Jeon Dynasty [ Kooktae ]

"15"

-Solo me quedan cinco días de descanso.

suspirando agotado, el omega decide tachar de su calendario los días que le quedan de libertad, aun que no es la clase de libertad que cualquier persona pensaría.

Sigue teniendo problemas económicos, sigue chocando con los alfas idiotas que lo odian y por sobre todo...sigue estando atado a ese maldito contrato con los Jeon. Asique la palabra "libertad" no precisamente lo que debería pensar.

Pero a pesar de que las cosas le han venido abajo estos últimos días, su alma y mente se reconfortan al saber que su madre esta bien y pronto estará mejor.

Ayer había visitado a su madre, la cual, según palabras del medico, estaba respondiendo bien a los tratamientos, pero que seria urgente ya una operación, porque los tratamientos no están dando todo lo que se necesita. Por lo que después de una larga charla se encontró con Sully, la cual era muy amiga de su madre y habían perdido el contacto algunos meses atrás.

El omega la puso al día con lo que estaba pasando, entorno a el y a su madre, obviando algunas cosas. Esta accedió a ayudarle en todo lo que podía, y estuvo muy agradecido. Pero lo que hizo que sus lagrimas salieran a la luz fue lo dicho por ella.

"-¿Sabes? incluso sin tener el dinero completo para la cirugía, esta puede ser hecha si tienes, por lo menos, un treinta por ciento de lo pedido-"

Esas palabras hicieron estragos en su interior, hicieron que todo en el se moviera y pudiera ver un rayo de esperanza para su madre. Por lo que ese mismo día intento hacer hasta lo imposible para que su progenitora recibiera la cirugía, pero como esta prohibido que los omegas machos firmen documentos públicos, el caso fue imposible.

Por lo que ahora esta en casa pensado que hacer.

-Diablos, ¡que se pudra este gobierno corrupto!-Bramo con enojo.

Desde la mañana estaba buscando una solución a su problema, algo para que le realizaran aquella operación a su madre, pero gracias a las malditas prohibiciones que tienen todos los omegas machos es imposible...y solo le queda apelar por una opción suicida.

Llamar a su abuelo.

Ese ser despiadable que solo a buscado el beneficio propio y de los que el considera. Una persona sin corazón que lo ve como una aberración. Sus ojos siempre están teñidos de odio hacia su persona.

No pensara en el si no fuera porque la vida de su madre esta en riesgo, de lo contrario ese hombre no seria ni un pensamiento.

Dio un pequeño brinco cuando la puerta principal fue tocada. Estaba tan metido en sus pensamientos sobre aquel hombre que el ruido provocado lo tomo de sorpresa.

Carraspeo.-¿Quien es?.

Las o la persona detrás de la puerta no emitió ni un sonido, cosa que hizo que los sentidos del omega se agudicen.

-¡Taehyung! ¿Estas ahí? Somos nosotros, Yoongi y la oxigenada.

-¡No me digas así!

El omega de hermosos risos platinados pudo respirar con normalidad. El nudo que se le habia formado en la garganta desapareció en cuanto las reclamaciones por parte de Yeji se escuchaban fuertemente a través de la puerta.

-¡Eres un gey!

-¿Si sabes que hay hombres con útero no?.

Riéndose bajito, el omega se acerco a la puerta, tomando el picaporte y abriendo esta, revelando una de las mas graciosas escenas que a visto. Yeji ahogando a Yoongi en un matorral.

-¡oh, Tae! Pensé que no estabas.

-Me quede en silencio para escuchar tus riñas.

La, ahora rubia, le sonrió entre graciosa y apenada, y se alejo del cuerpo del peliverde, por lo que este pudo sacar su cabeza de los matorrales, con algunas compañías como ramas y hojas secas.