Wake me up [Eddie Munson]

Olivia

El personaje está inspirado en la canción Olivia de One Direction. Si no la has escuchado hazlo después de leer el capítulo. ♡

Fin del comunicado.

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–Cuando recién cumplí catorce años tenía dos amigos, solo dos, nunca necesité más porque era feliz con ellos, haciendo cosas de adolescentes: juegos, comida, música, romances cortos y tonterías.
Un día en la escuela nos avisaron que tendríamos una nueva compañera, fue un aviso sin importancia para nosotros, y luego la vi, era... como un ángel, uno con cabello de fuego, te lo juro, nunca había visto a una persona con el cabello tan rojo. Es hermosa, pensé. Y sus ojos eran muy azules, y cuando te veían era como si penetraran tu alma, así de intensos.
>>Un día me acerqué a hablarle y además de hermosa era muy agradable, nos hicimos amigas de inmediato, nuestras personalidades encajaban a la perfección, yo era medio tímida y boba, ella era brillante e intrépida. Cada frase que decía parecía haber salido de la boca de un escritor, pero no, eran de su autoría.
Cuando comenzamos a conocernos mejor me convenció de leer sus libros favoritos, imagínate lo mucho que me gustaba como para que yo, una adolescente que aborrecía la lectura abriera un extenso libro de fantasía medieval y lo leyera. Sin quererlo me volví fan, pasábamos todo el día hablando de los libros, leyéndolos o dibujando a los personajes. Luego me contagió sus gustos musicales y yo también influencié un poco en los suyos.
Nos volvimos mejores amigas, hasta nuestros padres se conocieron y se hicieron amigos, nos dejaban dormir en casa de la otra, y cuando hacíamos pijamadas nos quedábamos hasta la madrugada hablando de fantasías, hasta empezamos a escribir nuestra propia historia.
Una noche, en la que ella se quedó en mi casa, estábamos tiradas en la alfombra de mi cuarto, escribiendo un capítulo para nuestra novela, y mientras hablábamos sobre el romance de la protagonista algo pasó, fue como una especie de tensión entre las dos y...

–...se besaron– dijo Eddie asintiendo.

–Sí. En realidad fue ella quien lo hizo, yo no me habría atrevido. Siempre les decía a mis otros amigos que había besado a muchos chicos, pero en realidad jamás había besado a nadie antes de ella.
Cuando se separó de mí parecía muy asustada, así que esta vez fui yo quien la besó para demostrarle que no debía preocuparse. Después de eso nuestra relación dio un giro de 180 grados. Nos volvimos más que amigas, mucho más.

–Y ¿dormiste con ella?
–Eeeeh...– dije viendo hacia otro lado.
–Lo tomaré como un sí.
–Queríamos... saber qué se sentía. Sí. Lo hicimos, ¿ok?– le dije impaciente.

Respiré un poco antes de continuar.
–Un día vimos un anuncio, una de nuestras bandas favoritas iba a dar un concierto en la ciudad. Nos pusimos a gritar y a saltar como locas, pero luego la felicidad desapareció de su rostro. Sus padres eran muy conservadores, aún lo son, supongo. Les molestaba que siquiera escuchara rock, jamás la dejarían ir a un concierto, con adultos y gente alocada. Le dije que no les mencionara nada, que les dijera que vendría a dormir aquí y nos iríamos, me costó convencerla, pero al final también aceptó que yo le diera el dinero para su entrada al concierto.
Mi papá aceptó llevarnos, él... casi nunca me negaba nada.
Cuando llegó el día llegamos los tres al concierto, felices y salimos felices de ahí. Afuera estaban vendiendo souvenirs así que le dije a papá que entretuviera a Olivia para comprarle un obsequio. Fui y le compré un brazalete y cuando estaba volviendo con ellos vi que había un hombre frente a ellos, que les estaba diciendo algo, cuando me acerqué vi que tenía un arma en la mano, le apuntaba a Olivia. No supe qué hacer y... lo golpeé, solo lo golpeé, y cuando lo hice disparó, pero no a Olivia... a papá.
>>Por si te preguntabas dónde está mi padre... está muerto.

Nos quedamos en silencio. Eddie me tomó entre sus brazos y acarició mi cabello.
–Olivia corrió y le quitó el arma de la mano, había más gente alrededor así que corrieron hacia nosotros y sujetaron al tipo. Pero yo solo veía a mi papá, su cuello...– dije antes de empezar a llorar.
–Está bien, tranquila, está bien, shhh– susurró Eddie.

~

–Después de eso caí en depresión. No podía dormir, no quería comer, salir, ir a la escuela, ni ver a nadie. Olivia iba todos los días a verme, pero ni siquiera quería verla a ella; iba a leerme, a cantar suavemente mientras me abrazaba, o a veces solo a estar en silencio.
Un día, mientras ella leía una página de Jane Eyre, sentí una profunda tristeza y le dije que se fuera. Solo quería llorar a solas. No voy a dejarte, dijo necia. Así que empecé a gritarle hasta que se molestó y se fue.
Al otro día volvió, se acostó a mi lado y estuvimos toda la tarde en silencio, antes de irme me dio un beso y acarició mi cabello. Fue la última vez que me visitó.

La casa estaba silenciosa todo el tiempo, mamá seguía yendo a su trabajo, podía notar su tristeza, pero si me culpaba o me odiaba por lo que hice nunca lo demostró. Seguía siendo tan cariñosa como siempre.
Un día trajo a una doctora para que hablara conmigo, por supuesto que me negué, pero tras unas visitas comencé a charlar un poco, era muy persuasiva. Unos meses después empecé a mejorar, comencé a comer más y de a poco salía a la sala o a la cocina para ver a mamá.
Un día le dije que volvería a la escuela, se puso muy feliz.
Recibí las clases de la mañana y luego fui a almorzar, cuando entré al comedor vi a mi ángel, parecía muy feliz, besando a un chico, estaban sentados en una mesa, rodeados por otros estudiantes que charlaban entre ellos. Fui hasta la mesa en la que estaban mis otros mis amigos, que me vieron emocionados y empezaron a hablar muy fuerte y abrazarme. En un momento miré hacia la mesa de Olivia, estaba viéndome, como si hubiera visto a un fantasma.
Al terminar de almorzar salí con los chicos al pasillo y entonces sentí que una mano sujetaba mi brazo, me giré y era ella, me llevó hasta un lugar vacío.
No pude evitar ver en mi mente la imagen de ella y ese chico. Así que pregunté quién era, intentando no sonar tan fría. Y ella dijo:
"Mis padres siempre te culparon por lo que pasó, mi madre... ella estaba furiosa, dijo que mataron a tu padre por culpa tuya y que pudieron haberme matado a mí en su lugar. Me la pasaba peleando con ellos, yo te defendía, y no tienes idea de lo mucho que me dolió cuando me echaste ese día. Sé que sentías dolor, pero me cansé, me cansé de defenderte, me cansé de estar todo el tiempo rodeada de tu tristeza, estaba harta. Enójate conmigo por lo de mi novio si quieres, honestamente me da lo mismo. Te quiero, Andy, pero no te iba a esperar para siempre."
Y se fue. Yo tenía quince años, los había cumplido un mes antes de eso, así que fue hace casi tres años y desde entonces no había hablado con ella, esa fue la última vez, hasta ahora.
Y esa es toda la verdad.– le dije y me quedé en silencio.

–¿Aún la amas?– preguntó Eddie con voz queda.
–Intento recordar solo lo bueno que pasamos.
–Eso no responde a mi pregunta.
–Sí, la amo, como un recuerdo, como mi pasado.– dije– Y el pasado es el pasado.
–Y ¿qué es el presente y el futuro?– preguntó.
–Tú.– le dije sonriendo.