•̩̩͙*𝔅𝔞𝔟𝔶'𝔰 𝔬𝔫 𝔣𝔦𝔯𝔢 - Sungtaro*•̩̩͙

💖𝟐𝟗💖

El cuarto de hospital parecía sí estar solo, y Shotaro no sabía decir sí eso era mala o buena suerte, al menos no con Yuta sentado en la silla de junto, completamente callado.

—¿Por qué lo ocultaste?— el alfa preguntó de la nada

"¿Por qué me ocultaste todo lo que hacías con Sungchan?"

Yuta todavía no superaba que otro alfa hubiera tocado a Shotaro. Pero el omega no sabía que se refería eso. Él no sabía de la obsesión que mantenía con él. En su perspectiva, Shotaro nunca tuvo motivos para sospechar.

—N-no lo sabía, te lo juro— El omega contestó con los ojos llorosos, creyendo que se refería al embarazo.

—¿Era esto lo que hacías cuando salías con Sungchan?¿revolcarte con él?— cegado aún por el enojo, Yuta preguntó sin tacto. A pesar de que logró hacer que el omega abortara, estaba furioso porque se hubiera acostado con Jung en primer lugar.

—¡No! solo pasó un par de veces

—Te di toda la confianza del mundo, cambié y te deje hacer lo que quisieras porque confiaba en ti 

—Lo sé, pero-

—No quiero tus explicaciones, me mentiste en mi cara— el omega se sintió como mierda cuando el mayor repitió sus palabras ¿Le estaba haciendo a Yuta lo mismo que le hicieron a él?

—Perdón...— Shotaro susurró con lágrimas cayendo por sus mejillas.

—Ya no importa, solo esperemos a que te den de alta para irnos— el pelirrojo finalizó la conversación fríamente. 

Dejó de estar presente en cuando la doctora Lee fue a decirle que podía irse y le diera algunas indicaciones y consejos ya de que el ciclo que sigue luego de un parto o aborto tiende a ser muy intenso, así que necesitaría ayuda y cuidados especiales.

Fue un golpe demasiado duro para Shotaro. El camino de regreso a casa fue tan horrible que pensaba en simplemente abrir la puerta y brincar a la calle, lo que fuera para escapar de esa situación. Yuta ni siquiera lo miró cuando llegaron a su hogar, así que simplemente subió a su habitación.

Superado por todo lo que pasaba, se quedó inerte en su lecho. Y ni siquiera tenía lágrimas para llorar pero eso no impidió que lo hiciera.

Un cachorro, suyo y de Sungchan.

Era eso lo que le estaba pasando y él fue demasiado idiota para darse cuenta, para entenderlo. Estuvo en su cuerpo y no supo sentir su presencia, cuando él siempre creyó que cuando tuviera un bebé sería algo especial...pero no fue así.

¿Se hubiera parecido a él o a Sungchan?

Durante un período de su noviazgo, Shotaro contempló fugazmente la idea de una familia con el alfa, un bebé con su cabello rizado y los ojos oscuros de su novio. Pensó que un cachorro de Sungchan tendría una mirada tan bonita, con ojitos negros de venadito. Igualmente imaginó que sería lindo si tuviera  sus labios esponjosos que se curvaban hacía abajo al hacer pucheros.

"¿Qué estoy pensando?" Maldijo su amor al alfa, después de todo lo que había pasado aún no podía sacárselo de la cabeza. De seguro Sungchan no querría nada que ver con el cachorro, se hubiera asustado y ahí hubiera terminado su relación, dejándolo solo con su hijo.

Esa noche no cenó, ni a la noche siguiente, ni a la siguiente.

Teniendo momentos dónde no podía parar de llorar y otros en los que lo único que podía hacer era insultarse a sí mismo, insultar a Sungchan, insultar a quienes creía sus amigos. Tal vez nada de eso le hubiera pasado sí no hubiera sido un ingenuo, sí no se hubiera dejado deslumbrar. A pesar de todo, antes de caer dormido siempre llegaba a la misma conclusión.