ᴍɪꜱꜱᴇᴅ ʏᴏᴜ (+18)

11K 375 800
                                    

━━━━━━❃━━━━━━

Advertencia: el siguiente capítulo tiene contenido sexual explícito (+18)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Advertencia: el siguiente capítulo tiene contenido sexual explícito (+18). Leer bajo su propia responsabilidad.

Caminaba por los largos pasillos del cuartel general, me dirigía a la oficina principal con intenciones de pasar un rato con mi novio, hasta que una mano me jaló del brazo y a la fuerza me introdujo a una habitación.

Pasó tan rápido que no me dio tiempo de reaccionar, solo sentí mi cuerpo ser estrellado contra la puerta, ocasionando que soltara un quejido de dolor.

—¡¿Qué carajo se supone que estás haciendo Giselle?! —escupió Light con notable molestia. —¡Necesito que consigas su nombre! —gritó cerca de mi rostro.

—Ya te dije que estoy haciendo lo que puedo —respondí tratando de soltarme de su fuerte agarre.

—Escúchame bien —su mano libre me tomó del mentón y apretó mis cachetes. —¡Consígueme ese maldito nombre! ¡No me importa lo que tengas que hacer!

—Lo estoy intentando, pero suéltame, me lastimas —lloriqueé por la fuerza ejercida.

Me soltó con brusquedad y se alejó de mí. Se dio la vuelta y se pasó las manos por el cabello con frustración.

Ya más tranquilo volvió a acercarse, su mano tomó mi mejilla enrojecida y la sobó con el dorso de su mano, acariciándola suavemente.

—Escucha cariño, para poder ganar necesito su nombre —habló en un tono calmado. —Necesito que me consigas el nombre de L —su dedo pulgar se colocó en labio inferior sobándolo y entreabriéndolo. —¿O acaso ya no quieres ser la diosa del nuevo mundo?

—Claro que sí, Light —respondí. —Te prometo que lo haré, lo conseguiré para ti. Solo dame un poco más de tiempo.

Light sonrió satisfecho y depositó un beso en mi mejilla.

Salí de la habitación acomodando mi cabello castaño cubriendo un poco mis cachetes, en lo que el enrojecimiento desaparecía.

Mientras seguía mi camino, me encontraba pensativa. La verdad es que me había metido en un problema muy grande. Estaba enamorada de L, pero también quería a Light. Por lo tanto, no quería que ninguno se hiciera daño.

No sabía qué hacer. No quería investigar el nombre de L y dárselo a Light, porque sabía que lo escribiría en la Death Note, pero tampoco podía decirle a L que sabía la identidad de Kira, porque lo llevarían a la cárcel.

Supongo que esto es lo que pasa cuando juegas con fuego; inevitablemente te quemas.

Pasé a la cocina por una rebanada de pastel de fresa, así tendría un pretexto para interrumpir a L de su trabajo.

Suspiré antes de abrir la puerta y entrar a la oficina principal.

Todos me miraron por unos segundos y después regresaron sus miradas a los monitores. Era un tanto incómodo para mí estar ahí, puesto que yo no les agradaba a muchos.

𝐋 𝐋𝐚𝐰𝐥𝐢𝐞𝐭 | 𝐎𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora