Mi placido sueño es atormentado por unos severos y rápidos golpes en la puerta. Gruño molesta y maldigo en voz baja a la vez, para a continuación esconder mi rostro en el cuello de Luke quien se encuentra durmiendo a mi lado con uno de sus brazos debajo de mi cuerpo rodeando mi cintura. Intento volver a dormirme, no obstante los golpes se vuelven a escuchar, esta vez más bestiales.
Bufo frustrada y mosqueada, y acto seguido me levanto del colchón con mucha pereza sintiendo el frío de la habitación al alejarme del calor corporal que Luke me estaba transmitiendo. La pereza invade todavía más mi cuerpo, aún así consigo salir de la cama y encaminarme hacia la puerta fregando con mi mano uno de mis ojos adormida.
Una vez estoy enfrente, abro la puerta con lentitud y quedo confundida cuando nadie se encuentra al otro lado. Doy unos pasos hacia delante para visualizar el pasillo a mi derecha intentando buscar alguna explicación. Mis ojos contemplan una figura humana no muy lejos de donde estoy yo, su rostro no lo puedo distinguir, aunque su vestido blanco destrozado con manchas de sangre y su pelo negro en una coleta crea un escalofrío por todo mi cuerpo.
La pequeña joven empieza a caminar hacia a mi, y a menudo que avanza, en el suelo va dejando un rastro de sangre que consigue paralizar mi cuerpo. Tan solo puedo dar un paso hacia atrás asustada y justo cuando ella empieza a correr hacia a mi, suelto un grito ahogado y me adentro en la habitación cerrando la puerta con el corazón a cien.
Me alejo temblando de la puerta, y vuelvo a gritar asustada cuando tropiezo contra un cuerpo detrás mio. Alzo mi mano a la vez que me giro para golpear lo que sea que este allí parado, aunque una mano más grande que la mía impide mi golpe tomando mi muñeca con fuerza.
- Ángel, soy yo.
Miro al chico delante mio y cuando veo sus ojos azules, suelto un suspiro aliviada y no puedo evitar abrazar su pecho sintiéndome segura con él a mi lado.
- ¿Por qué has salido de la cama? ¿Alguna pesadilla?- susurra, aceptando mi abrazo.
Me separo de su cuerpo y lo miro fijamente.
- Hay...hay una niña allí afuera.- murmuro, con cierto temblor en mis palabras.
Luke frunce su ceño y me aparta de su delante para caminar hacia la puerta con sumo silencio. Yo me abrazo a mi misma nerviosa viendo como el rubio abre la puerta tan solo unos centímetros y saca su cabeza durante unos segundos. Después, vuelve a entrarla y cierra la puerta para girarse a mi confundido. Se acerca a mi y una de sus manos se posa encima de una de mis mejillas.
- Oye, a lo mejor lo has soñado, ven, vamos a...
Quito su mano encima de mi cara y frunzo mi ceño.
- No lo he soñado, la he visto con mis propios ojos.
Camino hacia la puerta otra vez, esta vez con más aseguranza y miro por una mirilla situada por el centro de la madera. No se escucha nada y tan solo veo la pared enfrente nuestra, hasta que de repente unos pasos veloces rebotan por el pasillo. Quedo completamente paralizada cuando se paran justo enfrente de la puerta, no obstante no visualizo nada. Pero no tarda en aparecer justo delante de mis ojos el rostro de una niña. Quedo horrorizada observando como su piel se encuentra con quemaduras bestiales, la sangre es lo que destaca más y el agujero de uno de sus ojos se mantiene con tejidos.
No puedo evitar soltar un grito aterrorizada y me aparto con fuerza de la puerta, cayendo de culo al suelo. Acto seguido, el pomo de la puerta empieza a girarse sin control y Luke ágil aparece delante mio para pararlo, no obstante cuando su piel roza el metal, suelta un gemido de dolor. Esta vez sin tocar la madera, mira por la mirilla y se queda completamente paralizado durante unos segundos.
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Room 307 #Wattys2018
FanfictionNunca debí entrar en esa habitación, pero... a lo mejor el destino lo quiso así, a lo mejor tuvo que pasar, a lo mejor ese era nuestro futuro.