Cap 17

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Midoriya después de encontrar a quien buscaba gracias a la chica del clan de asesinos, ahora habla con sus maestros para darles el reporte.

—Pensé que ibas a llegar un día antes de la prueba— dijo Aizawa.

—Esta información la encontré a último momento, por eso me atrasé— contesta el pecoso.

— ¿Estás bien? Tienes ojeras y estás pálido—

— Me pasé dos días sin dormir para poder encontrarlo lo más rápido posible— respondió el chico —del tipo no saque información no tuve tiempo, de eso se encargarán ustedes—

—Si lo sabemos— confirma su maestro.

—Bueno, primero esto— sacando un arma —no sé ¿Qué rayos lanza esa cosa? Lo único que sé, es que lo que toca lo desintegra en segundos, es demasiada peligrosa aunque su velocidad no es tanta, por eso lo pude manejar—

— ¿Cómo rayos hacen esas cosas? — Pregunta con impresión su Sensei —ya dime que es lo otro, dijiste que esto es lo primero—

—Estos es un bono, así que exigiré más dinero— arrojando una bolsa al escritorio.

— ¿Qué es eso? —

—Droga—

— ¿Qué tiene de especial que trajiste eso? —

—Bueno, digamos que puede mejorar tu quirk por varios minutos, una mejora demasiada grande, esto es de los Yakuza y se están haciendo muy famosas, criminales que no son nada peligrosos desde que lo usan llegan a un nivel impresionante—

—Así que ellos se empezaron a mover de nuevo— dice Aizawa con una voz perezosa —y más problemáticos que nunca— dijo lo último en un tono serio —fueron tres semanas bien invertidas, Midoriya, llevaremos esto a la policía para que analicen esto, luego te diré si te necesitaremos—

—Al menos dame dos semanas de descansos, de verdad lo necesito—

— ¿Hay algo más que quieras reportar? —

—Nada más— ocultando el encuentro con la asesina —iré a la U.A, dijiste que todos aprobaron y están preparando una fiesta— y de un bostezo salió de la oficina.

En la noche

Todos están celebrando por tener sus licencias provisionales, aunque Izumi está algo desanimada — ¿Acaso no piensas llegar, hermano? —dijo en un susurro.

—Oye Izumi ¿Qué tienes? — pregunta Kendo.

—Nada— contestó con una voz apagada.

—Sé que es por Izuku— respondió Itsuka —apenas empezamos, él llegará—

Cinco minutos después el peli verde llegó, su hermana lo notó y sus ánimos subió de una forma drástica — ¡Hermano! — Dice con felicidad mientras corre hacia él, así abrazándolo —eres un tonto, pero te quiero— apretando el abrazo, escondiendo su cara en el pecho del pecoso.

—Por fin te dignas de llegar— le reclamó la peli naranja.

— ¿Por qué tardaste tanto? Pensé que no ibas a venir— dijo Izumi con un puchero — ¡Espera! — Habló algo preocupada — ¿Y esas ojeras? ¿Por qué estás tan pálido? —

—Tuve un inconveniente al último momento, esa es la razón de porque no pude verte hacer la prueba, lo siento, no he dormido nada por dos días— (no le puede decir que no logre dormir, solo por tener pesadillas sobre esa chica) con un escalofrío recordó a la asesina.

Cada vez más profundo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora