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_ ¿Cuanto tiempo más vamos a fingir que no sabemos que Ivan está enamorado de nosotros?_ Reprochó Rodrigo, mientras observaba las gotas de shampo cayendo por el cabello y rostro de su novio. Tomas hecho los ojos hacia atrás y lo atrajo hacia su cuerpo, con miedo a que su piel se enfriara demasiado, colocándolos a ambos bajo el agua.
_ Estaba drogado, no lo dijo enserio_ Susurró, mientras lo abrazaba por detrás dejando suaves besos en su cuello. Rodrigo suspiró_ Aparte... Es Ivan ¿Por qué estaría enamorado de nosotros?_ Lo miró a los ojos_ Probablemente está enamorado de vos solamente.
_ Mira lo que decía_ Dijo largando una risita y besando su mejilla.
_ Es que veo como te mira_ Confesó, con las mejillas un poco rojas. Rodrigo levantó una ceja.
_ Yo también veo como te mira a vos y también veo como vos lo miras a él_ Admitió. Tomás tragó saliva, a decir verdad estaba sintiendo unas mariposas ridículas cada vez que lo veía llegar, cada  vez que escuchaba el sonido de su risa o cuando tartamudeaba al hablar pero también sentía unos celos parasitarios cuando Rodrigo se perdía en su cabellera negra o cuando Ivan se perdía en los músculos del oji verde. Una parte de si, tenía miedo de quedar excluido de esa relación, una parte de sí sentía que si lo dejaban entrar más, quizás ambos descubrirán que no necesitaban a Tomás para ser felices y eso le dolía profundamente_ Te quédaste callado_ Observó, con preocupación en su rostro. Tomás soltó una risita divertida.
_ Yo se que Ivan siente atracción hacia mi y yo hacia el, pero él siempre te quiso a vos en primer lugar.
_ Pero eso fue al principio, ahora las cosas cambiaron y se nota que también le gustas_ Insistio. Tomás mordió su labio inferior.
_ ¿Por qué siento que estas tratando de convencerme de algo?
_ ¿Yo?_ Dijo señalandose a si mismo, mientras cerraba la ducha y buscaba las toallas.
_Si, es todo un plan maestro para que me hagas creer que Iván también me quiere y cuando menos me lo espere, pum_ Dijo de corrido, casi sin respirar.
_ ¿Pum?_Susurró divertido, mientras le secaba las gotas que caían por su espalda. Tomás intensificó la mirada.
_Pum, te escapas con el y yo me quedo sólo... con el corazón roto.
Rodrigo se tomó unos segundos para observar a su novio, ojos brillosos, labios abuertos y un leve titilar en la comisura de su boca. Negó con la cabeza mientras llevaba su mano hacia sus labios, acariciando el latente nerviosismo.
_Lo peor es que lo decís enserio_ Afirmó, asegurándose de ello al ver el entrecejo del mayor arrugarse. Tomás hizo una mueca y lo abrazó, escondiéndose en su cuello_ ¿Vos realmente no sos consciente de lo mucho que yo te amo?
_Me amas, pero eso no impide que ames a Ivan_ Musitó, mientras se corría de su agarre para caminar hacia la habitación. ¿Él amaba a Ivan? ¿El realmente era capaz de amar a dos hombres a la vez? Porque el entendía que no sólo era lujuria, nunca podría haber sido sólo eso, era Ivan, su maldito mejor amigo, lo quería desde la cabeza hasta los pies, desde las virtudes hasta los defectos, incluso podría tomarse el tiempo de contar cada uno de sus lunares y no aburrirse en el proceso, quizás Tomás tenía razón, quizás también amaba a Ivan, pero ¿Por qué se molestaba? Si el también había visto la forma en la que lo miraba, la forma en la que lo tocaba, la forma en la que gemia su nombre, quizás Tomás no quería admitir que también estaba enamorado de Ivan, pero eso no cambiaba el hecho de que ellos estaban enamorados, de que el se moría por Tomas y que Tomas se moría por el, entonces ¿Por qué no podían tener una relación los tres?
_Amor_ Susurró su novio, lanzandole unos boxers y una remera_ El rey de Roma está en la sala, Vestite.

Ivan no sabía que hacia ahí, había pasado sólo un día sin verlos y sus estúpidas piernas lo traicionaron y lo llevaron hasta la maldita casa del oji verde, se suponía que iba a caminar y despejarse. "Creo que estoy enamorado" ¿Cómo había sido tan idiota de decirles algo asi? Podía notar por la mirada de Tomas, que probablemente estaban considerando mandarlo a la mierda, lo veia inseguro, un poco receloso. Rodrigo se aclaró la garganta cuando entró en la habitación.
_ ¿Estas bien?_ Preguntó, sin hacer demasiado contacto visual, se sentía aún terriblemente confundido por lo que acababa de pensar y algo culpable porque ese pensamiento sobrepasaba los límites que se habían impuesto en la relación.
_ No realmente, me siento muy mal por lo que dije el otro día... yo... no era cierto_ Susurró. Rodrigo fruncio el ceño y levantó su mentón con sus dedos.
_ ¿No era cierto?_ Repitió. Ivan tragó saliva, maldito.
_Yo... yo... mierda, si, si es cierto_ Gruñó, tomando el rostro del más bajo y estampando un beso desesperado en sus labios, Rodrigo le correspondió por unos segundos, hasta que se giró hacia Tomas, que los observaba con el ceño fruncido.
_ ¿De verdad te le vas a confesar a mi novio al frente mío?_ Gruñó. Una creciente ira recorriendolo. Su miedo plasmandose en frente de sus ojos. Ivan negó con la cabeza.
_ No Tomi, no quiero ser irrespetuoso ni nada_ Susurró.
_ Pero entras y te chapas a mi novio en mi cara.
_ ¿Pero... no te das cuenta de que no lo quiero sólo a el?_ Tomó su rostro con ambas manos, para mirarlo a los ojos_ También me enamoré de vos, pelotudo.




Su Maldita Sonrisa-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora