Narra Jazmín
Cuando terminamos nos quedamos acostados pero mi celu empezó a sonar.
—Hola?—atiendo.
—Hija donde estas?—me pregunta mi papá.
—Estoy en lo de Flor.
—Bueno a que hora volves? Queres que te busque? Yo estoy saliendo del Monu.
—Quedate—me dice Exequiel y yo lo quiero matar.
Espero que mi papá no haya escuchado.
—Emm...me quedo a dormir acá—contesto y Exe sonríe.
—Bueno, cuidate hija—vi que Exequiel iba a decir algo, seguro a meter la pata entonces le tape la boca.
—Si pa, nos vemos—corto y miro a Exe—Chango deja de hacerme eso boludo.
—Le iba a contestar a mi suegro nomás—dice mientras se aguanta las ganas de reírse.
Nos metimos a bañar porque estábamos transpirados, claramente no solo a bañarnos.
No podía dejar pasar la oportunidad de decir esto.
—Y va el tercero y va el tercero—digo riendo cortando el beso y él me mira mal.
—Así que sos graciosa?—me mira desafiante.
Me encanta.
Cuando salimos nos vestimos, bueno solo la ropa interior.
—Te podes poner esta?—me dice sacando una camiseta de Boca mientras me sonríe intentando convencerme.
—Nunca en la vida me voy a poner eso.
—Dale porfi—me hace puchero—te va quedar perfecta.
—Ni loca Chango. Una de mi Selección hermosa si—el bufa pero saca una de Argentina.
Nos quedamos paveando como siempre, cerca de las tres y media llegó Cristian.
—Viste los comentarios de la gente en relación a vos?—le pregunto.
—No, estuve tan cansado que llegue y me dormí.
—Te aman Chango, te dicen banda de cosas lindas.
—A ver, mostra—me dice y apoya su cabeza en mi pecho mirando el celular.
—Bueno algunas te tienen ganas pero no importa porque sos mío—jodo y él me sonríe para después darme un beso—todos te re apoyan y quieren que juegues de titular en primera.
—Igual aunque la gente piense eso Battaglia no me pone.
—Ya lo va a hacer solo es cuestión de tiempo, si la rompes—le hago caricias en el pelo.
—Sabes que si me haces eso me duermo ahí nomas.
—Dormí tranquilo—lo miro sonriendo tiernamente porque parece un bebé, le haces unos mimos y ya se duerme.
—Ya que insistis.
Después nos dormimos hasta que nos despertamos temprano por la alarma de Exe.
—Apaga eso nene—me quejo media dormida.
—Me tengo que ir a entrenar—bufa.
—Yo me tengo que ir porque hoy juega la reserva y también tengo que acompañar a Flor a comprar algunas cosas para el viernes.
