Habían pasado unos días del incidente, ambos se encontraban en el auto tomando un starbucks sin mirarse. Rodri no podía verlo sin recordar aquella imagen y lo que había ocasionado, mientras que Tomi no podía dejar de pensar en esas sensaciones cariñosas y afectivas que le producía el menor, pero ambos sabían que era una estupidez, a Tomás no le gustaba Rodri, sólo lo calentaba, mientras que Rodrigo sabía que Tomás podría gustarle pero no de forma sexual, sólo estaban confundidos, eso era todo.
_ Che_ Dijo Tomi, mientras lo observaba de reojo, Rodri se giró hacia el, sus ojos se encontraron por primera vez después de varias horas juntos_ ¿Es idea mía o está todo... raro?
Rodri se rió, para Tomi el sonido de su risa fue como una cura para sus preocupaciones. Le devolvió la sonrisa.
_ Es que no dejo de pensar en..._ Se detuvo, no dejó de pensar en vos chupandomela y ni siquiera lo hiciste_ en...
_ ¿En el beso?_ Dijo Tomi, mordiendo su labio de forma inconsciente, era en lo único que había pensado durante toda la semana, no podía sacarselo de la cabeza. Rodri asintió, mierda, estaba tan cerca de conseguir lo que quería, pero ¿Valdría la pena? ¿Y si las cosas se confundían? Fruncio el ceño.
_ ¿Que pasa?_ Susurró el oji verde, acercándose a su rostro y acariciando su mejilla. Tomi tragó saliva, esto es lo que pasa, deja de ser tan tierno y cogeme de una puta vez, pensó y quitó la mano del menor de su cara_ Ey...
_ ¿Qué pensabas?_ Preguntó, mientras se acercaba mas a su rostro, estaba cansado de la cursilería, quería ir a los hechos. Los ojos de Rodri se intensificaron con la luz de la luna, era de noche y estaban estacionados en la costa, Rodri fruncio el ceño_ Decime...
_Yo..._ Miró sus labios, una parte de el quería salir corriendo y la otra, la otra quería muchas cosas que lo estaban haciendo avergonzar. Tomi sonrió, estaba causando el efecto que quería_ No se si puedo decirte lo que pensé_ Confesó.
_Dejame ayudarte_ Propuso el mayor, pasando sus dedos por los labios entre abiertos del oji verde_ ¿Pensaste en... besarme otra vez?_ Preguntó, Rodri asintió mientras Tomás cortaba la distancia para besarlo, apoyando sus labios de forma dulce_ ¿Así? O_ Pasó su lengua por sus labios, un leve sabor a café_ ¿Así?_ Rodri suspiró, justo en la tecla, pensó el mayor y tomó al menor de la nuca para profundizar el beso, sus lenguas comenzaron a luchar entre sí, Rodrigo parecía más entregado en este beso, como si realmente lo deseara, como si lo hubiera estado esperando, mordió su labio inferior produciendo una queja de su parte_ ¿Sólo pensaste en esto?
_No_ Respondió, con la respiración entre cortada. Tomi sonrió de costado y besó su mejilla, hasta llegar a su cuello, dejando pequeños besos mojados hasta que comenzó a moder y chupar su zona erogena. Rodri soltó un pequeño gemido y se tapó la boca rápidamente, lo que generó que Tomás quisiera ir más lejos, puso su mano en su pecho, latía con fuerza y comenzó a hablarle en el oído, el cuerpo de Rodrigo comenzó a activarse de a poco_ Dios...
_ ¿En tus pensamientos yo... hice algo más?_ Susurró. Rodrigo asintió mientras Tomi comenzaba a bajar su mano de forma lenta, torturandolo, disfrutando de su piel, hasta llegar a su ereccion_ ¿Te tocaba así? O..._ Metió su mano dentro de su pantalón, rosando el pene con sus dedos_ ¿O así?
_Tomi... la puta madre_ Susurró, echando la cabeza hacia atrás, mientras el mayor envolvía la erección entre sus dedos y comenzaba a bombear de forma lenta. Esto estaba mal pero se sentía tan bien, él oji verde comenzó a jadear, sus labios rojos, abiertos y sus pupilas dilatadas. La imagen lo estaba matando, sentía que no podía tener suficiente de Rodrigo, con cada barrera que pasaba, deseaba más y más.
_ ¿Te gusta?_ Susurró, besando sus labios y trabajando más rápido sobre su base. El menor Gimió asintiendo y tomó los labios de Tomás, con brusquedad. El pene del menor se sentía tan bien en sus manos, caliente y duro, quería probarlo, se moría por probarlo.
_Si vas a seguir mirándolo así..._ Musitó y se acercó a su cuello, era la primera vez que pasaba su lengua por su piel, preciono con sus labios dejando una marca roja.
_ ¿Qué? ¿Qué pasa si sigo mirándolo así...? ¿Qué vas a hacer?_ Increpó casi en un gemido, con la voz ronca. Rodrigo no aguanto más, su fantasía rondando por su mente, llevó su mano hasta su cabello y comenzó a empujar su cabeza hacia abajo. Por fin, pensaron ambos, mientras Tomás pasaba la lengua por la punta, mirándolo a los ojos, disfrutando de su sabor de forma superficial.
_Tomi, dale, por favor..._ Rogó, empujando más fuerte y levantando las caderas. La boca del mayor se sentía apretada y cálida, mientras este la tomaba por completo, tocando el fondo de su garganta. Sus ojos marrones vidriosos, con una mirada necesitada y llena de placer, Rodrigo no supo que fue, pero sentía la necesidad de cojerle la boca, fuerte y sin piedad, asique lo hizo, dando embestidas firmes y duras. Esto era todo lo que necesitaba el mayor, ver las caderas de Rodrigo moviéndose, con sus brazos tensos y su cabeza echada hacia atrás, buscando su orgasmo. Tomi comenzó a acariciarse por encima de los jeans_ Si queres tocarte... hacelo_ Susurró. Una sensación extraña, colandose en su pecho, cuando lo vio desabrocharse los jeans, su pene se veía más grande de lo que había imaginado, incluso le producía un placer enorme verlo tocarse, mucho más de lo que se habría esperado.
Esto definitivamente no era correcto.