CAPÍTULO 17. El comienzo de la fiesta

4K 218 17
                                    

Habla Natasha:

Le he hecho daño a mi pequeña, que ya no es tan pequeña sino casi una mujer. En tres meses cumplirá dieciocho años y seguramente se marchará de aquí, después de lo que le he hecho, no dudo en que lo hará.

Así que Mía me quiere, está enamorada de mí y yo de ella. ¿Qué hago con Manuel? No puedo abandonarlo, él siempre ha estado conmigo, me ha apoyado y no me ha dejado sola en ningún momento.

Ahora Mía está en clases, esta mañana no me ha dirigido la palabra durante el trayecto al instituto. Espero que no se meta en más problemas.


Habla Mía:

Estoy a punto de entrar en este maldito instituto de nuevo, a ver la tal Sofía si está calmadita, espero que no se vuelva a meter con Carolina sino la parto en dos.

Carolina es muy buena chica, no se merece que la traten así, además, compartimos cosas en común.

-Hola Mía. -Dijo la voz de una chica.

Cuando me di la vuelta no lo podía creer, era Sofía y no iba muy chulita, sino todo lo contrario, con la cabeza gacha y con voz de arrepentida.

-¿Qué quieres Sofía? -Pregunté con molestia.

-Quería disculparme contigo. -Dijo aún con esa voz.

-Conmigo no, a mi no me has hecho nada, deberías pedirle disculpas a Carolina.

-Eso me cuesta más, pero lo haré.

-¿Por qué este cambio de actitud? -Pregunté curiosa.

-Bueno... después de nuestra pelea mis padres me castigaron tres días severamente, no lo hacían desde hacía muchos años y me dijeron que si me disculpaba y no buscaba más problemas contigo me levantaban los castigos.

-Ah, o sea que eres una interesada, en realidad ni lo sientes.

-¡No! No pienses eso... realmente estando castigada tuve tiempo de reflexionar y creo que no me he portado bien con mucha gente. Mi reputación ha bajado desde que me peleé contigo y desde que todos supieron que Natasha Riveretti es tu protectora, tu tutora. Ahora he planificado una fiesta nocturna en mi casa, mis padres se van a Nueva York esta semana y el fin de semana invitaré a todo mi círculo y vosotras dos estáis invitadas, tú y Carolina, para demostrarte que vengo en son de paz.

-¡Guau! ¡Una fiesta! Bueno... me gustaría ir pero no sé si nos dejarán ir. 

-Sea lo que sea estáis invitadas, esta es mi dirección.

Sofía cogió mi carpeta y en una esquina de un folio en el lado superior derecho escribió su dirección y su teléfono particular.

-Ahora mismo no lo llevo encima porque me lo han quitado, pero luego me lo devolverán.

-Vale, voy a preguntarle a Carolina si quiere ir, aunque dudo un poco. 

-Voy contigo. Así verá que voy en serio.

-De acuerdo.

Vaya cambio de humores tiene esta chica, está más suavecita de lo que pensé.

Nos dirigimos a nuestros pupitres, al de Carolina y al mío. Carolina al verme entrar con Sofía se le descompuso la cara.

-Tranquila Carolina, viene en son de paz y a pedirte disculpas.

Carolina no dijo ninguna palabra creo que estaba que aún no se lo creía.

-Verás Carolina... He estado reflexionando mucho y creo que me he pasado contigo durante mucho tiempo, tú nunca me has hecho nada malo pero para poder tener mi estatus social en este instituto tenía que hacerlo, no sabía cuánto podrías llegar a estar sufriendo por mi culpa, te ruego que me disculpes.

MOMMY, MI NUEVA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora