Iniciando el segundo año de universidad y apenas había sobrevivido al primero. Para Park Boram (Bora para su circulo más cercano) la vida de adulta independiente no era nada parecido a como se mostraba en todas aquellas películas baratas y clichés...
Aun te costaba lidiar con las pocas horas de luz que el día aquí en Copenhague te brindaba. No estaba en tu reloj biológico el que el sol se escondiera a eso de las tres de la tarde, y por lo mismo andabas con un humor de perros.
Aun que posiblemente eran las satánicas hormonas del embarazo las que te tenían de aquella manera.
- Es que no retengo, te juro que por más que trato de hacerlo mi humor de los mil demonios sale de inmediato, yo no me levanto diciendo, ok hoy es un buen día para ser una maldito ogro, pero me sale sin esfuerzo, es que yo creo que la carga femenina mía más la de Yoon-so, es dinamita pura, aun no nace y ya se que será de armas tomar, sus extremidades en mis costillas lo apoyan.- Jihye rio ante tus palabras, mientras ella acariciaba la enorme panza que ahora con ocho meses tenias.
- Cuento los días que faltan para poder conocer a mi pequeña.- Cada vez que Jihye hablaba de su hija, sus ojos brillaban cual diamantes.
Durante todo este tiempo, pudiste ver desde primera mano como tanto ella como Jungho, esperaban a su hija con tanto amor y esmero. La maternidad jamás fue algo que desearas o fuera de tu menor interés, pero si debías admitir que te llenaba el corazón de calidez el presenciar, como se vivía la paternidad cuando esta era deseada, esperada y amada.
Tu primer pensamiento fue un rotundo NO, cuando Jungho te ofreció un trato, en el cual por una enorme suma de dinero, tu serías el útero subrogado, de él y de su verdadera esposa. Del solo hecho de pensar en que tendrías que tener a un ser humano dentro de ti, te había hecho negarte de manera tajante, claro, hasta que conociste la historia de amor de Jungho y Jihye.
Era un historia larga, que comenzaba con el padre de Jungho, el señor Jeon, el fundador de aquel imperio, padre tambien de Jeon Baehyung, el cual es su medio hermano y padre de... si de Jungkook.
Todo comenzó cuando la cabeza del imperio Jeon, tuvo una aventura con una chica que conoció en un banco, ya que ella era secretaria allí. Ella se enamoro profundamente de èl, y Jeon Taeyang así mismo le juro amor eterno, pero lo que no sabia la madre Jungho, es que el patriarca de los Jeon, era casado y ya tenia un hijo.
Para hacer esa amarga historia algo más corta, ella se hizo cargo por si sola de su hijo, el tipo siempre cumplió con darle una cuantiosa cantidad mensual de manutención, pero jamás fue capaz de entregarle algo de afecto o simplemente el estar allí para él. Debido a eso Jungho siempre uso su apellido materno, y por lo mismo nunca supiste su parentesco con los Jeon.
Cuando Jungho tenia diecinueve años su madre murió, y allí al parecer a su padre le bajo algo de "instinto paterno" y decidió llevar a Jungho a vivir con él, todo iba bien hasta que su padre descubrió que Jungho se había enamorado de una chica... demasiado corriente para él, y por supuesto como un ser tan calculador y frio como lo era su padre, no desaprovecharía la oportunidad de hacer algo útil y beneficioso con la vida de su hijo. La idea era casarlo con la hija de uno de sus socios, así este quedaría a cargo de aquella empresa, trayéndole jugosos beneficios al imperio Jeon. Por supuesto Jungho se negó tajantemente a esto, pero su padre jamás perdía.
El hombre sin demasiado esfuerzo, supo dar con Jihye, a la cual trato de manera horrible y humillante, le dijo que por alguien tan corriente como ella, su hijo arruinaría su futuro y de paso el futuro de su familia, que si realmente lo amaba lo dejaría ir, y no se convertiría en la piedra en el camino de Jungho.
¿En que termino todo ese asqueroso y cruel discurso?.
En una sumamente herida Jihye la cual fue engañada por las tretas del padre de Jungho. Ella salió de su trabajo en un estado bastante alterado y lamentable, su cabeza daba tantas vueltas y su corazón aun más, estaba tan ida en todo lo que acababa de enterarse que no sintió que sus pies habian caminado por inercia hacia la calle, tampoco escucho el incesante pitido del auto, no fue consiente de aquello hasta que se despertó en una sala de hospital, paralizada de manera permanente de la cintura para abajo.
Eso hizo que Jungho se alejara de manera permanente de la familia Jeon y dejara todo por Jihye, Jungho mantenía un escaso contacto con su progenitor y su hermano, el cual era casi por obligación, el único Jeon que quería en su vida, era su sobrino Jungkook (fueron sus propias palabras).
Jungho mantuvo todos estos años a Jihye en el completo secretismo, temía que su familia se interpusiera nuevamente y no podría perdonarse si ella vuelve a salir herida, aun no se perdona lo del accidente.
Por toda esa historia, por la encantadora y dulce personalidad de Jihye, y por ver los deseos y anhelos que tenían de poder tener un hijo de ambos, es que terminaste aceptando aquella descabellada y muy atemorizante propuesta.
Dinamarca es el país con mejor tecnología y campo medico para la fertilidad, Jungho y Jihye tenían muy pocas chances de poder conseguirlo, por eso recurrieron hasta un especialista de renombre aquí en Copenhague, no había marguen para el error, cuando solo habian podido tener un embrión para la fecundación subrogada, por lo mismo es que hasta tu lloraste de la felicidad cuando la prueba de embarazo dio positivo y el examen medico lo confirmo, ya que como en todo habian riesgos.
Habian días en los que te cuestionabas si serias capaz de lidiar con todo esto, tambien habian días en los que creías había sido una mala decisión, que no estabas hecha para cargar con un vientre de embarazo, ser madre jamás fue de tu gusto, por eso estabas muy asustada con todo, pero cuando veías el rostro lleno de amor de aquellos futuros padres, lograbas conseguir el coraje necesario para seguir adelante con todo esto.
Y tambien una parte de todo esto, te estaba ayudando a sanar las heridas que aun se manutenían muy frescas en tu corazón, necesitabas saber que todo esto valdría la pena, te haría más feliz y plena, que haberte alejado de todos era lo correcto y lo que necesitabas para sanar y perdonarte a ti misma, porque aun habian muchas noches en las que te seguidas odiando por todas aquellas malas decisiones tomadas en el pasado, y era curioso, era curioso ver que la primera vez que sentías el haber tomado una buena decisión, ni si quiera había sido por ti del todo, si no que tambien era para poder hacer feliz a dos personas que enserio lo merecían más que nadie.
¿Será que él te perdonaría alguna vez? , Difícil cuando incluso tu aún no le perdonabas.
Te sentías patética, pero incluso si no lo había hecho, una parte de tu corazón deseaba en silencio que aun odiándote, el castaño no haya sido capaz de olvidarte, porque algo así era imposible para ti.
Después de todo gracias a él, habías amado por primera vez, aun que habías perdido bastante en el proceso.
Solo quedaba aferrarte a tu nueva vida, a la nueva familia que habías hecho, y al deseo de cambiar con el fin de ser más feliz.
∗ ⋅FIN ∗
Se que no es el final que todas esperaban,
pero quizás les consuele saber...
que esta historia no termina aqui.
que tendremos más sobre Boram en nuestra secuela llamada...
Of Pain, Change & love.
Gracias por leer de inicio a final, y espero le haya gustado aun que su final no fuera perfecto, pero era necesario para que nuestra bora pudiera sanar ese corazoncito tan machucado, además... ya tendremos más de ella.
muchas gracias <3
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