Jeon Dynasty [ Kooktae ]

"21"

-Jungkook

-Sullyon

El alfa sintió su garganta seca al visualizar quién está frente a su persona. Sus ojos mostraban sorpresa pura y algo de incredulidad, como si no creyera que estuviera allí.

La omega de larga cabellera rojiza comenzó a acercarse con cautela al alfa. Cada paso sus tacones resonaban en toda la habitación, y se oía el eco tras el silencio de los presentes.

Cuando estuvo lo suficientemente cerca apoyó su palma en la mejilla de Jungkook, dando leves caricias con su pulga, apretando estas un poco, no aguantando la emoción en su cuerpo.

-Estás aquí-Fue lo que salió de la boca del alfa, consternado. Nunca espero volver a verla en ese lugar; su presencia no era muy deseada por todos.

-Jungkook tú-

-¡Te dije que esperarás Sullyon!

La estruendosa voz de Jihyo sobresaltó al omega, el cual estaba concentrado en la interacción de Jungkook y aquella mujer.

¿Quien era ella?

Jihyo avanzó rápidamente y se ubicó al lado de la omega, su cara era estoica y su ceño estaba más fruncido que nunca; la respiración era irregular, como si hubiera corrido un maratón.

-Te ordene que te quedarás abajo hasta que madre llegara, ¿a caso no escuchaste lo que te dije?-Reprocho con enojo, su voz siendo el instrumento usado para ello.

-Pero yo quería-

-¡Tenias que obedecer! ¡Nada más!-Le gruñó en la cara, tomando su muñeca con fuerza para salir de allí-Espero y madre no se enoje por tu-

-Sueltala

La voz gutural de Jungkook salió como un estruendo que hizo temblar todo. Jihyo sintió su cuerpo crisparse y sacudirse brutal mente cuando el alfa se acercó como una ráfaga de viento y le sujetó la muñeca fuertemente, causándole daño.

-Jungkook-Dijo asustada la omega, intentado zafarse de su hermano, más, cuando miró el rostro de este, sintió hasta su alma removerse cuando los ojos rojos de su hermano se clavaron en su persona.

Las Iris de Jeon habían cambiado de color, siendo este un rojizo muy brillante, capaz incluso de verse de noche. El alfa apretó nuevamente la muñeca de la omega, y un grito de horror por parte de la pelirroja se escuchó.

-¡Basta Jungkook!-Rogó desesperada, viendo cómo de los ojos de la contraria caían lágrimas saladas por el dolor recibido. Sus rodillas había caído al suelo mientras que su muñeca seguía en alto, siendo sujetadas con brusquedad por el alfa fuera de control.

-No la vuelvas a maltratar en mi presencia-Bramó con ira el alfa, torciendo mucho más la muela contraía y escuchando el chillido y grito de la omega.

-¡M-me duele, déjame!-Manoteo Jihyo, su voz haciéndose pequeña y aguda por la fuerza y el dolor que estaba experimentando.

El omega macho solo se quedó en medio de la sala, mirando todo con horror. Sus músculos se habían paralizado desde que Jungkook usó su voz de alfa, y su cabeza no hacía más que bombear fuertemente. Si cuerpo temblaba al igual que su labio inferior, y sus ojos, abiertos hasta más no poder, observaban como la omega era doblegada por el alfa.

Estaba asustado.

Por primera vez en toda su vida sentía miento de un alfa. Sentía terror de lo que verdaderamente podían llegar a hacer. Jungkook podría llegar a hacer.

Su corazón se agitaba con violencia cada vez que oía a Jihyo gritar de dolor y suplicar entre lágrimas que la soltara, que le rompería la muñeca.

Un grito más salió de su boca, y después alguien entró.