duro castigo y adiós Manupollas

 Seguía sin encontrarlo hasta que di con una habitación creyendo que era el baño. Entré sin pensar pues todo me daba vueltas. Inmediatamente después de entrar, entró Fernando junto con Daniel y Carolina. La habitación estaba provista de una cama muy grande y era enorme comparada con una cama de matrimonio. Daniel besó a Carolina y yo me impresioné porque esta se dejó besar. A lo que a continuación, Fernando me entró a mí también y fue llevándome a la cama.

-No debería hacer esto Fer...

-¡Shhhh! Calla y disfruta, tu cuerpo te pide a gritos sexo.

-Sí, pero... por qué Carolina se comporta así... -Dije mareada.

-Está borracha y siente deseos de hacerlo con Daniel -dijo él encima de mi con su boca muy pegada a la mía. -Y tú sientes deseo por mí... -Dijo Fernando seguro de sí mismo.

-Sí, no sé, aunque me atrae más Sandra... -Dije sin dar crédito a lo que estaba diciendo pero no podía controlar mi cuerpo, ni mis deseos ni mi boca.

-Si quieres la llamo y hacemos un trío, ella estará dispuesta... -Dijo Fernando molesto.

-Me sentiría más cómoda... -¡Mierda! ¿Pero qué estoy diciendo?

Me sentía terriblemente excitada. Necesitaba de caricias y besos, necesitaba a Natasha conmigo, pero Sandra era como ella y mi cuerpo estaba muy acelerado, tenía mucho deseo sexual.

-Así que aquí estás Mía... -Dijo Sandra lascivamente.

-Sandra... -Dije cuando se posó encima de mí y se quitó la camiseta. -Estás ebria.

-Sólo un poco, sabes...me atraes mucho niña...

Ese niña volvió a hacerme pensar en Natasha, pero mi cuerpo no respondía para poder levantarme.

Sandra comenzó a acariciarme junto con Fernando quien se bajó los pantalones y se quitó su camiseta dejando ver que estaba excitado al igual que nosotras bajo su bóxer.

Carolina por otro lado ya estaba desnuda y estaba siendo penetrada por Daniel, ella gemía, no podía controlar su cuerpo, ¿tanto bebió?¿Así es el alcohol?¿Te excita?

Sandra me quitó la camiseta y el sujetador y empezó a lamer mis pezones.

-Mmmmmm. -Gemí.

-Te ayudaré a desnudarte... -Dijo ella con esa sonrisa divina.

Fernando me quitó por último las braguitas de color rosa pastel que llevaba.

Ambos se pusieron a mi lado a acariciarme, Sandra me besó y metió su lengua dentro de mi boca, se sentía tan bien, tan cálido y húmedo a la vez.

Fernando bajó su mano hasta mi sexo y comenzó a masajear mi clítoris.

En ese justo instante se oyó un portazo y me asusté.

-¡Mía! -Grito Natasha.

-¿Mommy? -Dije aturdida.

-¿Natasha? -Dijo Sandra con voz de asustada.

Ambas se quedaron mirándose la una a la otra, una encabronada, la otra con temor.

-¡Carolina! -Gritó Juan cuando la vio siendo follada por Daniel.

Juan le pegó un puñetazo a Daniel y lo tiró al suelo. Daniel no podía ni defenderse, estaba en el suelo mareado.

-Da... daddy... -Dijo Carolina temblorosa sin apenas poderse sostener de pie.

-¿Qué demonios creéis que estáis haciendo?¡Sois menores! ¡Responde Carolina! -Gritó Juan.

Natasha por otra parte seguía en su sitio mirándome y mirando a Sandra.