¿Cuando dejarían de molestarlo? Pensó, mientras leía la nota en voz baja. El estúpido de Ivan no se daba por vencido, encima tenía las agallas de escribirle "Te amo" y tacharlo con una estúpida línea, maldito peli negro que hacia que su corazón volviera a latir de tan sólo pensarlo. ¿Rodrigo sabría de esto? Nunca había intentado buscarlo luego del rompimiento, quizás solo sería una artimaña del más alto. Suspiró y guardó el cuaderno en el cajón.
_ Pedro ¿Vino alguien mientras no estuve?_ Preguntó, el mencionado lo miró de reojo mientras lavaba los platos.
_No... ¿Por qué preguntas?_ Mintió, Tomas frunció el ceño, lo que le faltaba, que Pedro le ocultara las cosas.
_Alguien anduvo hurgando entre mis cosas ¿Fuiste vos?.
_ ¿Qué? ¡Qué Ivan hijo de puta!_ Gruñó. El castaño levantó una ceja. Pedro lo notó_ Bueno, bueno, vino Ivan pero no tiene importancia.
_ ¿Lo dejaste pasar?.
_ No, el paso sólo, es un maleducado el pendejo_ Dijo, mientras se pasaba una mano por la frente_ Perdón, no quería decirte para que no te preocupes al pedo... yo...
_Amor, yo valoro mucho que quieras cuidarme pero no me tenes que ocultar las cosas ¿Entendes?_ Dijo, mientras tomaba unas toallas y caminaba hacia el baño.
_ Pero... ¿Vas a hablar con él?.
_ No_ Mintió. Bueno si Pedro le mentía el también tenía derecho a hacerlo. Una vez dentro de la bañera tomó su celular y buscó su número."Mañana a las 9 am te paso a buscar"
_Oh mierda, esto es muy rápido_ Pensó Ivan, mientras se acostaba al lado de su novio, que se encontraba profundamente dormido. Los rulos caían por encima de sus ojos, se veía tan dulce y sereno mientras dormía, sin esa chispa de mal humor que solía tener cuando estaba despierto. A decir verdad, Rodrigo había cambiado mucho desde que Tomas se había ido, como si hubiera levantado una coraza a causa del dolor por el que había tenido que pasar por ambos chicos y no lo mal entiendan, no había dejado de ser dulce y atento con su novio, sólo era un poco más serio, un poco más duro, como si se atajara a que en cualquier momento podría volver a quedarse solo y lo comprendía, las rupturas no eran simples, solían dejar ese tipo de marcas en las personas.
En la mañana siguiente se preparó intentando no hacer ruido, Rodrigo tenía muchas cosa que hacer durante el día y no quería despertarlo, pero le dejó una nota en la mesada."Voy a encontrarme con Tomi, te amo".
Las manos le sudaban mientras manejaba hacia la casa del mas alto, cómo si el encontrarse con su pasado hiciera que su corazón se acelerara a mil latidos por segundo. El auto se sentía pequeño, el aire acondicionado no parecía funcionar y sus pensamientos se sentían atascados. Supo la razón cuando lo vio parado en la puerta, con su piel blanquísima asomándose por las mangas de su remera y sus mejillas rojas por debajo de sus ojos preocupados. Ninguno sabía que decir, se dieron un beso en la mejilla y estuvieron en silencio por unos minutos, la música parecía no ayudar mucho, alimentaba la tensión, Ivan aprovechó la concentración del mas bajo en la carretera para admirarlo sin disimular demasiado, pensando en todo lo que quería decirle y en cómo debería de hacerlo, hasta que el momento llegó, Tomas frenó en un campo alejado de la cuidad, apagó el auto y lo miró a los ojos. Toda cordura parecía desaparecer en esa conexión entre miradas, las ganas de besarse y no hablar de nada.
_ Eh... ¿Qué queres decirme?_ Preguntó, cortando con la intensidad del momento. Ivan se rascó la cabeza.
_Yo... Yo estoy arrepentido por todo, por haberme comportado como un imbécil, por haberlos dejado, por haber sido un cobarde, por haberme metido entre ustedes en los esland por..._ Tomás hizo una mueca_ Por todo.
_ Esta bien, supongo que ya pasó mucho tiempo y estoy listo para perdonarte_ Dijo, mientras suspiraba_ Pero me dolió, fue horrible verte así, ver a Rodrigo así, verme a mí así... y que volvieras como si nada yo... no podía con eso.
_ Te juro que te entiendo, yo estuve muy mal... tuve que ir al psicólogo en ese momento y ahora, desde que te fuiste... Rodrigo no es el mismo_ Comentó, Tomas asintió, esperando a que le contara más_ Es muy duro a veces, siempre esta de mal humor, que se yo... Te extraña y yo no soy suficiente para él.
_ No creo que no seas suficiente para él, Ivan...
_ Es que no lo culpo por eso, porque nada es lo mismo sin vos..._ Dijo, acercando su mano a la suya, Tomas la tomó con los ojos brillantes_ Solo quiero saber si sentis lo mismo, porque de verdad lo podemos arreglar...
_ Tengo novio Ivan _ Susurró, sintiendo como el peli negro acariciaba sus dedos_ Fue un año difícil y Pedro estuvo ahí para acompañarme, para cuidarme y amarme... Yo lo quiero, no le voy a hacer daño.
_ Pero no lo amas_ Dijo y se acercó a él, tomando su rostro con ambas manos, hace tanto no se miraban así de cerca, Tomas sintió como su estomago cosquilleaba_ Es solo una oportunidad más y te juro que nunca más te vamos a molestar.
_ Me encantaría decirte que si_ Dijo, apoyando su nariz en la de él_ Pero no es tan fácil.
_ Si es fácil_ Susurró y besó sus labios, luego su rostro, dejando pequeños besos por todos lados sintiendo las lágrimas del castaño mojando su rostro.
_ Ivan por favor... no me hagas esto.
_ Vos no hagas esto_ Pidió, mientras volvía a besarlo _ Decime que lo vas a pensar... Solo eso necesito.
_Lo... lo voy a pensar_ Susurró y se abalanzó hacia él, repentinamente tenía a Ivan encima, entrelazando sus lenguas y explorando sus cuerpos, mierda, esto estaba tan mal, le estaba siendo infiel a Pedro en medio de la carretera ¿Cómo volvería a la casa sin que la culpa lo mate? ¿Cómo lo miraría a los ojos de nuevo. A Ivan no parecía importarle, probablemente lo habría hablado con Rodrigo antes, +el siempre parecía comprender todo, pero por alguna razón no estaba allí, por alguna razón él no lo había buscado y eso le pesaba.