Tokyo...

62

Otro mes pasó y Kyo seguía actuando como si Jiminssi no estuviera, le hablaba lo justo y necesario, cuando no estaba con su hijo estaba encerrado en su oficina por lo que Jiminssi casi ni lo veía por lo que hoy como todas las noches estaba llorando encerrado en el baño al no aguantar más su indiferencia y para que no lo escuchen llorar, Jiminssi no solo estaba luchando por aguantar las ganas de tirarse por el balcón sino que tenía una lucha interna con Magnum al querer este tomar el control, pero Jiminssi no lo dejaría, Magnum le diría muchas cosas feas a su marido o haría cosas que solo arruinarían peor las cosas, por lo que luchará por mantenerse fuerte y aguantar lo más que pueda, sin darse cuenta comenzó a hamacarse y a darse la cabeza contra la pared lo que no anunciaba nada bueno al hacer esto antes de que le dé una crisis, pero no podía salir del baño para pedir ayuda porque antes de salir de la clínica le habían recetado unos calmantes para tomar en caso de que sea necesario y solo era media pastilla pero él se había tomado dos pastillas juntas volviendo a su cuerpo como paralizado, cosa que lo asustó aún más, por lo que optó por gatear hacia la cama, con un poco de dificultad se subió al ser está alta, una vez que lo logró, se acomodo, se cubrió, suspiro y solo fue cuestión de segundos para caer en la inconsciencia. No sabe cuánto tiempo pasó, solo sabe que no estaba en su cuarto ni en su casa, miró en todas direcciones y se dió cuenta de que estaba en una clínica, trato de fregar sus ojos pero no pudo, levanto solo un poco la cabeza para mirar sus manos encontrándose con que sus manos estaban atadas a la cama, miró hacia su costado asustado encontrándose con la espalda de su marido el cual aún no había notado que despertó.

Kyo...- se giro para mirarme y pude darme cuenta que había estado llorando.

- qué ocurre? porque estoy aquí y así?...- camina despacio hasta la cama sentándose en ella.

Fui a buscarte porque Ana me dijo que no habías bajado a comer y cuando subí intenté despertarte pero no lo hacías, ví el frasco de pastillas debajo de tu almohada y me asusté, ¿porque nunca me dijistes sobre las pastillas?...

Me puedes soltar por favor?...- lo miro dudoso un momento pero finalmente lo hizo.

El médico dijo que tuvistes una sobre dosis por lo que por políticas de la clínica te tuvieron que atar por si intentabas suicidarte nuevamente...- niego asustado.

Yo no quise suicidarme, jamás haría algo así, cómo tampoco te lo oculte, pero tampoco es que teníamos diálogo como para contarte...- me senté en la cama quedando más cerca de él y seque sus lágrimas, se queda en silencio con los ojos cerrados y la cara apoyada sobre mi mano derecha.

Estoy cansado Jimi, estoy cansado de llorar, estoy cansado de luchar contra el amor que te tengo, yo solo quiero ser feliz, nose que ise mal para estar sufriendo tanto pero no quiero sufrir más....- me subo sobre él y lo abrazó por el cuello mientras él se aferra a mi cintura llorando.

Y si comenzamos de nuevo?...- lo separó solo un poco de mi para hacer que me mire a los ojos.

- busquemos una solución juntos, hablemos sin gritos, vayamos a terapia juntos nose, hago lo que tú quieras pero por favor no me dejes, se que con esto no arreglo nada y se que me merecía que no me perdones tan fácil, pero siento que vale la pena arreglar esto, lo que tenemos es fuerte y real, yo no soy tan fuerte como todos creen kyo, cuánto más lejos te siento más me debilito y no quiero eso, yo también solo quiero ser feliz, pero lo quiero ser contigo, con mi hijo, volviendo a sentirme parte de una familia,mi familia, se que soy egoísta al pedirte esto pero quiero que dejemos todo atrás y comencemos de nuevo, ¿ Crees que puedas hacerlo?...- pedí al ver que no contestaba.

- si tú me das una última oportunidad Kyo yo te amo tanto que juro porque me muera en este mismo instante que solo viviré por ti y solo por ti para hacerte feliz lo que me resta de vida o los que me dejes pasar junto a ti, para que sientas que valió la pena darme una última oportunidad ¿Que dices?me das una última oportunidad?...- niega y mi corazón se detiene.

La pregunta sería, ¿nos damos una oportunidad? porque yo también tengo mi porcentaje de culpa en todo esto...- muevo mi cabeza confirmando ya que por el llanto no puedo hablar, cuando negó me quise morir porque sinceramente no me imagino una vida sin él, pero después no pude dejar de llorar de la felicidad.

- puedo besar...- no lo deje terminar de hablar que me tire a sus labios.

Pero yo lo había extrañado demasiado y necesitaba más, quería todo de mi marido por lo que me importaba muy poco que estemos en una clínica, solo fue cuestión de mover 3 veces mi cadera contra él para que este me tomé del trasero, me pegue a la pared y sienta el seguro de la puerta siendo puesto, luego camino hacia el baño, con mucha facilidad me quito el pantalón para luego dejarme sobre la bacha, bajar su pantalón al ser deportivo y hundirse en mí de una sola vez, yo solo pide gruñir sobre sus labios antes la deliciosa sensación de tenerlo dentro de mí nuevamente, el sonrió.

Recuerdas nuestra reconciliación en Roma?....- asiente.

- así quiero que me lo hagas todas las mañanas y noches, pero ahora solo muevete que no tenemos muchos tiempo y estoy muriendo por sentirte...

Cómo se dice?...- lo miro sonriendo, antes de acercarme a su oído y sonar lo más sensual posible.

Jodeme Tokyo...- dicho esto comenzó a moverse y tuve que hacer un esfuerzo descomunal por no jadear en voz alta cuando me estampó contra la pared ya que como la bacha hacía ruido contra la pared decidió hacérmelo contra una de las paredes del baño, luego nos duchamos y el se encargo de bañarme y secarme como en los viejos tiempos, luego me tomo en brazos y me llevó a la cama donde me cubrió con la manta, dejo un beso sobre mis labios y volvió al baño para secarse y vestirse nuevamente antes de volver a la cama conmigo, me acomode en su pecho y nos dormimos al poco tiempo.