Love song | ᵏⁿʲ ʲʲᵏ ᵐʸᵍ

chapter 5 ; lunch time «Part 2»

Durante el almuerzo, todos nos enfrascamos en una conversación amena acerca de las próximas películas que estarían en el cine. Nos pusimos de acuerdo a cuál película queríamos ver y después de ello, el timbre sonó para avisarnos que teníamos que regresar a clases. 

Como esperaba, Yoongi acompañó a Ari hacia nuestro salón. Podía notar la manera en que ella se relajaba de a poco cada vez más. Lo que me hacía sentir contenta. A Ari le costaba confiar en las personas, pero una vez que lo hacía, no había un alma que se pudiera apiadar de su confianza. 

―Entonces, nos vemos mañana en el almuerzo otra vez ―le sonrió Yoongi, Ari asintió, ya casi no se ruborizaba, ya se sentía cada vez más segura de sí misma ―. Suerte en clases de mates. 

E igual que en la mañana, Yoongi se acercó a mi amiga para colocarle el cabello detrás de la oreja, ahora acercándose demasiado a ella. El aire se quedó en mi garganta cuando me di cuenta de aquello. 

―Uy, lo siento, hyung ―se disculpó Jungkook cuando quiso pasar por la puerta y chocar con el mayor. 

Mis ojos se abrieron de par en par. Nunca había visto esta versión de Jungkook. No estaba segura si estaba haciendo lo correcto, que más que nada, me parecía que no. Tampoco sabía si me gustaba, que bueno, algunas muecas por celos estaban bien... pero, ¿empujar a su hyung? Creí que se llevaban bien. 

―Ah, no hay ningún problema, Jungkookie ―ni cuenta se había dado ―. Nos vemos más tarde. ¿Vamos Nam? 

―Sí, ya te alcanzo ―dijo el chico que había estado a mi lado en todo momento. Se volvió hacia mí ―. Hablamos después. Adiós. Adiós, Ari, Jungkook. 

Mis amigos se despidieron con un movimiento de la mano, mientras que yo solo lo hice con un sonríente saludo. 

―¿Qué demonios fue eso? ―le preguntó Ari nada más estar solos. 

―¿De qué hablas? 

Jungkook se hizo el desentendido mientras caminaba hacia su banca, Ari y yo le seguimos de cerca. Tal vez yo no lo decía, pero la verdad es que estaba demasiado intrigada por su actitud. Mi amiga podía comenzar a tomar la batuta y ya intervendría cuando notase que las cosas se pusueran feas. 

―De que te has estado comportando como un imbécil desde, no sé, ¿desde cuándo Mei? 

―Mmmm, ¿todo el día? ―preguté por lo bajo. Solo para que él se diera cuenta que no solo Ari se percataba de su comportamiento. 

Los ojos de Jungkook me miraron un poco por sorpresa, abrió la boca para replicar acerca de la acusación, pero no le dio tiempo porque pronto llegó la profesora Im. Woo Ari miró a Jungkook con una expresión que decía: continuaremos con esta charla, que Jungkookie solo se pasó por los cojones al virar los ojos. 

Mi mirada chocó con la de Ari y pude ver lo indignada que estaba. Oh, oh, seguro esto sería una discurisón demasiado larga y demasiado intensa. Ya lo veía venir y será mejor que me prepare mentalmente. 

―Ey, ¿a dónde crees que vas? ―preguntó Ari al final de las clases, cuando Jungkook cogió su mochila. Su plan de escape se arruinó en el segundo en que Ari le cogió del suéter. 

―¿A mi casa? ―le respondió Jungkook. Suspiré con pesadez. 

―No, tú te vienes con nosotras, tenemos que hablar ―comenzó a discutir Ari con tu amigo, a ti te hubiera encantado prestadles atención, pero ciertamente, la vibración de tu móvil cuando llegó un mensaje, ocupó tu atención.

Namjoonah

Todo bn con los chicos? 

Sí, es solo Ari discutiendo con kookie

supongo que es por su actitud del día
de hoy, pensé que no lo había notado

Es que, bueno, fue un poco obvio, no crees?

Sí, creo que tienes razón

Seguro que se arreglan después

no se la pasan discutiendo siempre?

Pensaba en responder el mensaje, pero pronto escuché cómo es que Ari gruñía de molestia. 

―Bueno, haz lo que quieras, después no vengas llorando diciendo que no te presté atención o no me preocupé por ti.

Dicho eso, la chica cogió su bolso y salió del salón. Cofundida, miré hacia Jungkook, quien ahora parecía como un cachorro regañado. Suspiré con pesadez. 

―Tenemos qué hablar ―le dije en voz medio baja. 

Frustrado, él se sacudió el cabello ―. Ya me imagino de qué tiene que ser esa charla. 

Los dos caminamos fuera del instituto. No íbamos tan atrás de Ari, ella podía ser pequeña de tamaño, pero cuando estaba cabreada, podía caminar mucho más rápido que Jungkook, aún cuando él tiene una zancada mucho más larga. 

Desde la distancia pudimos ver cómo es que se ponía en la parada de autobús. Jungkook se detuvo justo cerca de la árbolera que nos cubría demasiado bien de la mirada de nuestra amiga, aunque sabíamos que no podía vernos desde donde estaba. Joder, si es que este chico es demasiado obvio, ¿cómo es que nunca me di cuenta? O, ¿por qué es que ella no se da cuenta? 

Jungkook miró hacia la para de bus cuando le vimos pasar, Ari a la distancia subía a este y luego buscaba asiento, justo en la parte trasera, cerca de la puerta. A ella siempre le gustaba esa parte, le gustaba sentir el aire que había cuando abrían la puerta y le gustaba ver cuando las demás personas entraban. 

―Bueno, supongo que tengo que contarte, ¿no es así? 

Suspiré ―. No sino quieres hacerlo, Guk. 

Mi amigo chasqueó un poco la lengua, antes de asentir. Como si se estuviera debatiendo internamente. 

―Tengo que sacarlo, Mei, igual; eres nuestra mejor amiga, creo que debes saberlo ―dijo él en voz baja, con la mirada en el suelo ―. Incluso, me sorprende que ella no te haya contado. 

Me alarmé un poco al escuchar aquello ―. ¿Qué habéis hecho? 

―Nada malo ―se apuró a decir, aunque no se veía del todo convencido ―. Bueno, ella no hizo nada malo... solo...

―Vamos a un café, ¿quieres? Para que hablemos bien o podemos ir a un parque. Donde te sientas más cómodo ―le sugerí. 

―Es que no me siento muy cómodo contando esto, Meimei, pero... tengo que hacerlo. Tanto para sacarlo de mi sistema, como para que estés enterada y me digas tu punto de vista en esto. 

―Vale, entonces ya sé a dónde podemos ir.