40

244 21 0
                                    

El frío se había soltado un poco, y la niña no se había traído un suéter, genial

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El frío se había soltado un poco, y la niña no se había traído un suéter, genial.
De repente sentí que Tom me ponía su saco, lo miré para después agradecerle, aún con su mano en mi abrazo, cais abrazándome, nos dirigimos a su auto; Y como todo un caballero, me abrió la puerta y segundos después, él ya estaba en el auto.

Estaba nerviosa aún.
Digo, él había dicho que yo le gustaba, pero yo rápidamente había cambiado de tema, y creo que había hecho bien, yo no podía decirle que sentía lo mismo.
En el peor de los casos, todo ésto sería una broma causada por Clarissa, vengándose, tal vez, y luego si le decia que a mí igual me gustaba...quizás ellos estuvieran burlándose de mí a mis espaldas.

No podía creerle, además, ¿qué pasaba con Clarissa?

Tom se había estacionado en una avenida, donde tenía una buena vista a varioa lugares de la ciudad.

Oí como movía las llaves de su auto, hasta que se acomodó mejor para mirarme.
Sonreí un poco.

—Me gustas, Melina — volvió a repetir

—No tiene sentido — contesté

—Y ¿por qué no?

—Porque...tú eres mi jefe...yo soy tu empleada — yo nos apuntaba a ambos

—¿Y eso que?

—Ademas — también me acomodé mejor, ahora ambos podíamos mirarnos perfectamente — tú estás con Clarissa, ¿no?

Tom se burló un poco

—Lo de Clarissa y yo no era nada serio...por cierto...yo terminé eso hace casi 1 mes

Ahora todo tenía sentido.
Clarissa ya no se mostraba tan... empalagosa con Tom, y yo pensaba que estaban peleados o algo así.

Recargué mi cabeza en el asiento

—Creo que tú también me gustas — finalmente lo había dicho

Ya si era una especie de broma, igual ya tenía solución. Renunciaba al trabajo y me regresaba a Francia, no sin antes de darle una patada en sus partes.

Tom poco a poco fue acercándose hacia mi, hasta que me dió ese preciado beso que había estado esperando tanto tiempo.

🌸 🌸 🌸 🌸

—Gracias por la cena — comenté mientras me quitaba su saco — y también gracias por traerme

Tom se volvió acercar para besarme, admitia que disfrutaba sus besos pero ese hombre me iba a calentar de más y para qué quería eso.
Oí el sonido del cinturón de seguridad, él se lo había quitado, sentí que dirigió una de sus manos a mi cintura, me acercó aún más hacia él.

No, no, me estaba calentando más que el sol de verano, algo tenía que hacer.

Me aparté del beso, pero no me había apartado tanto de su cara, ya que él me sujetaba de la cintura todavía.
Llevé mis manos a sus grandes brazos, él sonrió coqueto.

La Caótica Vida De Melina |Tom Hardy|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora