Capítulo 29.

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El en departamento J-4 pocas veces reinaba la paz. Los habitantes del departamento tenían una relación caótica por lo que las peleas y los gritos nunca faltaban en el lugar.

La mayoría de las veces las discusiones ocurrían entre sólo dos de los habitantes y un tercero se veía involucrado de alguna extraña manera, dejando al cuarto miembro como el único que hacía un llamado a la calma y cordura y terminaba riñendo al resto por su comportamiento cuestionable.

Sin embargo aquella mañana era ese miembro quien estaba recibiendo los regaños de los otros tres.

-Muy bien... Repasémoslo de nuevo – Takasugi intentaba por todos los medios mantener la calma.

Ni un sólo ruido se escuchó, dándole entrada libre a continuar.

Takasugi, Gintoki y Sakamoto estaban de pie en la sala, frente a ellos estaba Katsura sentado en el suelo sobre sus rodillas.

-Zura... ¿Qué es eso? – Shinsuke señaló al ser vivo que yacía a un lado de su amigo.

-Es Elizabeth -.

Esa respuesta y la expresión tan despreocupada en su rostro, hicieron que dos venas se saltaran en las frentes de Gintoki y Takasugi.

-Y dime, Zura-kun ¿Qué se supone que es Elizabeth? – Cuestionó el de cabellos plateados rechinando los dientes y controlando su enojo.

-Eso es obvio con sólo verlo – Respondió solemne, tomó a la criatura en sus brazos para levantarlo y mostrarlo ante todos – Es un Anasplatyrhynchos domesticus, coloquialmente llamado aigamo o... -.

-Un pato – Dijo Sakamoto.

-Correcto – Asintió Katsura.

-Un pato – Repitió Takasugi.

-Así es – Asintió Katsura de nuevo.

-Un pato... – Dijo Gintoki. Su expresión rápidamente cambió a una de enfado – ...¡¿Trajiste un pato al departamento?! -.

-Así es –.

-¡¿Cómo que "así es"?! – Gintoki tuvo que ser controlado por Sakamoto o se lanzaría contra su amigo de cabello largo.

-¿En qué estabas pensando, Zura? – Cuestionó Takasugi.

-¡Obviamente no estaba pensando! ¡Nunca lo hace! -.

-¡Cálmate un poco, Kintoki! – Tatsuma estaba haciendo un gran esfuerzo para retenerlo pero no estaba seguro de cuantos golpes de codo en la cara podría soportar.

-Para empezar... ¿De dónde demonios conseguiste un pato? – Esa era otra cosa que intrigaba a Takasugi.

-¿Lo robaste de alguna granja? –.

-No lo robé – Katsura se mostró algo ofendido por al insinuación de Sakamoto – Lo recogí.

-¿Ah? – Confusión colectiva.

-Ayer mientras caminaba de regreso a casa me encontré con él – Dijo mirando al pato y recordando aquel momento.

Efectivamente mientras iba de regreso a casa luego de la escuela, se encontró con una caja maltrecha de dónde provenía un particular sonido parecido a un graznido. Se acercó a ver de qué se trataba y se encontró con el pequeño pato de color blanco, aunque en ese momento tenía muchas manchas de suciedad en todo su cuerpo. La criatura se veía muy pequeña y parecía asustada por lo que se quedó con él durante un momento esperando que alguien volviera a recogerle pero luego de 30 minutos nadie se apareció. Estaba por marcharse pero el pequeño animal le miró con ojos de tristeza y su corazón no tuvo la fuerza para dejarle solo.

Departamento J4 - GintamaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora