Jeon Dynasty [ Kooktae ]

"01"

Podía oír la brisa mañanera ondear los arbustos y los árboles cercanos a él. Sentía cómo las hojas de estos se quebraban al llegar al suelo, siendo el señor "Otoño" el causante de esa escenografía tan típica que vemos en los cines.

Las hojas otra vez se quebraban, pero con más fuerza. Sentía los pasos de alguien hacia su dirección, pero el sol saliendo desde el Este le daba de lleno en la cara, haciendo que no pudiera abrir los ojos.

—¡Vamos Taehyung! Si no levantas tu sucio trasero llegarás tarde—. La voz familiar de Hoseok, su mejor amigo, hizo que riera entre dientes.—Además, a tus padres no les gusta que te escapes de casa a media noche para quedarte aquí.

La sonrisa se le borró casi al instante, y dando un suspiro acató la orden de su amigo, parándose todavía con los ojos cerrados y dándole media vuelta.

Cuando sintió que el sol ya no alumbraba su cara sus ojos color gris se abrieron, dejando ver una pequeña molestia en ellos.

Vio cómo Hoseok abría la boca para hacer un comentario, así que agachándose  para recoger su mochila, pasó de largo a su amigo, quien lo miró con mala cara por ser ignorado.

—Se que no te gusta que te lo mencione Tae, pero debes dejar de hacer eso, no puedes seguir preocupando a tu madre asi TaeTae...—.La cara del rubio se deformo en disgusto puro. Y Hoseok no tuvo nada más que comentar; sabía que el rubio odiaba hablar sobre sus padres y sus escapadas nocturnas hacia su casa. Así que se sintió mal por él y lo miro a los ojos.

Taehyung suspiró.

—Agradezco que te preocupes por mi Hoseok—. Dijo, suavizando su mirada cuando vio la cara de cachorrito de su mejor amigo; así que posando una mano en su hombro le dijo—Sabes mejor que nadie que no me gusta hablar de eso estando aquí Hoseokie, así que por favor, no hablemos sobre mis padres por esta vez.

El Castaño hizo un puchero,y restándole importancia le sonrió a su mejor amigo, quien también le devolvió la sonrisa.

—Eres un bobo tae—. Ambos rieron por lo comentado, y después se hizo un silencio cuando el estómago del rubio hizo claras señales de estar inconforme —.Oye, ¿quieres desayunar aquí? mi mamá hizo unas tostadas con queso y jugo de naranja.

El rubio, queriendo aceptar la deliciosa oferta tuvo que negarse, llegaría tarde a casa y no quería ser regañado otra vez por su madre.

—Lo siento hobi, será para la próxima—. Dijo, llegando hasta la puerta de entrada a la casa de Hoseok.

Y al entrar, un delicioso aroma a naranjas estaba inundado en la casa completa, haciendo más evidente a su estómago las ganas de alimentarse.

Ambos se acercaron a la cocina, para ver a la señora Jung, madre de Hoseok,de espaldas, la cual casi suelta el cucharón del susto cuando los vio parados ahí, frente a la entrada de la cocina.

—¡oh! Hasta que por fin entran, pensé que se quedarían en el pateo trasero un poco más.—Expresó, mirando al rubio —¿Quieres Tae?.

La señora Jung señaló con sus dedos unas ricas tostadas recién hechas que estaban servidas en la isla de la cocina.

—No gracias señora Jung, llegaré tarde a casa, así que será para la próxima—. Se excusó un poco avergonzado y se acercó para darle un abrazo a Hoseok, en señal silenciosa de que se iba y se acercó a la puerta principal.—¡Adiós señora Jung!

—¡Adios tesoro!

Cerró la puerta tras de él y salió de la casa un poco apresurado esquivando a las personas que iban en contra de su dirección. Necesitaba llegar a casa pronto.