Capitulo 23

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''Con los años he aprendido, que los hombres más felices no son los que buscan muchas mujeres... si no los que en una encuentran todo lo que buscaban''-Sergio de Sa.

Las voces formando una armonía por sobre la melodía de una guitarra me daban la fuerza necesaria para seguir trotando sobre la cinta. A pesar de que aún tenía el tobillo delicado, la semana pasada me había inscrito a un gimnasio para mantenerme saludable. Mi kinesiólogo me había dicho que podía mantener un trote lento y que con el estiramiento necesario no me quedaría resentido. Al menos hasta ahora podía seguir con el mismo ritmo con el que había empezado. La gota me caía por la frente y bajé la velocidad de la trotadora al ver a Adrien frente a mí de brazos cruzados.

-¿Qué haces aquí?-Le pregunto jadeando por la falta de aire.

-Te he venido a recoger.

Detengo la cinta y me bajo de ella. Enseguida tomo la toalla, que cuelga sobre la barandilla, para secarme el sudor del rostro.

-Almorzamos juntos ¿Lo recuerdas?

Niego con la cabeza.

-Se me ha olvidado por completo. Lo siento mucho, Adrien.

-Está bien.

Le sonrío y le tomo la mano para entrelazarla con la mía mientras salimos del gimnasio y nos dirigimos hacia las escaleras.

-¿Mañana es la cena con tu familia?

-Sí.

Era marte y estábamos en plena semana de los exámenes parciales antes de Acción de Gracias. ir al gimnasio de alguna forma me distraía. Durante estas últimas semanas Marinette, Nathaniel y yo hemos estado inventado una coreografía que sería evaluada. Representa la vida moderna. Como la gente envejece rodeada de cosas superficiales y al final de la vida no disfruta lo que realmente importa. La profesora al ver nuestra representación nos da un sobresaliente. Nos pide si podemos presentarlo en el evento a realizarse unos días después de Acción de Gracias. Marinette no deja de hablarlo hasta que salimos del conservatorio y bajamos la escalera. En plena exclamación se queda en silencio y mira a Adrien quien me espera al final de las escaleras. Marinette me mira y luego vuelve su mirada al chico de ojos jade. Sonríe y me pellizca el brazo.

-¡Auch!-Digo con una voz quejumbrosa y me acaricio el brazo.

No culpo su comportamiento porque es tan evidente que Adrien y yo estemos saliendo. Cuando Adrien me ha visto, su sonrisa se ensanchó y los ojos le brillaron. No podré nunca a acostumbrarme a este lado de él. Tan caballeroso y tan detallista. Es como si siempre estuvo ansioso de que ocurriera algo más entre nosotros.

Adrien me rodea la cintura con un brazo y me besa la coronilla.

-He salido antes-Me dice volviendo a besar ahí mismo donde mantenía sus labios.

Marinette deja de sonreír cuando mis ojos se dirigen a ella y tartamudeando se despide de nosotros.

-¿No se lo has dicho?-Adrien pregunta cuando Marinette no está cerca de nosotros. Yo niego con la cabeza separándome de él.

Él se encoje de hombros. Sé que le molesta que quiera ocultar lo nuestro a nuestros amigos y formaría una discusión por esto pero se contiene porque sabe que no me gustan las demostraciones de afecto en público y como se lo he dicho la semana pasada preferiría mantener nuestra vida privada... Privada.

Cuando ya hemos dejado el conservatorio atrás entrelaza nuestras manos y me acerca a él. Puedo ver algunas miradas hacia nosotros. No sé como nos veremos para el resto de las personas pero creo que no hacemos una mala pareja.

Beethoven (Adrichloe)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora