Kiss Me Like That. [ym]

• Capítulo 17.

La noche era muy tranquila y relajante, JungKook se encontraba fascinado mirando la luna con NamJoon entre sus brazos, su espalda apoyada en su pecho, mientras se balanceaban suavemente acompañados de la brisa nocturna. El silencio entre ellos era cómodo, familiar y cálido.

Era muy tarde en la noche, y aunque ambos estaban terriblemente cansados después del largo día que habían pasado, habían acordado un momento a solas en la noche después de que todas las cámaras se apagaran, sólo para hacerse compañía, para compartir un momento que fuera sólo de ambos.

—Incluso el aire es cálido ahora mismo —dijo NamJoon con voz ronca, dejándose mimar, mientras JungKook acariciaba la piel de su cuello con la punta de su nariz.

—Lo es —estuvo de acuerdo, dejando un beso en piel para luego volver la vista al cielo. —¿Has visto la luna roja? —preguntó.

NamJoon negó con la cabeza, una mirada impresionada en el rostro. —¿Luna roja?

—Sí, es impresionante. Cuando apenas empieza a salir sobre el mar, toma un color rojo espectacular —explicó, no realmente sorprendido de que su distraído novio se lo hubiera perdido.

—Ah, voy a tener que prestar más atención —reconoció el más grande. Y JungKook sólo sonrió atontando. Su pecho se sentía cálido. A pesar del miedo a ser descubiertos, a pesar de sus ajetreadas vidas, e incluso cuando su tiempo libre estaba siendo meticulosamente vigilado, ellos encontraban un momento, aunque sean unos minutos, para poder demostrarse y decirse cuanto se amaban.

—¿Crees que algún día podamos volver sólo los dos? —preguntó antes de poder darse cuenta. Se sorprendió a sí mismo cuando descubrió que realmente le gustaría volver. Llevaban allí sólo tres días pero le había encantado poder pasear tranquilamente, había disfrutado bastante el calor a pesar de no tolerarlo demasiado, y se había divertido bastante. Estaba creando buenos recuerdos allí y pensó que…, sería realmente genial poder crear recuerdos con NamJoon también, en un viaje pura y exclusivamente de ambos.

NamJoon se volteó lo suficiente para mirarlo con una sonrisa algo burlona. —Pensé que querrías ir a París.

—París es muy cliché —refunfuñó.

—Bueno, es el lugar al que todos los enamorados van. —insistió NamJoon, pero JungKook podía ver que sólo estaba molestándolo un poco. A veces pasaba, NamJoon tenía un lado juguetón y burlesco que rara vez salía a la luz.

—Quiero que Malta sea nuestro París. Nunca hemos viajado solos a un lugar que no sea la casa de nuestros padres o de mi hermano, quiero viajar sólo contigo esta vez, que sea un viaje sólo para nosotros.

Fue entonces que NamJoon no respondió nada y se quedó mirándolo fijamente.

—Te amo, lo sabes, ¿Verdad?

—Te amo más —respondió tontamente, sintió como su corazón se aceleraba ante la mirada que NamJoon tenía sobre él y sonrojándose de pura felicidad. Sin demora, NamJoon se volteó por completo y lo atrajo para un beso suave, apretándolo dulcemente entre sus brazos mientras beso se convertía en pequeños besitos dejado sobre sus labios con cariño y ternura, haciendo a JungKook sonreír más idiotizado todavía.

—Podemos ir a cualquier parte que quieras, —NamJoon lo miró a los ojos con ilusión— Me encantaría viajar sólo contigo alguna vez. —JungKook sólo pudo sonreír y colgarse de él dejando más y más besos en sus labios y mejillas.

Nunca pensó que se podía estar tan malditamente enamorado de alguien, y sin embargo, cada vez que siquiera pensaba en su novio, miles de suspiros escapaban de su boca, su corazón latía desenfrenado y todo lo que quería era estar con él, alrededor de él, llamando su atención, con sus manos tocándolo de alguna manera, cualquiera que sea.