─── ❝𝐌𝐢 𝐃𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨 ❞ ─── ᵇʸ ᴼᵐᵃʳ ᶜᵃᵐᵖᵒˢ

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Pov's Jimena:

Después de aquella noche llena de emociones y sorpresa todo se había puesto de cabeza, no para lo malo si no al contrario, todo era bueno. Omar aun no se la creía y estaba realmente emocionado, esa noche ni siquiera pudo dormir, quería salir y gritar a los cuatro vientos que seria papá.

Brisceida, Angy y la mamá de Jordan fueron las que me ayudaron a estar segura de mi embarazo, compraron cuatro tipos diferentes de pruebas de embarazo y en todas salía positivo, ahora nos tendríamos que quedar mas tiempo de lo paneado en Culiacán, Omar me tenia una sorpresa y yo tenia que hacerme los estudios correspondientes.

Aun tenia miedo de lo que podía pasar a futuro, una joven y primeriza madre, no tenia mis estudios terminados y tampoco podía vivir toda la vida manteniéndome de los ingresos de Omar, aunque el me había dejado muy en claro sus palabras.

¨-esto es de los dos, es nuestro hijo ahora y yo me hare cargo de todo, no quiero que te hagas locas ideas de que no me hare responsable o que te dejare sola; eres el amor de mi vida y agradezco a dios por ponerte en Mi Destino y por darnos esta gran bendición -limpio mis lagrimas y me dio un dulce beso¨

Cuando les dimos la sorpresa a los demás todos eran una mar de lagrimas, que decir de Jordan; el fue el mas cercano a nosotros, el que nos hacia ver nuestros errores y que siempre estuvo para escucharnos, no importaba a cual de los dos era, estuvo en los peores y mejores momentos. Ahora no paraba de decir que seria tío y que estaba orgulloso por nosotros, no paraba de hablar con mi bebe, el cual crecería en algunos meses mas, por ahora era algo muy pequeño dentro de mi.

 Los dos habíamos hablado ya con mi papá y hermanos al igual que con la familia de Omar pero preferimos hablarlo mejor cuando todos estuvieran aquí, hubo algunos regaños pero también felicitaciones y muchas emociones a flor de piel, pude ver a mi papá con algunas lagrimas en sus ojos a través de la pantalla, aun no sabia porque Omar los reuniría aquí pero de lo que estaba segura era de que se tenia algo entre manos y al parecer era la única que no sabia que cosa era.

Eran las doce del medio día y estaba solo con Angy en casa, nuestros familiares llegarían hoy y mi novio se encargaría de todo, me sentia mal por dejarlo con toda esa responsabilidad pero nadie me dejaba hacer esfuerzo alguno, solo estaría encerrada en estas cuatro paredes el resto del día hasta la noche.

Me sentia mas cansada que otras veces, con muchísima hambre y que decir de los antojos era normal ahora que tenia a una personita viviendo las veinticuatros horas del día conmigo, todo tenia que ser al doble. Todos me consentían mucho, mis hormonas estaban mas atentas que nada, era mas sensible y todo me causaba tristeza y ganas de llorar. Eran síntomas que tenia desde hace tiempo pero no dejaba que salieran a la luz, sin saber lo que en realidad eran.

-quieres que te prepare algo? -pregunto Angy al pie de la puerta-

-no bonita, no tengo tanta hambre, tal vez mas tarde -dije con una sonrisa-

-esta bien, iré a meterme un rato a la alberca

-claro, con cuidado 

Angy se alejo de las camastros donde también me encontraba yo, el calor representativo de este lugar llegaba a mi cuerpo, bebía de mi fresca limonada y veía el cielo, los momentos que había vivido en estos últimos meses llegaron a mi mente, algunos buenos y otros malos; como la primera vez que vi al que ahora será el padre de mi hijo, como me perdí en esos bellos y oscuros ojos café, su piel morena y todo de el. Cada que lo veía mi corazón saltaba con alegría, como si fuera la primera vez. Respondí el mensaje de mi chico que recién llegaba a mi teléfono.