Piero sostenía mis piernas mientras Vicco acariciaba mis pechos, ambos tenían la respiración acelerada mientras a mi me faltaba el aire.
-Vuelves a decir que no nos conoces- el rubio que tenia delante me tomo del mentón -y te follare frente a todos...
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Olivia...
Abrí los ojos en un lugar muy extraño, mi cuerpo flotaba y solo había una extraña luz roja que parpadeaba. Al parecer, la habitación era tan grande que ni siquiera se podía dimensionar el tamaño. Me levante como pude y con sumo cuidado me quite los cables que estaban en mi cuerpo.
Solo se oia una extraña alarma que hacia que mis oidos zumbaran, logrando que un dolor punzante se alojara en mi cabeza. Al ver hacia los lados, pude notar a Piero y Vicco sumidos en sueño profundo, con los mismos cables conectados a ellos.
-¿Chicos?- los llame sin obtener respuesta. -Chicos-
Desde arriba, oia personas hablar. -sujeto 001 desperto-
-HAGAN ALGO, MIS NOVIOS NO DESPIERTAN- les grite -AYUDA, AYUDENME-
Una voz familiar llamo mi atención -¿ella esta despierta?- alguien le respondia -vuelvan a dormirla-
-NO NO , NO QUIERO DORMIR. NO QUIERO- quise salir de esa tina, pero no pude.
Mis ojos se cerraron y volvieron a abrir pronto. Me sente de golpe en la cama, viendo a todos lados con desespero, esperando encontrar a Piero o a Vicco por algún lugar.
-Hey, hey- el pelinegro me sostuvo los hombros mientras mi respiración era descontrolada y seguia perdida- estabas teniendo una pesadilla, estamos en casa-
-Yo...-
-Solo fue una pesadilla, hace unos minutos estabamos intentando despertarte. Te movias en la cama gritando nuestros nombres. Nos despertaste y Piero fue por agua para ti. Amor solo era un sueño feo-
Lo abrace con fuerza -No lo parecia-
-Oye yo tambien quiero cariño- su hermano me miro desde el umbral de la puerta, con un vaso de agua en su mano. Al ver mis ojos cristalizados, dejo la broma y se acerco a la cama -¿estas bien hadita?-
Negue sin responder.
-Tuvo una pesadilla- Vicco seguia manteniendome a salvo, pegada a su cuerpo -cree que fue real-
-No cariño- el rubio acaricio mi cabello -solo era un sueño feo, no pienses en ello-
-Se sentia muy real- susurre casi en un tono imperceptible -muy real-
Senti su toque en mi espalda, notando que tambien me abrazaba -No dejaremos que nada malo te ocurra, jamas-
-Lo se-
-¿Confias en nosotros?-
-Si- asenti muy segura.
Estuve casi una hora envuelta en sus brazos, y cada vez el sueño volvia a mi. Recordandome que mi cuerpo seguia agotado por el sexo y tenia que descansar, cuando estaba al borde de quedarme dormida, oi de nuevo la voz del pelinegro.
-Ahora ¿te parece si dormimos?- Vicco beso mis labios -es de madrugada y todavia tenemos tiempo. Seguro sigues agotada-
Nos acomodamos nuevamente, dejandome a mi en el medio -duerme hadita, estare aquí por la mañana-
Me desperte con los rayos de sol que chocaban en mi cara, al girar a la izquierda, la figura de Piero con los ojos cerrados fue lo primero que vi. Sus facciones totalmente relajadas, las largas pestañas que parecian postizas, su pecho que subia y bajaba acompasado, mostrando que estaba muy relajado.
Del lado derecho, Vicco tenia un brazo sobre su cara, dejandome ver solo sus carnosos labios y barbilla definida. El cabellos lo tenia un poco mas largo de cuando los habia visto por primera vez.
Me levante con cuidado, yendo a tomar una ducha. Al mirarme en el espejo del lavabo, pude ver la marca de sus dientes y chupetones en mi piel, el rastro comenzaba en mi cuello y bajaba, pasando por mis pechos, hasta mi abdomen. Mire hacia abajo, viendo que en la cara interna de mis muslos habia otros esparcidos.
Abri la regadera, dejando que el agua corriera mor mi cuerpo, al salir me senti sumamente refrescada. Enrolle una toalla a mi cuerpo y sali en direccion al cuarto de los chicos.
Cuando entre, los encontre a ambos sentados en el colchon, con su cuerpo recargado en el espaldar. Ambos me veian con una sonrisa de recien levantados, sus cabellos un poco alborotados y sus ojos aun hinchados por haber dormido tanto. -Buenos días- les sonrei.
-Buenos días osita-
-Buenos días hadita-
Camine hasta la cama y deje un beso en cada uno, -Piero me puedes prestar algo de ropa-
Él asintio -claro hadita, toma lo que quieras del armario. Ire a tomar una ducha-
-Yo preparare el desayuno- los dos hermanos se levantaron.
Vicco al pasar junto a mi sonrio tocando mi cuello -eso es una advertencia de que eres nuestra-
-¿Me estan marcando? -
Piero sonrio encogiendose de hombros -tomalo como quieras, pero si alguien te ve. Sabra que ya no estas disponible-
Se perdieron en la puerta, dejandome cambiarme sola y en paz.
Me sente por unos minutos al borde del colchon, pensando en absolutamente nada. Hasta que la pesadila de la noche anterior regreso y de mis ojos cayeron lagrimas sin que lo notara.
Ese sueño habia parecido demasiado real y lo peor, era la sensacion que tenia aun en mi cuerpo. Como si mis sentidos recordaran esa situación.
Finalmente me cambie, buscando una camiseta verde que hallé, sali del cuarto caminando descalza hasta la cocina donde me encontre la hermosa postal de los hermanos charlando muy amigables mientras terminaban de colocar las cosas sobre la barra desayunadora para los tres.
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Muy tipico de mi irme y aparecer unos meses despues casi con toda la obra publicada...
Estos cap se van a subir todos juntos, incluyendo el final.
Desde siempre, no fue un libro tan largo, pero con muchas emociones y misterio.
