Jeon Dynasty [ Kooktae ]

"16"

-Jungkook

Sus labios dejaron salir aquel nombre mientras se apartaba rápidamente del alfa azabache.

Su mirada gris buscaba por todo el pasillo una señal de que el otro alfa estaba ahí, pero no encontró nada.

Con el corazón en la boca miró al otro alfa, Dongwook, que lo veía con cara de confusión.

-¿Estás bien?-Preguntó despacio- Te apartaste como si hubieras visto a un fantasma

Intentó reírse por lo que había dicho el alfa, pero la verdad su pecho todavía vibraba por aquella sensación de ser visto y su nombre pronunciado.

-Lo siento, Dongwook-Se disculpó.

El alfa negó con la cabeza mientras su mirada negra se posaba en otro lugar.

-No pasa nada-Contestó-Con tu actitud tal vez a tu lobo no le agrado el estar tan cerca.

"En efecto" pensó él omega.

Su lobo le gruñía a Dongwook cuando estaba demasiado cerca o le llamaba "omega bonito" lo cual hacía latir su corazón desenfrenado, pero su lobo solo le gruñía.

El omega no contestó, hizo un voto de silencio. El alfa de cabellos azabaches se mordió los labios y miró su reloj.

-Creo que es mejor que nos vayamos-Comentó-Por la hora dudo que Jungkook venga a descansar.

No se había fijado en el tiempo que había pasado ya. Y en efecto, era ya demasiado tarde para que el alfa viniera a descansar.

"Es mejor que me vaya"

Ante ese solo pensamiento , su lobo comenzó a arañar en su pecho y a gruñir fuertemente.

¿Acaso su lobo tonto quería quedarse y esperar al alfa?

No era estupido, había notado como este se sentía cómodo con Jungkook, incluso se quedaba despierto solo para observarlo mientras estaban en el área de descanso.

Y eso le molestaba.

-¿Nos vamos?

Él omega salió de sus pensamientos cuando la mano del alfa se posó en su hombro, y se sintió tan mal cuando se apartó de su toque. Cuando se alejó.

-Yo...-Carraspeó-Es obligatorio quedarme aquí hasta que pasen las dos horas, o la señora Naheun me regañará.

¡Que maldita excusa fue esa!

El de cabellos platinado, con los nervios a flor de piel, esperaba que el alfa entendiera la indirecta y se marchara.

-Si...-Susurro el de cabellos negros-si te sirve de algo Jungkook siempre se queda en su oficina cuando las reuniones son muy largas.

No sabe el porqué el alfa le dijo aquello, pero antes de que pudiera dar las gracias por la información vio cómo este se dirigía con pasos lentos hacia el final del pasillo, dando media vuelta para alzar su mano y moverla de un lado a otro, despidiéndose.

Esa acción también fue repetida por el omega, y con aquello el alfa desapareció.

Soltando todo el aire que no sabía tenía retenido se sentó en la pequeña cómoda que ahí estaba, la cual era conformado por un pequeño sillón y una mesa con un arreglo encima.

Se quedó ahí largos minutos, esperando al alfa de tez clara que jamás apareció, lo cual hizo enojar bastante al omega. Si tenía tanto trabajo debió de comunicárselo y así no hubiera venido a perder el tiempo aquí.

Se levantó de la cómoda rápidamente, y con pasos rápidos salió del pasillo, buscando la oficina de Jungkook.

-Oye, ¿Sabes donde está la oficina de Jungkook?-Le preguntó a una omega rubia.