Fuego bajo la lluvia

36

—Wiii. - carcajeó tambaleándose.

—Mierda, cállate. - le dije afirmándolo lo más fuerte que puedo mientras él trataba de subir otro escalón de la escalera para llegar a mi habitación.

Bufé sintiendo el sudor en mi frente, él finalmente colaboró y llegamos a mi habitación, literalmente pase rápido y lo lance de espaldas a mi cama como saco de papas. Suspiré mirándolo, aún tenía olor a vomito, sangre seca en la orilla del labio debido al golpe que le dí antes, y su chaleco delgado también estaba con un poco de vomito.

"¡Esto es asqueroso!, definitivamente hice algo malo en otra vida".

Tenía que dejar de lloriquear, pero es que, no puedo, no sirvo para cuidar borrachos, sin embargo sí me gustaría que me cuidarán, pero estoy seguro de que yo soy un borracho mucho más tranquilo y menos problemático.

Fui al baño para buscar un nuevo cepillo de dientes y saque uno de mis pantalones con una polera del closet, solo eso, porque la ropa interior jamás le pasaría, además... no creo que le queden, regrese mirándolo estar en la misma posición que había quedado antes.

"¿No está muerto, cierto?".

—Oye. - lo llame tocándole el hombro. —¡Oyeee!. - lo moví más fuerte.

—¡Quee!. - me miró molesto.

—Mueve tú culo y ve a limpiarte.

Frunció el ceño como si por un segundo no entendiera de qué estaba hablando, así que le apunte su polera con la barbilla, él bufó y se sentó rascando sus ojos.

—Deje cosas que puedes usar en el baño.

Asintió y se levantó, pero se detuvo antes de llegar para mirarme. —¿Me puedo duchar?.

Dudé unos segundos. —Si, pero no te vayas a caer, porque no me haré responsable. - advertí.

Carcajeó. —Te falta experiencia Donghyuck, yo me he duchado en peores condiciones. - se encogió de hombros y terminó de entrar al baño.

Me quedé confundido al ver como su mirada burlesca había regresado, por lo menos parecía que se le habían bajado un poco las revoluciones del alcohol en su sangre, cuando escuche el agua de la ducha caer recién me concentré en mí mismo.

Me saqué la chaqueta para solo quedar en pijama tal como estaba antes y deje la otra que había llevado de repuesto sobre la cama, ni siquiera se la había puesto porque la iba a manchar con vómito, después saqué tres brazadas que estaban casi al fondo mi closet y las deje sobre la silla de mi escritorio. Bufé sentándome en mi cama con intención de revisar un rato mi celular, pero ni siquiera alcance a encenderlo cuando escuche la puerta del baño siendo abierta. Me senté en el borde para mirar a Mark, pero desvíe inmediatamente mi mirada hacia otro lado mientras se me había dificultado un poco tragar saliva, yo le pase una polera por algo, para ponérsela, entonces, ¿Por qué mierda sale sin ella?.

—Es raro estar sin ropa interior, pero no es incomodo.

Reuní el suficiente valor para mirarlo, las gotas del cabello mojado aún caían de las puntas hacia su rostro, tenía la polera en su hombro. —¿Tienes hambre?. - le pregunté. "Uy, lo mal pensé".

Asintió. —Un poco.

Carraspee tratando de no mal pensar. —Tengo fideos instantáneos.

—Me sirve. - sacudió el cabello para que las gotas de agua no le cayeran a la cara.

Remoje mis labios y me levanté para ir a la cocina a hacer un plato escapando de allí lo más rápido posible, realmente quiero reírme de mí mismo, antes me hubiera quedado solo para fastidiarlo, pero me molesta que ahora actué como si estuviera, no lo sé, ¿normal?, a ver, antes no podíamos vernos sin terminar con heridas, tal vez, todavía es así, pero no, ni siquiera yo me entiendo.