Vicco...
Finalmente había llegado el día de la ejecución, por la mañana me levante temprano y salí a correr por las calles de Berlín, pase frente al complejo privado donde el ministro vivía y según lo que habíamos estado investigando, los guardias de seguridad cambiaban cerca de las 5 p.m., en ese momento teníamos una ventana de cerca de 3 minutos para entrar.
Seguí mi camino, revisando si la ruta de escape que usaríamos estaba liberada y así lo era, el callejón que daba una bodega no se encontraba obstruido. Para cuando regrese al hotel, el reloj marcaba cerca de las 9 por lo que Olivia ya debía estar levantada.
Marque su numero y la llame. No habíamos recibido otro mensaje sobre que ella estuviera mal, por lo que me sentía tranquilo, pero no del todo.
-Buenos días Osita- no espere a que ella hablara primero.
-Buenos días amor-escuche una pequeña risilla.
-¿Cómo has dormido?-
-Bien y ustedes-
-Yo bien ¿ya desayunaste?-
-mhm-hizo una pausa -¿saliste a correr?-
-Sip- sentí que golpeaban mi puerta -Osita llamaba para saludarte, Piero llego, tenemos que hacer algo. En la noche te llamare-
-Okay, te amo- el sonido de su beso me hizo reír.
-Te amo mas-
El rubio entro en cuanto le abrí la puerta -¿la llamaste?-
Asentí.
-Yo lo hice antes- se burlo -siempre segundo hermano-
Pase por alto su provocación y me metí al baño a tomar una ducha ligera para quitarme el sudor, cuando salí, los planos estaban sobre una mesa y él estaba ocupado en otra cosa. Me vestí con algo cómodo pero negro y busque mi tablet para ver las cámaras de seguridad.
-¿Estas listo?- Piero a mi lado ordenaba nuestras armas sobre la cama.
-Si- me coloque el auricular.
-Esto sera limpio, recuerda que pidieron que fuera un suicidio.- me recordó.
-Claro, entendido, suicidio-
El rubio carraspeo la garganta -¿la escuchaste bien? quiero decir, ¿no se notaba triste?-
-No para nada- sonreí transmitiéndole tranquilidad -hasta se rio cuando me contesto.-
-Que bueno, no me deja tranquilo si no se que esta bien-
Cerca del mediodía nos llego un aviso que el ministro esa misma noche tendría un vuelo de emergencia por lo que debíamos adelantar la muerte. -Mierda y mas mierda- tomamos todo rápidamente -te dije que algo no iba bien- gruñí mientras bajábamos al lobby.
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Just A Dream 💎
Novela JuvenilPiero sostenía mis piernas mientras Vicco acariciaba mis pechos, ambos tenían la respiración acelerada mientras a mi me faltaba el aire. -Vuelves a decir que no nos conoces- el rubio que tenia delante me tomo del mentón -y te follare frente a todos...