TRACE

NUEVE

El fin de semana había pasado y Felix aún seguía enfadado con Seungmin así que no le respondía llamadas o mensajes.

Justo estaba apunto de dar su exposición junto a Joy.

—¿Lista?—le preguntó el rubio cuándo apareció en la sala de estar con su mochila colgando de un hombro.

Joy asintió levantándose con dificultad.

—Los pies me están matando como no tienes idea—se quejó cuando ambos salieron del edificio.

—Es normal a tus siete meses—rio Felix escuchando de nuevo sonar su celular.

—¿De nuevo Seungmin?—preguntó Joy divertida mientras entraban al coche de la pelinegra y lo ponía en marcha, aún podía manejar, pero su barriga comenzaba a molestarle.

—Si—rodó los ojos apagando su teléfono.

—¿Hizo algo muy malo? se bien que ustedes son grandes amigos—habló mientras conducía.

—La noche que llegamos de madrugada a casa casi nos arrestan por su culpa—soltó el rubio mirando por la ventana.

—¿Hicieron algo ilegal?—sonrió Joy recordando cuándo era más joven.

—Ese tonto fue a una carrera de autos—Felix frunció inconscientemente su ceño tan solo con recordar el momento.

—Oh son geniales—mencionó Joy emocionada y Felix la miro con algo de sorpresa.

—¿Cómo lo sabes?—cuestionó el pecoso y Joy se removió algo incomoda.

—Jae esta metido en ese mundo de hecho mi familia entera—murmuro en voz baja.

—Es por eso que tu hermano estaba ahí—respondió el rubio y Joy volteo por un momento.

—¿Hyunjin? ¿él estaba ahí?—Felix asintió recordándolo.

Hijo de puta casi me mata, pensó.

—Si, pero a que te refieres con lo de que tu familia esta en ese mundo—inquirió con curiosidad Felix.

—Tal vez te lo diga en otro ocasión estamos llegando tarde—dijo Joy aparcando en la universidad.

Ambos bajaron del auto y se apresuraron a sus clases.

Las clases pasaron volando y en la hora de la exposición llego. Ambos tanto como Felix y Joy recibieron halagos del profesor diciendo que era la mejor exposición que había visto hasta el momento una presentación fluida sin tanto rollo.

Recibieron cien en esa primera tarea.

—Viste la cara de esas chicas—sonrió Joy mientras se sentaban bajo un árbol para comer el almuerzo.

—Si, casi nos asesinan con la mirada—contestó Felix riendo mientras sacaba su hamburguesa y papas fritas de una bolsa.

—Oye Felix quería contarte—la voz de Joy se vio interrumpida por un sombra que les tapaba los pequeños rayos de sol.

—Hola hermanita—Felix conoció esa voz y al igual que Joy volteó hacía arriba topándose con el pelirrubio de cabello largo, en ese momento Felix pudo apreciarlo bien  por primera vez.

Su cara estaba adornada por tres perforaciones; ceja, nariz y labio. 

Llevaba una media coleta, un hoddie verde que hacia contraste con su piel clara, pantalón de mezclilla con unas converse negras.

—¿Qué quieres Hyunjin?—pregunto Joy claramente incomoda por su presencia.

—Oh no te preocupes que no vengo hablar contigo—sonrió ocasionando que su ojos se achinarán y después dirigió su mirada a Felix—Vengo con— miro al pecoso—lo que sea que sea tuyo—Felix frunció su ceño al escucharlo decir aquello.