20. Una cita divertida

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12 de mayo de 1978

En un mes los chicos y las chicas se graduarían y se irían de Hogwarts y la verdad no estaba preparada para esto, mis inseguridades hacían demasiado complicada la situación. Mack y Remus desgraciadamente habían roto, y bueno Sirius y Naia mas o menos después de las vacaciones de Navidad donde mis padres y ella fueron a firmar los papeles, empezaron a salir. Así que ahora eran una linda pareja. Un poco caótica, pero muy linda.

James y yo íbamos bien, pero yo tenía miedo de que una vez que se fuera de Hogwarts las cosas no fueran como antes, a mí me quedaba un año para acabar y él bueno empezaría sus prácticas para ser Auror. Por no decir que ellos estaban formando parte de la Orden, una vez que salieran de Hogwarts estarían en las reuniones y bueno preparándose para hacer misiones.

Pero debía centrarme en el presente y disfrutar de lo que me quedaba con James, ya después veríamos que hacer. 

Me encontraba con James en el lago. Él había organizado una cita ahí para estar los dos solos sin el resto de los chicos y chicas que eran demasiado chismosos.

—¿En serio crees que ninguno nos espiara? —le pregunte mientras él colocaba todo en la manta que había puesto para sentarnos.

—No creo que sean capaces —los dos nos miramos y soltamos una pequeña risa. Eso nadie se lo creía, amaba a los chicos y a las chicas, pero a veces también quería pasar tiempo con James a solas.

—Esto es lindo —viendo el pequeño picnic que había enfrente de mí, había de todo y era demasiado lindo que él hubiera hecho todo esto.

—¿Sabes lo que es más lindo? —lo mire confundida mientras negaba— Tú —lo mire con una sonrisa mientras me sonrojaba haciendo que él sonriera aún más—, también eres muy linda sonrojada.

—Cállate —le susurré viéndolo.

—¿Me callas tú amor? —asentí con una sonrisa y me acerqué a él para callarlo con un beso.

Nos separamos un poco y los dos teníamos una gran sonrisa en nuestro rostro.

—Te amo —susurro él cerca de mis labios mientras me acariciaba la mejilla.

—Yo te amo más —murmuré y él volvió a juntar nuestros labios.

—¡AHHHH! ¡Qué lindos! —nos separamos soltando una pequeña risa y vimos en la dirección de donde había sido el grito de nuestra querida Naia.

—¡Crecen muy rápido! —grito esta vez Mérope mientras Remus le extendía un pañuelo. Ella lo agarro y le regalo una sonrisa— Gracias.

Todos se encontraban ahí viéndonos con una sonrisa, no podía con ellos, pero lo único claro que es lo quería demasiado.

Después salieron todos de su escondite y se sentaron cerca de nosotros, la verdad es que no estaría mal pasar el día todos juntos como la familia descolocada que éramos.

Peter se tiro al suelo dramáticamente y todos lo vimos confundidos.

—Pido perdón, la rata no es normal, serán los golpes que se da en esa cabeza blanda que tiene —dijo Dorcas logrando que él volteara los ojos divertido y nosotros riéramos.

—Tengo sueño, pero sobre todo tengo mucha hambre así que andando parejitas que este ratoncito no se alimenta solito —Mary le dio unas galletas—. Gracias eres la única que se preocupa por mí.

—Ni que fuéramos tu madre hombre, ya eres mayorcito para conseguir tu comida tonto —le dijo Marlene divertida, haciendo que Peter le tirara una pequeña piedra.

 —¡A mi novia no Pettigrew! —Peter asustado se levanto y empezó a correr mientras era perseguido por Mérope— ¡Ven aquí cobarde!

—¡Jamás! —al final Mérope lo tiro al agua.

Y hablando sobre agua estos dos años y medio de relación con James le había contado mi miedo, así que se propuso ayudarme y hace unas semanas probamos a entrar al lago, cosa que fue un poco complicada, pero James tuvo mucha paciencia. 

Hace unos días logré superarlo un poco, pero obvio que tenía que tener a James cerca por si acaso, obvio qué sabía nadar, eso no se me había olvidado, pero por si acaso lo prefería cerca.

—¿Sabéis algo? Recuerdo que cuando Regulus era pequeño, Mérope y yo le estábamos enseñando a nadar y el idiota lo que le dijo a Mérope fue porque tenía que aprender a nadar, ni que fuera a ahogarse. Segundos después el idiota casi se ahoga y Mérope y yo lo ayudamos —Regulus miro mal a Sirius y lo único que hice Black mayor fue reírse.

—Te odio Orion.

—Me amas Arcturus —Reg volteo los ojos mientras abrazaba a Maddie que lo veía divertida.

Estaba en mi mundo cuando sentí a James agarrarme de la mano, lo mire con una pequeña sonrisa, para que luego él mirara al resto.

—Ahora volvemos —los chicos asintieron y James me levanto con cuidado para alejarnos del resto— ¿Qué pasa amor? 

—Nada James —le regalé una pequeña sonrisa que mas bien fue una mueca. Tenía mucho miedo y sabía que no tenía que pensar mucho ahora en el futuro, pero James se iría, entrenaría e iría a misiones y no quería que nada malo le pasase. ¿Y si conocía a alguien en el Ministerio en el año que estuviéramos separados? Porque estaba claro que mucho no podríamos vernos, porque él no quería ponerme en peligro y bueno bastantes cosas ya tenía como para que hiciera viajes a Hogsmeade solo para verme.

—Amor, te conozco lo suficiente para saber que no estás bien y que en esa linda cabecita ocurre algo. No quiero presionarte con que me lo digas, pero quiero que sepas que puedes contarme lo que sea sin ningún miedo amor —susurro él acariciándome la mejilla delicadamente.

—¿Y si te pasa algo? —le susurre.

—Amor, no me pasará nada, así que estate tranquila —murmuro él, pero negué.

—James... —susurre con lágrimas en los ojos—. Estamos en una guerra James y no sé si llegaras vivo o no, así que no me pidas que esté tranquila.

—Leah, te prometo que siempre volveré y los dos sabemos que cuando prometo algo lo cumplo —él se acercó a mí mientras me agarraba con cuidado de la cara.

—No puedes prometer eso James, la guerra es una cosa horrible, donde mueren personas inocentes y odio saber que tú todos los días estás fuera y yo estoy aquí dentro pensando en si volverás a cruzar por esa puerta —murmure mientras las lágrimas salían de mis ojos. Él me estrecho en sus brazos con cuidado, mientras acaricia mi espalda con cuidado.

—Escúchame atentamente amor, jamás, pero jamás dudes de mi palabra. Siempre volveré a ti aunque me cueste, siempre volveré a tu lado amor —susurro él mientras yo lo abrazaba más fuerte.

—¿Siempre? —murmuré, él se separa un poco para verme.

—Siempre Leah —susurro él mientras se acercaba a mí con cuidado para besarme.

Lo amaba demasiado y no quería que nada le pasara, solo esperaba tener el valor suficiente para superar esto, porque sentía que no sería capaz de enfrentarlo y al final tal vez lo dejaría ir, por culpa de mis inseguridades. Él era demasiado perfecto para una chica tan mediocre como yo y eso todas las chicas lo decían en Hogwarts. 

Aunque me doliera tal vez lo mejor fuera poner punto y final a nuestra historia.






NOTA DE AUTORA

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Hold You ||James Potter|| [Saga Secrets] (Wattys2022)✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora