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Viejos acuerdos.


Eran cerca de las once de la noche y recién habías llegado a casa, tenias las espalda bastante sensible producto de las casi diez horas de tatuaje, pero las habías resistido muy bien, de hecho dormiste cerca de cinco.

Apenas llegaste a tu apartamento, lo primero que hiciste fue darte una ducha, por suerte tu amigo te había puesto membrana (esa tela plástica) para proteger el enorme tatuaje que iba recién a la mitad, de cualquier suciedad y además no deberías preocuparte por manchar las sabanas o que se te pegaran al dormir, porque por supuesto dormirías en cueros para evitar cualquier tipo de rose.

Hoy Jimin tenia turno en el club así que no llegaría hasta muy entrada la madrugada. Estabas muriendo de hambre, Hardy te había ofrecido llevarte a comer pero el debía cubrir tu turno en el club, así que debió correr luego de haber tatuado todo el día. Estabas terminando de poner los cubierto sobre la mesa de frente a tu sofá, pero dos toques en la puerta te detuvieron a volver a la cocina.

Rogabas y pedias al cielo que no fuera en quien estabas pensando, no tenias animo ni ganas de verle nuevamente, todo había sido muy incomodo y debías pensar en un par de cosas antes de verle nuevamente.

Con pesadez arrastraste tus descalzos pies por la sala, sujetaste la manilla de la puerta y abriste. Cuando le viste, diste instintivamente un paso atrás. ¿Enserio estaba aquí?.

- Hola, disculpa por presentarme así pero necesitaba venir a ver como estabas.- Namjoon miraba hacia el piso y luego te miraba a ti, pero no era capaz de sostenerte la mirada.

- No puedo mentir, no esperaba verte aquí Namjoon.- Sabias que era muy mala idea lo que estabas a punto de hacer, pero ya estabas tan jodida que una mala decisión más no haría la diferencia

- Pasa, estaba por comer algo y no dejare que mi comida se enfrié.- Le diste la espalda y te fuiste caminando hasta la cocina.

Escuchaste sus pasos entrar en la casa y luego cerrar la puerta. Tu seguiste con tu plan de servir la comida y con tu plato de arroz y pollo con verduras volviste a la sala, donde el chico estaba de pie.

- Toma asiento, no pienso golpearte de nuevo a no ser que lo busques nuevamente.- Namjoon sonríe pero con incomodidad, este se sienta justo en el sofá de frente a ti.

- Se que soy a quien menos quieres ver en este momento, y de verdad no hubiera venido de no ser porque ayer quede muy preocupado por ti.- Sabias que hablaba del hecho de haberte encontrado en las condición en la que lo hizo, lo que solo te producía más vergüenza al recordar.

- No tienes porque preocuparte, borracha trate de quitarme el vestido y me di una buena en el suelo, eso fue todo. Me excedí con la bebida.- El chico te vio y suspiro.

- Vamos Boram, se perfectamente que nada de eso paso, ¿Por que mientes? alguien te hizo eso.-

- ¡PORQUE ES MAS FACIL BIEN!.- Soltaste con un desgarrado grito.- Namjoon si alguna vez me tuviste algo de estima en lo que fue nuestra retorcida "amistad" por favor date cuenta que todo esta yendo como la mierda para mi, se que siempre fuiste honesto conmigo y jamás paso por tu cabeza engañarme o venderme falsas promesas, pero asume que todo se fue un poco, no, no un poco, bastante a la mierda.- Corregiste tus palabras.- Siempre disfrute del sexo junto a ti y lo sabes, pero al menos al inicio tenias la decencia de preguntar como estaba, como había ido mi día o mierdas banales como las de las personas que se conocen. Pero tú, Namjoon comencé a ser tu escape, me usabas para descargar lo que sea que necesitabas botar, y yo fui tan estúpida para dejarte hacerlo.- Diste una larga pausa para respirar, mientras el chico apenas te podía ver a los ojos.

Of Like, Money & LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora