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Visitas sorpresas. 

- Estas segura que estas lista como para iniciar hoy, no quiero quedarme como hijo único.- Te vuelve a dar la lata nuevamente tu hermano, y es que este se veía más nervioso que tú por el hecho de tener que presentarte sobre le aro hoy por la noche. 

- Ya te dije que practico mucho, además recuerda que estuve todo un año en el taller circense, de algo habrá valido tantos moretones y caídas.- Le respondiste a tu hermano mientras preparabas todas tus cosas y seguías caminando de un lugar a otro en tu habitación, poniendo en tu bolso todo lo necesario para esta noche. 

- Pues por eso mismo te lo digo tonta, no quiero que te vayas a lastimar.- Tu hermano podía ser un dolor en el trasero las veintitrés horas del día, porque aquella hora restante, era un hermano muy preocupado. 

- Tranquilo que no me pienso caer ni quebrar nada, que la miserable de Jia ni seguro medico nos tiene la muy hija de puta.- Escupiste con rabia, y no era para menos. 

- Ya no seas así, no paga nada mal, y eso lo sabes, además que sabes que  club, tan tan legal no es.- Y la madre (que es la misma que la tuya) que lo pario, porque ese maldito afán de ver la jefa como buena persona. 

- Claro eso puedes decir tú, que te ganas lo suficiente con sacarte un par de trapitos sobre el escenario, muy distinto a lo que yo cobro a final de mes, así que no me vengas con tus mamadas de defender a esa miserable de mierda, ahora me voy, necesito llegara  tiempo para reponer las putas botellas y además alistarme para la presentación. Nano, ni se te ocurra aparecerte por el club, mira que te conozco y eres capaz de subirte al escenario para bajarme si te pone nervioso, no te atrevas a llevar tu blanco trasero al club.- Le amenazaste muy seria, sabias de sobra que era capaz de bajarte del cabello del aro por sus nervios de cristal. 

- No pienso ni si quiera acercarme, además que tengo planes.- Ya sabias a que iba si te decía que tenia planes. 

- Llévate los putos condones Jimin-ah, mira que apenas te cuidas a ti mismo, menos podrías con una bendición, ahora si me largo, nos vemos mañana.- Le diste un beso en la mejilla y saliste a toda leche del apartamento, el transporte publico en esta zona era pésimo y no te podías permitir tener un auto, por ahora al menos no. 

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- Este verano de mierda me esta matando.- Oíste a Hardy quejarse desde la bodega. 

- No hay nada mejor que el verano, puedes estar al aire libre, irte al lugar que sea a dar un paseo y andar ligerita de ropa, ¿Qué mejor?.- Le dijiste con una enorme sonrisa. 

- Que con lo de andar ligera de ropa me tientas, pero no, no me harás cambiar de opinión, a quien carajos le puede gustar el calor, es anti natural.- Sabias que enfrascarte en una discusión con Hardy el cual era pro invierno, mientras que tu le hacías campaña de odio a este, no podrían llegar a ningún acuerdo, así que simplemente lo dejaste ladrar y volviste a tus labores. 

- Park, no estaré esta noche en el club para ver tu numero, pero mi hijo queda a cargo hoy, a por cierto, ya te escogí el traje para hoy y es sin discusiones.- Tenia que estar tomándote el pelo. 

- ¡Pero ya compre los trajes y los aprobaste!.- Le reclamaste de inmediato, y era lógico que lo harías, si te habías gastado una pasta en los putos corses.

- Y están bien, pero esos los usaras para noches especiales, ya te deje los trajes que podrás usar en los días de trabajo normal, así que puedes ir a los camerinos y escoger tu traje, no me decepciones, sabes que mi hijo es de gustos tan o más exigentes que los míos, así que deberás hacerlo perfecto.- Aparte de no pagar quiere un show de primera, vieja sin vergüenza, pensaste para ti misma, rogando que las palabras no se te escaparan. 

Of Like, Money & LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora