—¿ME ESTÁS PIDIENDO EL DIVORCIO?
—¡NO GRITES! Mis hijos duermen.
—También son mis hijos. ¿En serio crees qué te daré el divorcio? Mis hijos no merecen el trauma de papás divorciados.
—Bruce, nosotros también merecemos nuestra felicidad. ¿No quieres eso?
—Mi felicidad eres tú y sólo tú Diane.
—Bruce, eres egoísta, déjame ir.
—No puedo Diane, tú—
—Sí puedes, esperé a que Jane creciera y también Damián, no quiero que Holly sufra lo mismo.
—La harás sufrir peor.
—Escuché a mis dos hijos decir que se sentían una carga y ese era el motivo del porqué sus padres seguían juntos. ¿Quieres qué Holly pasé eso?
Bruce guardó silencio, amaba con locura a Diane, pero no lo demostraba.
—¿Sabes qué—
—No Bruce. ¿Sabes qué es lo doloroso? Jane y Damián no pueden decir un te amo porqué jamás lo han escuchado de sus padres, ellos saben perfectamente el motivo de nuestro matrimonio, fui tu esposa por casi veinte años, te respete, pero ¿Tú lo hiciste? ¿En dónde está Rachel?
—Rachel es mi mejor amiga.
—¿Mejor amiga? ¿Mejor amiga se le dice a la mujer a la qué la besas?
—¿Qué? —Bruce parecía asustado, su cara había cambiado completamente.
—Ay Wayne, Wayne, Wayne. ¿Aún sigues creyendo qué puedes mentirme? ¿A mí? Bruce, tengo mis sentidos muy desarrollados.
—¿Con Rachel?
—¿O es Selina?
—¿Qué dices?
—Selina Kyle. ¿No la conoces? Ya sabes, justiciero de la noche y su fiel gatita.
—Yo no soy Batman.
—Creí que Batman tendría sus agallas para admitir las cosas, pero no. Eres igual de cobarde que todos.
—No soy Batman y no besé a Selina.
—¿Y a tu mejor amiga?
—Tampoco.
—Fuiste a Ámsterdam en octubre. ¿No?
—Sí.
—¿Y el diecinueve de abril?
—Fui a una reunión a las afueras de Ciudad Gótica.
—¿Y el dieciocho de octubre?
—Fui a las afueras de Ciudad Gótica.
—¿Y el dienueve de octubre?
—Fui a las afueras de Ciudad Gótica.
—¿No qué estuviste en Ámsterdam en abril? ¿Y en octubre? —cuestionó la morena sonriendo dejando a Bruce ligeramente sorprendido.
Sabía lo inteligente que era su esposa y amaba eso.
—Dia yo...
—No Bruce, guarda silencio, Jane ya viene.
Bruce suspiró y salió detrás de su esposa, Jane venía entrando al lugar junto a sus hermanos, todos tenían sus caras adormiladas.
—Niños. ¿Están bien?
—¿Se van a divorciar? —el ojiverde fue directo al grano, dejando a su padre sorprendido.
—¿Cómo sabes eso Damián?
—¿Entonces sí lo van a hacer?
—¿De dónde sacaron eso?
—No importa. ¿Se van a divorciar o no?
—Vayan a dormir.
—Maaaaaaa. —dijo Damián alargando la palabra.
—Silencio. Vayan.
Los tres asintieron subiendo las escaleras de la gran Mansión Wayne dejando a sus padres solos.
—Está decisión ya está tomada.
—Ca—
—Lo siento Bruce. Antes de ser madre y esposa, soy también una mujer, y está mujer quiere ser libre, ya no quiero estar esposada a ti.
Bruce sonrió burlonamente.
—¿Esposada a mi? ¿Te obligué a tener hijos?
—No metas a los niños en esto, fui esposada a ti, me obligaste a casarme, me obligaste a verte todos los días, básicamente, esto fue una obligación, y te odio por ello.
—¿Qué?
Diane volteó viendo a la más pequeña de los Wayne, Holly estaba aferrada a su oso, viendo a su madre con dolor.
—Holly, amor. —intentó intervenir Bruce, pero Holly solamente retrocedió.
—¿No me van a comprar el pony?
—Diane suspiró, al menos no había escuchado nada. —lo hablaremos después.
—¿Cuándo?
—Mañana, después, antes o durante el desayuno.
—¡Quiero que sea ya!
—Amor, mamá ya—
—¡YA!
—Holland Wayne Al Ghul, ve a tu habitación inmediatamente a pensar sobre tu comportamiento, lo tienes todo Holland, hay niños que desearían tener todo lo que tú tienes, el dichoso pony no se comprará.
—¡Pero!
—A tu habitación Holland, mañana hablaremos sobre tu comportamiento.
La pequeña soltó un sollozo, Bruce intentó acercarse siendo detenido por Diane, quien lo había tomado del brazo.
—¿Desde cuándo te ejercitas?
—¿Hasta ahorita lo notas?
—Efectivamente sí. A tu habitación Holland, sí lloras con verdadero dolor, tu padre y yo estaremos ahí, si es por un capricho, ni lo pienses.
Holland inmediatamente dejó de llorar, para después irse a su habitación.
—Mami.
—Dime Holly.
—Te quiero.
—Yo te quiero más linda, descansa.
—Papi.
—Dime cielo.
—Te quiero.
—Y yo a ti cariño, duerme bien.
La pequeña subió completamente las escaleras dejando a sus padres solos.
—¿Hasta ahora notas qué me ejercitó?
—Siempre te veo con traje, y nunca en el gimnasio. ¿Cómo iba a saberlo?
—Bueno, tu estás en forma, y yo sí lo notó.
—Buenas noches Bruce, mañana hablaremos.
Esa mañana nunca llegó, Jane se había levantado temprano para hablar con su madre del famoso chico con el que salía, pero para su sorpresa, su madre ya no estaba.

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Gotham One Shots
عشوائيOne Shots de la serie de Netflix, Gotham. © Todos los personajes son de sus creadores, excepto el personaje que mencionaré en sus historias, ese será de mi pertenencia. Sin más que decir, espero y los disfruten.