Wake me up [Eddie Munson]

La iniciación

Este es mi capítulo favorito de todos los que he escrito.
Espero que les guste tanto como a mí <33

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Me levanté a las siete, y después de ducharme tomé el atuendo que había preparado anoche después de volver de casa de Eddie: unos shorts holgados en la parte de abajo, rasgados, de color negro; mayas, unas botas de plantilla alta, negras también, me puse mi camiseta nueva de Hellfire, algunas pulseras que tenía, incluyendo una que le quité a Eddie un día, un collar de LOTR, un par de anillos discretos, y mi chaqueta negra de cuero falso. Cepillé mi cabello y tomé mi mochila para bajar a desayunar.
–¿Y eso?– preguntó madre señalando al demonio de la camiseta.
–Ahora pertenezco al club Hellfire, madre– le dije con orgullo y vi a Tom que asentía con solemnidad, justo como Eddie lo habría hecho.

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Cuando bajé del auto en la preparatoria noté que algunos me miraban como si estuviera loca.
¿Seguirán creyendo que hago esto por las drogas?, me pregunté.
Era miércoles, y tenía clase de matemáticas con Eddie, cuando me vio entrar al aula, pude ver en su rostro una enorme sonrisa de satisfacción.
–Luces...– dijo para luego hacer un movimiento brusco con las manos–...no encuentro las palabras...
¡Perfecta, poderosa, majestuosa!– gritó.

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Cuando me senté con los demás en el comedor de la cafetería me sentí extrañamente feliz. Siempre había querido amigos con los qué hacer cosas raras, diferentes. Y hasta ahora no conocía nada más raro que estos nerds y su club.
–Te ves muy cool– dijo Mike, era la primera vez que me hacía un cumplido.
–Ultra cool– dijo Dustin emocionado.
–Sí, pero no basta con una camiseta– dijo Eddie. Lo quedé viendo algo asustada.– Primero hace falta la iniciación.– los demás asintieron, siempre con su gesto de solemnidad.

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Al salir de clases, antes de ir a casa busqué a Eddie, lo vi llegando del bosque.
–¿Muchos clientes hoy, querido?
–Te sorprendería la cantidad de chicos que sienten la necesidad de drogarse hoy en día.– dijo. Luego se acercó a mi y besó mi frente.–¿Qué pasa? Nunca me buscas después de clases.
–Necesito saber cómo es esa "iniciación". ¿Debo ofrecer un sacrificio o algo así?– pregunté, a lo que sonrió y se acercó a mi oreja.
–Sí. Tienes que ofrecerle tu cuerpo en sacrificio al líder del grupo.– me susurró.
–¡Ooh, noo!– le dije fingiendo desmayarme y me sujetó entre sus brazos– Qué terrible... pero si es necesario está bien, lo haré.
–En serio amo cómo te ves en esa camiseta– dijo sonriendo y besó mis labios.– ¿Quieres que te lleve a tu casa?
–¿Qué vas a hacer hasta que se lleguen las 6?
–Cosas...
–¿Qué cosas?
–¿Por qué tan curiosa?– empezamos a caminar hasta la salida.
–¿Por qué tan misterioso?
–Tengo que preparar algunas cosas para la campaña de hoy.
–Ok, ¿quieres que te ayude?
–No, aún no eres del club, no puedes saber las cosas secretas que hacemos.
–¿No soy del club? Traigo puesta una camiseta que dice lo contrario.
–No me contradigas, niña necia. Voy a llevarte a tu casa y te vas a quedar ahí hasta que pase a recogerte.– dijo empujándome hacia su auto.
–¡Qué agresivo!... Me gusta– dije sonriendo.

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–Vendré faltando diez minutos para las seis.– dijo cuando llegamos a mi casa.
–Sí, ajá– le dije y me acerqué para besar su cuello.
–No empieces, no me provoques. Largo, largo.– dijo con los ojos entre cerrados.
Me bajé del auto riendo, y me despedí con la mano.

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–ANDREAAAA– gritó Tom en el piso de abajo.
–Mierda, mierda– dije corriendo hacia abajo por las escaleras, mientras escuchaba el ruido del claxon.– Lo sientoooo– le dije a mi tío antes de salir.
–ERES UN IDIOTA, EDDIE– grité mientras corría por el jardín; en la camioneta estaba el idiota, partiéndose de risa como siempre. Cuando subí le di un golpe en el brazo.– Un día de estos los vecinos van a demandarnos.
–Sí, ajá– dijo antes de arrancar.