Kiss Me Like That. [ym]

• Capítulo 24.

Cuando se levantó a la mañana siguiente, aún confundido, y honestamente molesto, la cocina estaba vacía. Aún era temprano, era obvio que algunos ya habían partido a la empresa. O a quién sabe dónde. Había dos tazas en el fregadero y una limpia en el escurridor.

Con un suspiro se puso manos a la obra para prepararse su café y unas tostadas con mermelada, que era lo que su cerebro aún dormido estaba capacitado para preparar sin incendiarse en el proceso. Y una vez que lo tuvo, contempló su existencia mirando a la pared y bebiendo sin prestar atención a lo que hacía.

Fue entonces que entró NamJoon en la cocina. Se detuvo dos segundos, y luego retomó su paso sin mirarlo, ojos fijos en la cafetera.

Ninguno dijo nada por un rato. No es que JiMin intentara conscientemente mantener el silencio incómodo, pero realmente no sabía de qué hablar.

Hacía tiempo que no se sentía tan perdido en como actuar alrededor de los miembros, estaba muy confundido. Y eso sólo lo hacia sentir peor. No se suponía que se sintiera incómodo con ellos. NamJoon era su mayor confidente,

¿Por qué no podía hablarle?

Suspiró levemente, y decidió ponerse los pantalones de una vez y dejar de actuar como si estuvieran al borde de terminar la relación.

-¿Cómo estás, hyung?- aunque lo intentó, no pudo evitar que saliera como un murmullo algo temeroso. Pudo sentir la tensión de NamJoon incluso sin mirarlo. El mayor no dijo nada por unos minutos, JiMin sintió su propia tensión subiendo, pero al poco rato NamJoon se sentó frente a él con su propia taza de café y lo miró a los ojos.

Lucía agotado, tanto o quizás más de lo que él mismo se sentía.

-He estado mejor- respondió por lo bajo. JiMin sólo pudo asentir. -¿Tú?

-También he visto días mejores.

NamJoon asintió y tomó un sorbo de su café. y de nuevo, silencio, no tan incómodo como antes, pero definitivamente muy presente. Éste duró menos que el anterior

-¿Has... ¿Has hablado con JungKook?- preguntó el mayor. JiMin lo miró confundido.

-Uh, no. ¿Debería? -inquirió cuidadosamente. NamJoon suspiró pesadamente en vez de contestar. -Hyung, ¿qué ocurre?

-Está evitándome- murmuró, su expresión dolida pero resignada apretaron el pecho de JiMin. -Lo herí. Creo que más que nunca- parecía calmado, pero JiMin conocía a NamJoon casi mejor de lo que se conocía a sí mismo, y a pesar de su porte calmado, podía ver el dolor en sus ojos cansados.

JiMin no supo qué decir. No tenía idea de que había pasado, no sabía que tan herido se sentía JungKook. Llevó una de sus manos al hombro del mayor por sobre la mesa y acarició con ternura, sin saber cómo transmitir consuelo.

Esta vez, no tenía las palabras de apoyo que solían acompañarlo para hacer sentir mejor a sus amigos.

-Siento que realmente le fallé esta vez...- El primer instinto de JiMin fue decirle que eso era imposible, que JungKook lo amaba demasiado y seguramente sólo necesitaba tiempo. Quería tranquilizar a Nam y asegurarse de que se sintiera mejor. Pero no tenía sentido intentarlo, no cuando no conocía la historia completa.

Recordó el dolor en la voz de NamJoon: "... porque nuestros padres decidieron que éramos asquerosos y que estábamos arruinando nuestras vidas..."

Se mordió el labio pensativo, curioso pero también preocupado. Y sin estar seguro sobre si era de su incumbencia o no, preguntó:-¿Qué pasó cuando JungKook y tú empezaron a salir, hyung?