VIII. Olvidamos

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Olvidamos

Nos olvidamos de contar estrellas

Y nos enfocamos en destruir recuerdos.

Nos olvidamos de vivir la vida

Y nos enfocamos en arruinar los momentos.

Nos olvidamos de pensar un futuro

Y nos enfocamos en lamentar nuestros fracasos.

Nos olvidamos de recordar cosas lindas

Y nos enfocamos en arruinar el corazón de ambos.

Nos olvidamos que somos humanos

Y nos enfocamos en solo el sufrimiento y dolor.

Nos olvidamos que amamos

Y nos enfocamos en odiarnos mutuamente.

Nos olvidamos que moriremos algún día

Y nos enfocamos en quedarnos solos.

Nos olvidamos de tener amigos

Y nos enfocamos en convertir nuestra partida en una solitaria despedida.


Inuyasha estaba sorprendido de como ese era el primer poema que hacía reaccionar a las personas. Muchos estaban hablando de lo bueno que era, aunque para Inuyasha desde el primero que apareció se dio cuenta de lo muy talentoso que era la persona que se ocultaba detrás de aquellas letras.

Ese había sido el poema que había causado revuelo ese día, todos posteaban una parte del mismo, sin embargo, él quería postearlo completo, que todos conozcan a la persona que escribía eso, pero solo estaban las mismas iniciales de nuevo A. Y.

Inuyasha había estado mirando el registro de alumnos de sus clases los días anteriores y nadie había coincidido con esas iniciales, aunque algunas personas estaban diciendo que ellos eran los autores de esos poemas, de hecho, otros decían que concursarían con esos poemas en los concursos literarios que habrían dentro de un mes en el instituto.

Inuyasha no era participe de esas cosas, pero tampoco opinó en nada, solo que no tenía la sensación de que las personas que habían dicho que eran el poeta oculto lo fueran. Porque si la persona colgaba los poemas sin dejar rastro era porque no quería que nadie conociera su cara, quería mostrar su talento sin que lo señalen.

Un Poema Para TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora